Asamblea en Gálvez

En crisis y desanimados

Los productores manifiestan quebrantos e inviabilidad económica. Sin embargo la movilización es escasa.

Juan Manuel Fernández

[email protected]

El ruralismo santafesino inició esta semana un plan de lucha con una asamblea a la vera de la autopista Santa Fe-Rosario en la que no sólo se reflejó el enojo hacia el gobierno nacional por el deterioro de la economía sectorial. También hubo críticas hacia el interior de las instituciones, que siguen sin influir sobre un poder político que desatiende cualquier reclamo del sector.

El acto, celebrado el miércoles 8 de julio, convocó unas 150 personas y tuvo oradores de nivel nacional y provincial. Los presidentes de CRA y Sociedad Rural Argentina, Rubén Ferrero y Luis Miguel Etchevehere, tuvieron un discurso netamente político, enfocado en evitar un triunfo del oficialismo en los próximos comicios presidenciales. Ambos plantearon ser inteligentes y “buscar aliados” en los pueblos, para pedirles que no apoyen esta política contraria al campo. “El 25 de octubre mueren las palabras”, dijo Etchevehere, quien propuso volantear en las comunidades del interior e invitar a los centros comerciales a sumarse a los reclamos.

El titular de SRA acusó al gobierno kirchnerista de haberse robado “los mejores 12 años productivos de nuestras vidas”. Eso, dijo, “no tiene perdón ni remedio, nadie podrá volver el tiempo atrás; piensen en eso antes de encarar el proceso eleccionario y que si gana el oficialismo van a ser cuatro u ocho años más de esta desgracia”.

En diálogo con la prensa, Rubén Ferrero, dijo que Daniel Scioli es el único candidato que no escucha al sector. Mencionó que se reunieron con todos (Massa, Sans, Macri, De la Sota y Stolbizer) y “el común denominador es que no podemos tener una Argentina que crezca sin tener un campo en crecimiento, sin recuperar mercados ni exportar”. En cambio al gobernador bonaerense y aspirante del kirchnerismo a la presidencia “se le ha pedido audiencia y no hemos sido recibidos”.

La dirigencia provincial, en cambio, fue más a fondo y planteó el problema estructural de no contar con instituciones fuertes. “Vivimos un serio problema de institucionalidad”, dijo Gustavo Vionnet, tesorero de Carsfe. “Vivimos en la anomia, la indiferencia; que el problema lo resuelvan los dirigentes”, se quejó ante los asistentes, y reclamó que cada uno se trasforme en un militante y le diga a sus pares “apoyen a las instituciones” porque si desaparecen las entidades intermedias “no habrá quien reclame a la política”. Se necesita -arengó- una fuerte participación para engrosar las entidades: “eso es darle poder y en vez de ser doscientos o trescientos seamos miles en estas asambleas”.

Ferrero ensayó una explicación para la escasa convocatoria. “En la conciencia de la gente está instalado que este gobierno no hará ningún cambio y que dentro de poco habrá un cambio de administración; esperemos que sea eso lo que lleva a la no movilización”.

Entre los asistentes hubo enojo con la cúpula de FAA por el acercamiento al gobierno nacional y pedido de medidas de fuerza, como un cese de comercialización. “Ya estamos cansados de asambleas”, dijo un referente de la Sociedad Rural de Gobernador Crespo. Más duro aún fue un representante de la rural de San Carlos, quien manifestó sentir “mucha vergüenza por la pasividad del sector”.

 

La próxima en San Justo

La Mesa de Enlace Provincial, que integran Carsfe, Coninagro, FAA y SRA, definió que la próxima asamblea será el 17 de julio próximo en San Justo.