Por la mirilla de la ley cerrojo
El PRO busca Diputados
El acuerdo parcial con los “buitres” necesita mayorías parlamentarias que el macrismo no tiene. Es el primer gran desafío de cara a una gobernabilidad con más instituciones y menos decretos de “necesidad y urgencia”
El presidente de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó, y la delicada tarea de negociar voto por voto la compleja agenda oficialista en un cuerpo con mayoría opositora.
Foto: Archivo El Litoral
De la redacción de El Litoral
DyN/Télam
En el frente oficialista Cambiemos de la Cámara de Diputados celebran por estas horas el desprendimiento de al menos 13 diputados del bloque del Frente para la Victoria (FPV), mientras trabaja para acercarse a opositores que tienen responsabilidad de gobierno en sus respectivas provincias, con el objeto de garantizar el quórum en la Cámara baja.
Levantar la “ley cerrojo” para viabilizar la oferta a los buitres es el primer objetivo, pero no el único. La dispersión de vertientes opositores a la que esta semana se sumó el nuevo bloque Justicialista (BJ), genera optimismo en Cambiemos, que pueden negociar por separado con el FPV-PJ, con UNA, con los peronistas puntanos o con el Frente Amplio Progresista, entre otros sectores.
Según confiaron fuentes del bloque macrista, uno de los principales objetivos es trabajar sobre aquellos diputados que representan a gobiernos provinciales y que a nivel nacional son oposición. Así, en las filas del bloque que preside Nicolás Massot, ven como muy favorable el nivel de diálogo que se mantiene con el peronismo cordobés y el chubutense -encuadrados en el interbloque UNA-, con los puntanos referenciados en los hermanos Rodríguez Saa, con el socialismo santafesino y con los representantes del Movimiento Popular Neuquino (MPN).
Esta semana se sumó la novedad de la separación del bloque del FPV de tres salteños, una riojana, un catamarqueño y un chaqueño, todos ellos oficialistas en sus provincias. En esa nueva bancada también están integrados los dos pampeanos alineados con su gobernador, el antikirchnerista Carlos Verna, quien siempre jugó por fuera del FPV.
La treintena de diputados del massismo era hasta hace un mes el único sector que le ofrecía la posibilidad de quórum al oficialismo, desde la bancada que conduce Massot y que monitorea también el titular de la Cámara, Emilio Monzó. Pero ahora especulan con la “madurez política” de los seis diputados del Frente Cívico de Santiago del Estero.
En el núcleo más duro contra el gobierno nacional -el bloque que preside Héctor Recalde- conviven unos 30 diputados de provincias gobernadas por la oposición (y por tanto con responsabilidades de gobierno) con otros 50 que son opositores tanto a nivel nacional como en sus distritos, y que están encabezados por los referentes de La Cámpora. Entre ellos la mitad son bonaerenses y hay 5 santafesinos y 4 porteños.
En el interbloque PRO-UCR, realizan esa especie de “diferenciación” de la lista de integrantes del FPV-PJ, y apuntan entonces “al compromiso con la gobernabilidad” de 3 o 4 sanjuaninos, 3 misioneros, 3 formoseños, 3 tucumanos, un entrerriano, un riojano, una fueguina, algunos de ellos mencionados en las listas previas de los que se iban a ir del bloque, pero que finalmente se quedaron.
El gobernador de Salta, Juan Manuel Urtubey, afirmó que “definitivamente” el kirchnerismo se acabó dentro del peronismo, ya que el “seguidismo” a la ex presidenta Cristina Fernández “está cediendo”, en tanto el diputado macrista Pablo Tonelli sostuvo que “es un poco pronto para extender el certificado de defunción al kirchnerismo”. Urtubey reiteró que el Partido Justicialista (PJ) “debe rearmarse de una lógica de conducción colectiva”, y tildó de “muy loca” la postura de los kirchneristas que calificaron de “traidores” al grupo de diputados que se fueron del bloque del FPV.
Bossio da quórum
El diputado Diego Bossio, uno de los máximos referentes del nuevo Bloque Justicialista, que rompió con el Frente para la Victoria, ratificó que la intención del grupo disidente es “claramente” permitir que el oficialismo tenga quórum en la cámara baja. “Claramente nosotros estamos para debatir y yo quiero dar el debate”, afirmó el ex titular del Anses durante la última etapa del gobierno kirchnerista. Reiteró que se proponen facilitar “condiciones de gobernabilidad” en esta etapa institucional, aunque advirtió que “no significa que vayamos a hacer seguidismo. Somos opositores a Macri, pero las cosas que están bien las vamos a apoyar”, insistió. Refiriéndose concretamente al posible acuerdo con los fondos buitre que está apurando la administración macrista, Bossio recordó que es “el último capítulo del desendeudamiento” generado durante la década kirchnerista, y aclaró: “Lo estudiaremos con rigurosidad” cuando llegue a la Cámara.
Desde su punto de vista, “le tiene que ir bien a Macri para que le vaya bien a los argentinos” y recordó que “la gente votó a un gobierno. No le vamos a permitir que haga cualquier cosa, pero queremos que le vaya bien a la Argentina, no le queremos poner palos en la rueda. No queremos volver a 2001”, advirtió.
