Piel de verano
Uno de los factores que más influyen en el daño de la piel es la radiación ultravioleta que proviene fundamentalmente del sol. Por esta razón, es conveniente seguir algunas recomendaciones para su cuidado y protección.
TEXTO. REVISTA NOSOTROS.
FUENTE. FACULTAD DE MEDICINA DE LA FUNDACIÓN BARCELÓ.
Durante la época estival es importante evitar el envejecimiento de la piel por exposición solar y, para eso, es necesario utilizar protector solar con factor mayor a 30 FPS. Para un óptimo cuidado de la piel, debemos repetir la colocación del protector cada 2 ó 3 horas, ya que aunque no estemos expuestos de manera directa, los rayos refractan en el pavimento, en la arena o en el agua. Es así como, aún si se permanece bajo techo o a la sombra, o aunque el día esté nublado, la piel puede recibirlos.
Por otro lado, las altas temperaturas deshidratan con mayor rapidez la epidermis y hacen transpirar en mayor medida a las personas, aumentando así la humedad del cuerpo y volviendo la piel más proclive a infecciones. “La exposición al sol es muchas veces la responsable de la aparición de manchas en la piel, lunares y en casos más extremos, de melanomas”, sostuvo el Dr. Ariel Sehtman, profesor asistente de dermatología de la Facultad de Medicina de Fundación Barceló.
CLAVES PARA UN BUEN CUIDADO
- Hidratación. Es importante aplicar a diario crema hidratante ya que permite recuperar la humedad perdida. Es recomendable emplear cremas humectantes que contengan glicerina y componentes emolientes. Además, se sugiere consumir dos litros de agua por día, para hidratar la piel desde adentro.
- Exposición al sol. Reducir al mínimo la exposición al sol en las horas centrales del día. Los rayos ultravioletas UVB se incrementan entre las 10 de la mañana y las 4 de la tarde, horario en el cual se aconseja no exponerse al sol, ni siquiera con protector.
- Cloro. En verano se incrementa el uso de las piscinas. El cloro suele dejar la piel del rostro y del cuerpo muy seca. Es importante, luego de un baño, tomar una buena ducha y utilizar algún gel hidratante que permita recuperar la elasticidad de la piel. Se recomienda emplear una crema hidratante para el cuerpo y la cara.
- Sueño. Las células se producen y recuperan su fuerza cuando se duerme; por lo tanto es importante dormir 8 horas diarias para ayudar a mantener la piel en buen estado.
- Vestimenta. Para proteger la piel, en las épocas de altas temperaturas hay que evitar usar ropa o zapatos con materiales que favorezcan la aparición de hongos por la creación de un ambiente húmedo; o bien que puedan causar heridas o alergias en la piel.