Fallo de Casación

Niegan pedido de libertad para Robledo Puch

Télam

El Tribunal de Casación Penal bonaerense rechazó un nuevo pedido de otorgamiento de libertad presentado por Carlos Eduardo Robledo Puch, el mayor asesino múltiple de la historia criminal argentina, quien lleva preso 43 años, informaron fuentes judiciales.

La resolución fue adoptada por la Sala III de Casación, integrada por Ricardo Borinsky y Víctor Violini, tras evaluar que el condenado “muestra que no reúne las condiciones para el reingreso al medio libre a través de la libertad condicional”.

El fallo se sustenta en el informe del Departamento Técnico Criminológico que concluyó que Robledo Puch “carece de mentalidad reflexiva del accionar transgresor, reconociendo tan sólo ser autor de los robos cometidos con el fin de ayudar a los más necesitados, no así el resto”.

La defensa del asesino múltiple había solicitado la libertad del hombre por considerar que cumplió la pena a reclusión perpetua y que el agravante de “reclusión por tiempo indeterminado es inconstitucional”.

La resolución del Tribunal destaca que Robledo Puch no reconoce los hechos cometidos entre 1971 y 1972, es decir “11 homicidios agravados, uno en grado de tentativa, otros 16 robos simples, dos de rapto, un número igual de hurto simple, homicidio simple, robo agravado, dos violaciones agravadas, abuso deshonesto y daño, por los que se lo condenó a reclusión perpetua, mas la accesoria de reclusión por tiempo indeterminado”.

La Sala III negó el pedido y dispuso que el detenido quede a disposición conjunta del juzgado de Familia de Turno de San Isidro y, la Sala I de la Cámara de Apelación y Garantías en lo penal de esa localidad, en razón de “la peligrosidad dictaminada y considerada”, en los informes que constan en la causa. Robledo Puch fue detenido en 1972.

La condena

En 1980, fue condenado a reclusión perpetua más la accesoria por tiempo indeterminado por 10 homicidios agravados, un homicidio simple, 17 robos y dos casos de abuso deshonesto, todo cometido entre mayo de 1971 y febrero de 1972.

Robledo Puch, quien vivió en las localidades bonaerenses de Tigre y Villa Adelina, tuvo como cómplice a Jorge Ibáñez, a quien conoció a los 16 años.

El 3 de mayo de 1971, los dos cometieron su primer asesinato cuando ejecutaron a tiros a José Bianchi, sereno de una casa de repuestos, e hirieron a balazos y violaron a su mujer en el mismo hecho, todo delante del bebé de la pareja.

Doce días más tarde, entraron a robar al boliche “Enamour” de Olivos y mataron al sereno Manuel Godoy y al encargado Pedro Mastronardi, al sorprenderlos dormidos.

El 24 de mayo del mismo año, acribillaron al sereno Juan Saettone en un supermercado, y brindaron con whisky sobre su cadáver.

A Robledo Puch e Ibáñez se los veía juntos a bordo de autos costosos con los cuáles con diferencia de pocos días raptaron, violaron y asesinaron a dos jóvenes, una de las cuales fue acribillada a balazos por el “Angel de la Muerte” cuando ya la habían liberado semidesnuda sobre la Panamericana.

No tenía amigos

Robledo Puch aseguró que Ibáñez no era su amigo sino “un compañero de andanzas”, lo que quedó plasmado cuando éste apareció muerto en un presunto accidente con un flamante Torino, otra muerte que atribuyen al “Angel Negro”.

Luego consiguió un nuevo cómplice: su vecino Héctor Somoza, con quien el 15 de septiembre de 1971 asesinó a Raúl Del Bene en un supermercado, dos días después a Juan Rozas en una concesionaria y el fin de semana siguiente al sereno de agencia de autos, Bienvenido Ferrini.

Este dúo se dedicaba a asaltar en horas de la noche, robaban a sus víctimas y luego las mataban.Así fue que el 3 de febrero de 1972 fusilaron a Manuel Acevedo en una ferretería, pero se pelearon, por lo que Robledo Puch mató a Somoza prendiéndolo fuego con un soplete que usaban para violar cajas fuertes.

Ese cadáver fue la clave para que este asesino múltiple cayera preso ya que en un bolsillo de la camisa de Somoza, hallaron el documento de Robledo Puch.