Lo buscó y lo ganó

 

Villa Dora en la gloria

• Lo “borró” a Vélez Sarsfield, lleva 15 partidos invicto y ganándoles a los mejores. El sábado próximo jugará la final con el ganador de Boca Juniors-San Lorenzo que definen esta noche.

Luis Gudiño

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“Esto es producto del esfuerzo, del trabajo que iniciamos en enero”, dijo la entrenadora de Villa Dora, Lorena Góngora, en diálogo con El Litoral. Y esa reflexión refleja la realidad que vive el equipo santafesino, que es nuevamente finalista de la Liga Nacional de Vóleibol, con un presente de fantasía; jugando en un nivel extraordinario, con jugadoras comprometidas y que cuando hay que sacar el plus de campeonas, lo ponen en la cancha.

Pero esta realidad que hoy disfruta todo Santa Fe, tiene también mucho que ver con el profesionalismo y la inteligencia del cuerpo técnico; de un apoyo dirigencial importante; del público que apoya incondicionalmente: como anoche, que hubo más de 600 personas alentando; ... todo suma.

La victoria fue 3 a 0, con parciales de 25-19, 25-18 y 28-26, para conservar el invicto en esta edición 2016 de la Liga femenina.... ¡Siguen haciendo historia!.

Una aplanadora

Pero Lorena, sanjuanina humilde, de perfil bajo, todo un lema a la dedicación y sacrificio, también fue clara: “Llegar a esta instancia es un reconocimiento al trabajo que hacemos día tras día. Las chicas entendieron que tenían que jugar concentradas; muy seguras salieron a pelear cada pelota en la red; a ganar el partido de entrada y así se dio.”

Y así fue sin dudas. Desde el inicio Villa Dora fue superior, firme en bloqueo, preciso en ataque, con una armadora como Karina Suligoy con todas las pilas puestas, moviendo la pelota de un lado al otro, buscando grietas defensivas del rival y encontrando los caminos.

No es fácil tener enfrente a genias como Sol Piccolo, Antonela Curatola o Celia Paterno y “borrarlas del mapa”. Se vio en acción a una gran atacante, la cordobesa María Florencia Giorgi, una verdadera “máquina” definidora, con acciones perfectas para desbaratar a la defensiva del equipo de Liniers. También la chilena Chris Volphal jugó su mejor partido desde que pisó tierra argentina y fue imparable, aportando además una gran defensa.

Cuando las cosas estuvieron parejas, salió a relucir el bloqueo de la sanjuanina Candelaria Herrera, y fue demasiado para las de Liniers, que lucieron incómodas, erráticas, lo que se notaba en su rostro y en su juego. Cierre del primer set 25-19 sin dejar dudas.

Magia y talento

En el segundo parcial, el dueño de casa se sintió muy tranquilo, confiado y generó jugadas de alto nivel. Fue como los tiburones, vieron sangre y se regocijaron, aprovecharon al máximo el banquete servido en un gimnasio que explotaba de alegría en cada punto que picaba en piso velezano.

La chilena Volphal imparable, una genia, crecieron Micaela Fabiani y Candelaria Herrera, por momento Marcia Scacchi tuvo aciertos importantes, y Giorgi frotaba la galera para sacar toda su magia en cada remate.

Macíes de Selección

Un párrafo aparte para la líbero santafesina Ariana Macíes, la encargada de salvar las papas cuando queman, voló, se aguantó remates con destino de tanto, aportó su seguridad y confianza llegando a pelotas difíciles y lo mejor, hizo fácil lo complicado. Un diez para esta joven realidad del vóleibol argentino.

Pero no fue sólo anoche. Ya es figura en cada partido, y más lo fue en las definiciones de la serie final. Por algo se la quiere llevar River Plate, “Las Lobas” de Gimnasia y Esgrima de La Plata, pero ella, con los pies en la tierra sabe que Villa Dora es su presente y apuesta a ganador. Ya es “pantera” en su tierra y fuera de ella.

Cierre de fiesta

El tercer episodio fue un poco más parejo. Vélez salió a quemar las naves, queriendo vender cara su derrota. Su entrenador hizo muchos cambios apra buscar variantes y por momentos lo logró.

Pero Villa Dora, cumplió al pie de la letra su libreto. Giorgi imparable, en su mejor versión; Fabiani contundente, Suligoy con pinceladas de crack, Herrera dejó de medir casi dos metros para ser un paredón impasable, todo se daba para terminar ganando cómodamente.

Pero como una vez lo dijo la sabia Karina de Romang: “Si no sufre, no es Villa Dora”, pasó algo que le puso una cuota de dramatismo al final.

Estaban 23-21, partido casi liquidado, cuando se produjo una contingencia que desconcentró a las santafesinas. Una persona del público se descompensó, se detuvo el partido por 15 minutos, cuando Villa Dora era un aluvión y Vélez siguió intentando. Es más, aprovechó el parate para recomponerse, mejorar e igualarlo. Y hasta casi gana el set.

Pero estas “Doras” son de lujo. Nuevamente bajaron de la nube, pisaron tierra firme y metieron una aceleración hasta el final que las dejó 28-26 cerrando la serie y pasando a la final ante la algarabía del público.

Mucho festejo, justificado y muy merecido. Lágrimas de alegría, pero van por mucho más. Falta solamente la gran final...”el sábado todos a Morón”, ésa es la consigna. El sueño está muy cerca y ¡¡¡esta vez no se debe escapar!!!, el momento es hoy.

 

ACTITUD.

Si algo le sobra a Villa Dora es el plus extra de garra y entrega, que cuando hizo falta, puso en la cancha, para finalmente desatar el merecido festejo.

Foto: Mauricio Garín

INTELIGENCIA.

Clave del éxito, supieron jugar el partido y ganarlo utilizando sus mejores armas. Foto: Mauricio Garín