Recuerdos y reencuentro 60 años después APUNTES ESCOLARES

El 4º “A” de 1953: Juan Gaziano, Hugo Pedulli, Ricardo Gorrochategui, Juan Salemi, René Regalini, Luis Pierini, Antonio Menor, Edgardo Rodríguez, Oscar Fernández, Víctor Vilar, Rubén Dal Lago, Caballo, Miguel Nadalini, René Fregona, Sergio Silber, Oscar García, Elda Pesarini, María Nelda Prockz, Ana Margarita Weins, Otilia Urrutía, Rosa Pidhirnyj, María Teresa Carrizo, María Cristina Coll, Elsa Torielli, Socorro del Carmen Rojo, Mabel Fernández, Hilda Cisneros y Miguel Galván, acompañados por la Srta. Egle Sejas.

Un grupo de ex compañeros de la promoción 1955 de la Escuela Alfonso Grilli organizó una reunión en el Club El Quillá. El resultado fue un emotivo encuentro hilvanado por memorias, anécdotas y el cálido homenaje a su querida maestra de primaria, Egle Sejas.

TEXTOS. REVISTA NOSOTROS. FOTOS. FLAVIO RAINA, LUIS CETRARO Y GENTILEZA EX ALUMNOS.

Próximos a cumplir 60 años de egresados, los ex-alumnos de la Escuela Alfonso Grilli, promoción 1955, decidieron reunirse; hasta entonces nunca antes lo habían hecho.

La organización del reencuentro fue, así definida por sus protagonistas, una odisea. Ubicar a todos los compañeros de clase no fue fácil, pero Juan Salemi, Hilda Mufarreje y Elda Pesarini, a cargo de la empresa, fueron sumando cada vez más camaradas. “A través de la guía telefónica, Internet, visita a vecinos, muchos llamados telefónicos a otras provincias y mensajes de Facebook, logramos encontrar a la mayoría. El problema fue con las chicas, porque al casarse aparecían en todos lados con el apellido de sus esposos”, explica Elda Pesarini.

La tarea rindió sus frutos, llegaron incluso miembros del curso que actualmente viven en otras ciudades como Carlos Ferraris, de Posadas (Misiones), René Regalini, de Río Cuarto (Córdoba) y Antonio Menor, de Esperanza.

EMOCIONES Y AUSENCIAS

En un agasajo muy emotivo, “con muchos abrazos, besos y algunas lágrimas imposibles de contener”, según el relato de sus protagonistas, hubo algunas ausencias, como las de María Teresa Carrizo, Luis Pierini y Oscar Fernández, que por motivos particulares pospusieron su asistencia hasta el próximo encuentro. “Luego de este ‘volver a vernos’ hemos decidido reunirnos con más frecuencia. Tenemos 60 años de vida para contarnos y compartir”.

En el recuerdo estuvieron presentes aquellos a los que no se pudo localizar como Hilda de Cisneros, María Cristina Coll, Edgardo Rodríguez, Ricardo Gorrochategui, Alejandro Mendoza, Ángeles Sienra, Socorro del Carmen Rojo y Otilia Urrutía (ver recuadro). También estuvieron en la memoria los compañeros fallecidos: Rosa Pidhirnyj, Oscar García, Víctor Vilar, Miguel Nadalini y Sergio Silber.

SEÑORITA MAESTRA

Párrafo aparte merece el reencuentro del grupo con su maestra Egle Sejas, que hoy cuenta con 91 años llenos de vitalidad.

Los ex compañeros guardan un cariño muy especial por ella, que les dió clases cuando, recién egresada, tenía sólo 18 años. “Egle era, y aún hoy lo es, muy dulce y compinche”, afirma Elda.

Juan Salemi, Elda Pesarini y la maestra Egle Sejas.

El reencuentro de la promoción 1955 sirvió a su vez para agasajar a la querida maestra Egle.

/ ALFONSO GRILLI

Fue un educador italiano nacido en Carrara. Llegó a Argentina en 1870, siendo maestro, se dedicó a la enseñanza para alumnos que pagaban por instrucción. En 1885 integró la Comisión de Sociedad de Unión del Magisterio. En 1887 fue nombrado director y se incorporó a su escuela al régimen educacional. En 1888 se jubiló. En su homenaje, por decreto del 27 de mayo de 1929, se designó con su nombre una escuela del Barrio Candioti. El maestro Grilli, junto con Antonio Pizzorno, fueron fundadores de la Mutual Unione e Benevolenza de Santa Fe. En el momento que la promoción 1955 cursaba sus estudios primarios, la escuela estaba ubicada en Castellanos al 1500. En 1953, cambió su nombre por “Eva Perón”; pero en 1955 volvió a su nombre original. Actualmente, el edificio está ubicado en Balcarce 1251.

/ AUTORIDADES

En ese entonces, el director de la institución era David Piccioni. Además de la homenajeada Egle Sejas, los alumnos de la promoción 1955 recuerdan a María del Carmen Noverasco, a la maestra de actividades prácticas Alma Vilma Pucheta, a la maestra de música Irma Ulla, a Felicita de Rodríguez, Elena Bellomo de Llusá y Agnes Diehl.

/ LOS ACTOS ESCOLARES

Los actos contaban con la participación de los alumnos de los distintos grados, como ahora. Se representaban breves obras dialogadas, referentes al tema histórico y/o social de la fecha. La maestra de música preparaba algunos himnos o canciones patrióticas y del folklore argentino. También algunos alumnos bailaban danzas argentinas.

/ EL GUARDAPOLVO

El uso del guardapolvo blanco era obligatorio; a éste se agregaba, como distintivo, un moño azul marino con lunares blancos. El delantal debía estar impecablemente almidonado; debajo de éste, las mujeres no podían usar pantalones.

/ LOS ÚTILES

Cuadernos foliados, carpetas, cartuchera con lapicera de pluma para tinta, lápiz negro (el Faber Nº 2 era el mejor) goma lapiz-tinta, compás, regla. No existía la birome aún, por lo tanto escribían con tinta negra.

/ LIBRO DE LECTURA

“En 4º grado, tuvimos el libro ‘Abriendo horizontes’, lo comprábamos en la Editorial Colmegna”, recuerdan los ex alumnos. El texto contenía temas de Historia e Instrucción Cívica, Geografía y de la naturaleza. Al final de cada lectura, contenía una “Familia de Palabras” o un “Vocabulario”, como elemento de ayuda para la comprensión del texto.

Luego, por disposición ministerial, el libro cambió por “La Razón de mi vida”. “No era muy comprensible para nosotros su contenido -aclaran- sus temas eran netamente sociopolíticos, pero cada lectura tenía su explicación por parte de la maestra. Cuando se produjo la caída del presidente Juan Domingo Perón, en 1955, tuvimos que encerrar con una cinta argentina todas las hojas del cuaderno único de clases, a manera de cerrar un ciclo político e iniciar uno nuevo”.

/ LIBRETA DE AHORRO

La Libreta de la Caja Nacional de Ahorro Postal era la herramienta que se utilizaba para fomentar el ahorro de dinero, que luego se invertía en la compra de algo útil. La maestra vendía a un valor de $10 estampillas que luego se pegaban en cada cuaderno. Luego de una determinada suma ahorrada, se podía retirar el dinero, en la sucursal Santa Fe de la misma Caja.

/ EL VIAJE DE FIN DE CURSO

El grupo tuvo su viaje de fin de curso a La Falda, en la provincia de Córdoba. Recuerdan que se instalaron el en hotel del Sindicato de Cerveceros, visitaron lugares cercanos y pasearon por las sierras.

/ UNA VISITA ESPECIAL

Luego de su alejamiento, por decisión unánime, el curso organizó una visita a la casa de la querida Srta. Egle, en Guadalupe. “En ese momento queríamos volver a encontrarla y expresarle nuestro latente cariño, que permanece aún hoy”, explican. El grupo contó con la compañía de la maestra de actividades prácticas, Alma Pucheta. Fueron y regresaron en tren.

 

Una postal actualizada, 60 años después.

Contactos

Si algún lector conoce a las personas que la Promoción 1955 de la Escuela Alfonso Grilli está intentando contactar, puede comunicarse con Juan Salemi (4692166), Hilda Mufarreje (4751598), Elda Pesarini (4525046), Mabel Fernández (4605345) o Elsa Torielli (4535270).