“Bienvenida” al país en Washington 

El Fondo Monetario Internacional (FMI) dio ayer la “bienvenida al pleno reinvolucramiento” de Argentina con el mundo, mientras que el G20 celebró “el progreso” de los esfuerzos realizados por el país “para finalizar una disputa de una década” con los holdouts y “recuperar acceso a los mercados de capitales internacionales”.

En la jornada, también comenzó a definirse para la segunda mitad del año la evaluación financiera de la Argentina por parte del Fondo Monetario, que se extenderá por unas dos semanas en septiembre próximo, en una misión encabezada por Roberto Cardarelli con el objetivo llevar adelante reuniones con representantes del Banco Central, del gobierno nacional, de la sociedad civil y del sector privado.

El encargado para la región del Fondo, Alejandro Werner, dijo que “el gobierno argentino ha ido extremadamente rápido para cerrar este capítulo y, por lo tanto, para comenzar la normalización de la relación con los mercados financieros internacionales”.

El director del Departamento para el Hemisferio Occidental, aseguró que “el nuevo gobierno se embarcó en una ambiciosa y muy necesaria transición para eliminar las distorsiones y desequilibrios internos y corregir los precios relativos” y que las medidas adoptadas “mejoraron las perspectivas de crecimiento a mediano plazo”.

Si bien “se proyecta una desaceleración de la actividad en 2016, se prevé una importante recuperación para 2017”, detalló Werner en un informe al hacer referencia a los 2,8 puntos que el FMI estimó crecerá la economía el próximo año.

El presidente del Banco Central, Federico Sturzenegger, participó por la mañana de la reunión del G20 que convocó a sus pares y a ministros de Finanzas que integran ese foro, y mantuvo un almuerzo en horas del mediodía junto con el ex titular de la Reserva Federal, Ben Bernanke. En la tarde del viernes, Sturzenegger expuso en tres seminarios para inversores organizados por el Citibank, el Bank of America y el Banco Itaú.