En el retorno al Amalfitani

Al ritmo de los Springboks

Los sudafricanos jugaron mejor que Los Pumas y consiguieron una victoria inobjetable. Una multitud acompañó en el tradicional escenario velezano.

César Miño

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Con una producción que resultó lo suficientemente apta como para justificar el festejo final, el Seleccionado de Sudáfrica venció ayer a su par de Argentina por 26 a 12, en el test-match amistoso enmarcado en el tributo a Los Pumas 65, por celebrarse este año el quincuagésimo aniversario del célebre tour que dio origen a la emblemática denominación.

Tras la histórica victoria alcanzada una semana atrás en Durban, ayer Los Pumas fueron superados en aspectos clave del juego por los Springboks, que sin brillar, poseyeron argumentos válidos para conseguir un triunfo inobjetable.

En su última presentación en el país antes de la Rugby World Cup 2015, que el 18 de septiembre venidero se pondrá en marcha en Inglaterra, Los Pumas jugaron un modesto primer tiempo, en el que más allá del insinuante equilibrio general, fueron superados territorialmente y, en especial, en materia de utilización de la pelota.

Inclusive, hubo falencias en la obtención desde las posiciones fijas, en nítido contraste con lo ocurrido el sábado anterior en el Kings Park. A esto deben sumarse tomas de decisiones equivocadas y una concentración que distó de ser la ideal, lo que -como suele ocurrir en estos casos- generó un número inadecuado de infracciones.

Frente a esto, el elenco Bokke fue letalmente efectivo y, sin hacer demasiado, se quedó merecidamente por el parcial por un claro 20 a 9 a su favor.

Sin titubeos...

Ante la prensa, con su habitual deferencia, el capitán argentino, Agustín Creevy, brindó su punto de vista sobre el partido disputado en Liniers.

* “Evidentemente no fue lo que esperábamos, ya que no tuvimos el mejor partido. Hubo errores, cansancio, desconcentraciones; creo que una mezcla de todo. Además, está claro que ellos jugaron mejor que nosotros y que nosotros retrocedimos con respecto al partido de Durban”.

* “Por momentos jugamos bien en defensa; mientras que en ataque hubo dinámica pero faltó precisión. Pienso que nuestra preparación ha sido muy buena, pero tenemos que seguir mejorando; no debemos conformarnos con la evolución alcanzada, porque la exigencia será cada vez mayor...”

Apreciaciones coincidentes

Tras la conclusión del partido, mientras la multitud se retiraba del estadio velezano, llegaron los primeros testimonios argentinos.

Como el del rosarino Juan José Imhoff, que fue absolutamente sincero: “Sudáfrica nos ganó claramente. Nosotros no pudimos repetir la tarea del sábado pasado y ellos mejoraron en la obtención de la pelota y en defensa. Creo que la mejor prueba de esto es que mientras en Durban apoyamos cuatro tries, hoy no pudimos concretar ninguno”.

* “Lógicamente, los Springboks sabían perfectamente que no podían perder un segundo partido consecutivo ante nosotros y se notó desde el minuto inicial, en la forma en que plantearon su juego. A su vez, nosotros fallamos en la obtención de la pelota y cometimos demasiadas infracciones”.

A su turno, el santiagueño Juan Manuel Leguizamón expresó: “Cometimos muchos errores en el primer tiempo y, pese a la mejora, no pudimos revertir la diferencia en el segundo. Es una lástima despedirnos del país con una derrota, pero está claro que no estuvimos a la altura de la actuación de la semana anterior y eso se notó en el juego y en el resultado”.

Bryan Habana, un habitual verdugo de Argentina, a punto de apoyar el primer try sudafricano, luego de una acción demasiado sencilla; observado desde atrás por Juan José Imhoff.

Foto: EFE

(viene de pág. anterior)

El segundo tiempo fue diferente, básicamente porque Los Pumas presionaron con mayor justeza, lo que en cierto modo compensó la escasez de posesión. Por ende, no extrañó que hubiese demasiado escasas situaciones como para generar peligro para el ingoal sudafricano.

De ese modo transcurrió el tramo final de un partido que para Argentina dejó como saldo positivo, la entereza defensiva denotada en situaciones límites; como así también algunas actuaciones individuales que quizás sirvieron para decidir algunas de las poquísimas dudas que el staff poseía para definir la nómina de 31 jugadores que afrontarán el certamen ecuménico.

El abanderado en estas lides fue el joven tercera línea santiagueño, Tomás Lezana, a quien bien puede signarse como el mejor del equipo albiceleste. También jugó un gran partido (en especial en el aspecto defensivo) el centro Matías Moroni, demostrando condiciones que justifican plenamente su posicionamiento en el plantel nacional.

En cuanto a Sudáfrica, más allá del buen rendimiento colectivo, poseyó algunos puntos muy altos en cuanto al rendimiento individual. Como por ejemplo el reaparecido fullback Zane Kirchner; como así también los centros Damien de Allende y Jesse Kriel; además del apertura Pat Lambie, a quien tanto solicitan los fanáticos, en sus reiterados reproches al head coach Heyneke Meyer.

Ahora, los Pumas tendrán dos semanas de descanso (con entrenamientos individuales en sus respectivos Centros Regionales) y el 1 del mes próximo partirán hacia el Viejo Continente.