Darío Franco y un tiro por elevación para la futura dirigencia...

“Me quiero quedar, sólo espero que me consideren”

  • El entrenador rojinegro le agradeció a los jugadores, dijo que “me sentí bancado por ellos en todo momento” y manifestó abiertamente su deseo de quedarse a cumplir el contrato que vence en junio del año que viene. Por ahora, es difícil que siga.
“Me quiero quedar, sólo espero que me consideren”

Alegría visitante. Los jugadores de Colón comparten los festejos en rojo y negro por un triunfo clave y definitorio. Tras un muy pobre desempeño en el torneo, el cierre es positivo para el sabalero. Foto: Gentileza Diario Olé

 

Enrique Cruz (h)

(Enviado Especial a Mendoza)

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Parece que el tiempo se apiadó de todos. Amagó con llover durante todo el día, bajó la temperatura, el cielo se encapotó y la noche se adelantó. Ya de por sí, el oeste del país plantea una diferencia con el resto: atardece más tarde pero también amanece después. Sin embargo, la amenaza de lluvia hizo que la noche se viniera enseguida, pero el cielo aguantó. Y apenas unos minutos después del pitazo final de Laverni, comenzaron a caer las primeras gotas, que luego se prolongaron y se ampliaron en una llovizna que se hizo fuerte a medida que avanzaron los minutos y hasta la madrugada mendocina. Algunos jugadores apuraron la subida al micro para no mojarse, otros (la mayoría) se pararon a hablar y el último en salir del vestuario fue Darío Franco.

“Guanca hizo dos goles, el planteo no era ni defensivo ni tampoco se olvidaba de la premisa de atacar. Él tenía la orden, como otros, de desprenderse y de llegar. Lo hizo muy bien y por eso fue que jugó un gran partido. No creo que hayamos ganado gracias al esquema. Le tenía fe, sabía que nos iba a dar mucho orden en todo aspecto, lo probamos para el clásico y anduvo a medias, saqué cosas positivas ese día y prefería hacerlo otra vez ante la ausencia de Vegetti. Los muchachos cumplieron al pie de la letra lo hablado, se sintieron identificados, presionaron muy bien en todos los sectores y ganamos. Me voy muy contento y le quiero dar las gracias a los jugadores porque me bancaron”, fue el monólogo inicial de Darío Franco en la noche mendocina.

El entrenador sabalero fue un poco más allá a la hora de los elogios y dijo que “quiero reconocer públicamente el esfuerzo y la entrega que pusieron siempre los jugadores. Hicimos un torneo irregular, tuvimos picos en los partidos, algunos los jugamos mal y en otros no tanto, acepto las críticas que hubo porque estuvieron justificadas, salvo cuando se trató de Garnier y a esto ya lo expliqué, pero aseguramos la permanencia jugando un buen fútbol”, dijo Franco.

A la hora de los merecimientos, Franco señaló a los jugadores como los principales responsables. “Pusieron mucho más ellos que yo. Logramos resultados en momentos clave, como estos dos partidos con Arsenal y el de esta noche, como así también los dos clásicos, que fueron partidos que no podíamos perder de ninguna manera. Hubo jugadores como Lazzaroni, Cuevas, Castillo y algunos otros que no quiero seguir mencionando por miedo a excluir alguno, que llevaban varios partidos sin jugar y cuando lo tenían que hacer, dejaban todo en la cancha y no era poco”.

En el final de la charla, el entrenador sabalero no sólo habló de la posibilidad de la Liguilla Pre-Sudamericana aunque fue claro al señalar que “el principal objetivo fue el que logramos hoy, el de mantener a Colón en la A. Ahora quiero ganarle a Gimnasia, darle una alegría a la gente y ver qué pasa. Si clasificamos para la liguilla, bienvenido sea. Sería un lindo final para una historia que se nos complicó pero que termina bien”. Y enseguida se refirió al futuro: “No estoy planificando absolutamente nada para el futuro ni mirando jugadores ni pensando en nada que no hayan sido estos partidos. Estuve pendiente siempre de asegurar la permanencia. Estoy muy contento y espero que la gente también sienta lo mismo. Sé que ahora hay elecciones, que habrá varias listas y que esta gente que está ahora al frente del club, que es la que me trajo, ya me dijo que se va”.

Pero no se quedó ahí Franco, sino que hizo una apuesta un poco más allá, casi como hablándole a la dirigencia que se vendrá a partir del 20 de diciembre: “Espero que la gente que venga al club por haber ganado las elecciones, nos considere. Mi contrato es hasta junio y mi deseo es continuar en Colón. Me sentí bien, me trataron bien, no tengo nada que reprocharle al club y quiero seguir para cambiar los objetivos y para intentar algo más ambicioso. Estoy convencido de poder lograrlo, conozco al plantel y repito que ahora espero que la gente que venga a dirigir el club, al menos nos considere”, concluyó un Franco exultante, feliz y con la dicha de haber logrado el objetivo, más allá de los vaivenes que debió soportar.

Es cierto que, a priori, los que ya están lanzados a la arena política no lo tendrían como prioridad a Franco, pero si esa inestabilidad se transforma y Franco consigue revertir ese panorama de cara al futuro, hay un par de jugadores que el técnico quiere traer sí o sí para reforzar el plantel. Uno de ellos es un nombre conocido. Se trata de Ciro Rius, por quien Colón hizo gestiones pero que resultó imposible teniendo en cuenta el buen rendimiento en Defensa y Justicia, sumado a que su pase pertenece a Argentinos Juniors. Otro jugador que estaría en los planes de Franco sería Paulo Da Silva, el experimentado defensor paraguayo que está jugando en el Toluca de México. Son apenas un par de nombres que el técnico maneja, aunque hay otros. De todos modos, es difícil —cuánto menos— su permanencia en el club. Es cierto lo del contrato y también es verdad que la rescisión tendrá un costo que el órgano fiduciario y la jueza del salvataje deberán aprobar, o bien aportar un dinero “de afuera” o “extraordinario”, como pasó con Alan Ruiz, cuya incorporación corrió serio riesgo hasta que se produjo una contratación publicitaria que arrimó los fondos suficientes para pagarle el sueldo al jugador. Pero también es cierto que las prioridades de las listas que pugnarán por el poder, al menos por ahora, no lo tendrían a Franco como candidato a continuar dirigiendo al equipo.

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El punto débil. Aunque no tuvo un mal partido, Ismael Benegas cometió fallas en la salida del fondo con la pelota al piso, algo que ha sido una constante de Colón en el torneo.

Foto: Gentileza Diario Olé

Buen recuerdo

El santafesino Leandro Fernández se acercó corriendo al banco de suplentes de Colón, antes del partido, para fundirse en un abrazo con el técnico sabalero, Darío Franco, y su cuerpo técnico. Franco lo dirigió cuando Fernández estuvo en Defensa y Justicia

“Siempre tuve mucha impotencia porque trabajábamos mucho y las cosas no salían. La suerte cambió para nosotros en estos últimos partidos. Ahora espero que termine este torneo de la mejor manera y ver qué pasará con mi futuro”.

Germán Conti

Defensor de Colón

Nico Leguizamón, a puro gol

La reserva de Colón también se llevó los tres puntos con una brillante victoria por 3 a 2 ante Godoy Cruz, en el partido preliminar jugado en el Malvinas Argentinas y que tuvo como gran figura a Nicolás Leguizamón, el hijo de Oscar Alfredo, ex jugador de Unión en un par de períodos.

Nicolás entró en el segundo tiempo, cuando el equipo estaba perdiendo, y logró dos de los tres goles, en tanto que el restante fue en una confusa jugada en la que intervino Marconato, otro de los que entró en el segundo tiempo y fue artífice de uno de los goles sabaleros.

El equipo de “Tapita” Segalla alistó a Lovera; Maxi Martínez, Del Giúdice, Verón y Osvaldo Arroyo; Leys, Giovanini, Jourdan, Casado; Ezequiel Gómez y Belinetz. En el banco estuvieron Aylagas, Prieto, Filippi, Lucas Comachi, Marconato, Peña y Nicolás Leguizamón.

Mucho tiempo

Pasó bastante desde que Colón logró ganar dos partidos consecutivos. En este año no lo consiguió nunca, salvo en este final con Arsenal y Godoy Cruz, pero la última vez que había logrado ganar dos seguidos fue en la B Nacional, cuando venció como local a Guaraní Antonio Franco por 4 a 1 y posteriormente consiguió una recordada victoria por 2 a 0 ante Argentinos Juniors con Riquelme en cancha, en La Paternal. Fue en las primeras fechas de aquel torneo de ascenso y con Osella como entrenador.

 

¿Se quedará?

Germán Conti es jugador de Colón y pilar fundamental de la defensa. Ya tuvo un ofrecimiento para jugar en el exterior que no se concretó, pero se dice que llegaría otro en breve. Tuvo un buen torneo a pesar de que el equipo no funcionó durante la mayor parte del año. Es el jugador más “apetecible” que tiene Colón, sumándose a la larga lista de los que surgieron de las inferiores en los últimos tiempos, como Graciani, Luque, Meli y Alario, entre otros. Clubes de la Argentina y el exterior lo tienen en sus planes. Será difícil que se quede.

¿Y si se da?

Matemáticamente, Colón tiene la posibilidad concreta de alcanzar un lugar en la liguilla Pre-Sudamericana, claro que para que eso se dé tendrá que ganarle a Gimnasia en el último partido y esperar lo que ocurra con Argentinos Juniors, que es el último clasificado, y Defensa y Justicia. Argentinos es el último clasificado y tiene 32, uno más que Colón que suma 31, pero con un partido menos al igual que el equipo de Florencio Varela, que tiene 31 como los sabaleros. Es difícil, pero no imposible. Depende de otros resultados.

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Un “10” para el DT. El esquema que propuso Franco sin delanteros fue efectivo y así lo deja en claro Cristian Guanca, quien apareció en posición de “9” y cabeceó de manera perfecta el centro de Sperdutti, para convertir el primer gol sabalero. Foto: Gentileza Diario Olé

En cifras

15

Partidos

Como visitante ha jugado Colón a lo largo del año, con tres victorias (Defensa y Justicia con Javier López de técnico; Newell’s y anoche con Franco), siete empates y cinco derrotas. Marcó 12 goles en esos encuentros, de los cuales 6 los hizo en dos de las victorias. Hubo 7 partidos de los 15 en los que no marcó goles, pero también hubo 6 en los que no le marcaron. Hizo 16 puntos, o sea más de la mitad de los que logró hasta ahora.

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Todos ponen. Yamil Garnier va al piso ante el avance de un rival, mientras llega por el medio Benegas. El compromiso de los jugadores se notó en este angustiante tramo final del certamen. Foto: Gentileza Diario Los Andes