El Gobierno prometió subsidios a tamberos

Pero aclaró que recién los cobrarán en febrero.

De la redacción de El Litoral

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En la primera reunión de la Subsecretaría de Lechería de la Nación con los productores lecheros representados en la Mesa de Productores Lecheros de Santa Fe (Meprolsafe), el Gobierno les prometió: un subsidio para los meses de enero y febrero (la cifra que se maneja es de 30 a 40 centavos por litro para los primeros 2.900 litros a todos los tambos del país); créditos blandos con tasa subsidiada para capital de trabajo; y el cumplimiento retroactivo del pago del subsidio de 30 centavos por la leche de julio, que se publicó en el Boletín Oficial previo al balotaje pero nunca se efectivizó su depósito (gestión Videla).

No obstante, los tamberos se mostraron preocupados porque la primera percepción económica real llegaría en el mes de febrero, ya que el subsidio sería por la leche de enero. De todos modos, la Subsecretaría les adelantó a los productores que la industria láctea se comprometió a no seguir bajando el precio de la leche y a recuperar paulatinamente a partir de 2016 el valor de la leche cruda, el cual intentarán acercarlo a los $3/litro, según consigna Nuestro Agro.

De todos modos, esta semana habrá más audiencias entre la cartera y las entidades del sector, y pronto serán convocados todos los eslabones de la cadena para la firma de un acuerdo que comenzaría con los anuncios concretos que se efectivizarán desde enero.

Formaron parte del encuentro los tamberos Marcelo Aimaro, Fernando Córdoba, Fabián Lanza, Raúl Bertinetti y Martín Paroni, mientras que al Gobierno lo representó el secretario de Agricultura y Ganadería, Ricardo Negri; el subsecretario de Lechería, Alejandro Sammartino, y el director de Lechería, José Quintana.

Fin del cepo crediticio a sojeros

Carlos Melconian, presidente del Banco Nación, se reunió con el nuevo directorio de la entidad y la línea gerencial, y tomó una larga medida esperada por los productores sojeros: el fin del cepo crediticio a quienes retenían, por razones operativas, la oleaginosa en sus campos, a la espera de la baja de las retenciones y la preanunciada liberación del cepo cambiario.

La restricción había sido impuesta bajo la jefatura de gabinete de ministros de Jorge Capitanich el 18 de noviembre de 2014 y se intensificó desde el 1 de enero de 2015, fenómeno que agudizó la tensa relación que el último gobierno mantuvo a lo largo de su mandato con los hombres de campo.

De este modo, quedaron ya sin efecto las limitaciones que el mayor banco del país había impuesto al acceso del crédito y para la renovación de acuerdos a productores agropecuarios que no hayan comercializado toda la soja de la última cosecha: como el uso de cheques y acuerdos de descubierto de cuenta corriente a 60 días, cuando lo usual es que sea a tres meses.

“También se levantó el cepo al uso de la tarjeta Agronación (utilizada por los productores para la compra de insumos)”, agregaron las fuentes.

“Sin retenciones, y baja programada para la soja, tipo de cambio de mercado y libre acceso al crédito del banco con la mayor red de sucursales del país, se espera que el campo modifique sus expectativas de siembra y se encamine a dar el salto de 100 millones de toneladas a más de 150 millones en pocos años”, ampliaron voceros de la entidad crediticia.