Colón busca hoy paz y puntos

El equipo fantasma

Desde las 21.15 y después de perder el clásico, el equipo de Johansen busca una alegría en el Brigadier. Sin Alan Ruiz, sin Clemente ni Ledesma: es otro Colón.

El equipo fantasma

Foto: Mauricio Garín

 

Darío Pignata

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Pasaron 43 años y todavía rebota esa frase de Mario Alberto Kempes —luego goleador y campeón del mundo en 1978—: “Nos dejaron tirados en un hotel de mala muerte. La AFA se olvidó de nosotros y la pasamos realmente mal. No teníamos ni para comer. Teníamos pactados dos amistosos y terminamos haciendo seis o siete a cambio de dinero. Así, comprábamos las cosas en un supermercado y alguno hacía la comida”.

A ese seleccionado argentino se lo bautizó “El equipo fantasma”. Se fueron a Tilcara, a 2.500 metros sobre el nivel del mar, lejos de sus familias, olvidados por la AFA y el periodismo, con un solo objetivo: entrenarse en la altura para conseguir ante Bolivia un triunfo que depositara a la Argentina en el Mundial Alemania 1974. El 23 de septiembre de 1973, con gol de Oscar Fornari, esa Argentina fantasma le ganó 1 a 0 a Bolivia, en la Paz.

El Colón que armó Ricardo Johansen para esta noche —a las 21.15 frente a Olimpo— también es un equipo fantasma. Se quedó sin los grandes nombres y estrellas: ya no está más Alan Ruiz, está expulsado Pablo Ledesma, lesionado Clemente Rodríguez y sancionado Pablo Vegetti.

Y en esta semana, donde a la escena la dominaron las conferencias de prensa, los comunicados y las renuncias dirigenciales, el equipo de fútbol de Johansen quedó más fantasma que nunca. Como si Colón, que es un club que tiene desde 1905 el fútbol como punto de partida y llegada, se hubiera olvidado de lo más sagrado que tiene: su equipo. El que genera las alegrías y desata las lágrimas como ninguna otra cosa en la vida.

Que aparezcan Saín, Silva, Castillo o Leguizamón lo hace mucho más fantasma porque están ahí por obligación y no por convicción. ¿Quién le puede recriminar algo a Johansen y Segalla, si hace una semana le dieron sólo un par de ojotas Havaianas para escalar el Monte Everest? La respuesta es nadie.

Hace tiempo que en un club de fútbol popular y pasional como es Colón, el equipo de fútbol pasó a un cómodo segundo/tercer plano. Ya se perdió lo más sagrado que se podía perder en esta bendita ciudad de Garay: dos clásicos seguidos.

Hace cinco fechas que Colón no gana. No hay problemas ahora con el descenso, pero no sería conveniente seguir regalando puntos así porque sí. Hoy viene Olimpo, hay que ir con Vélez, viene San Lorenzo y se termina con Gimnasia en La Plata. Son 12 puntos de oro pensando a futuro, porque en la temporada larga que asoma los descensos serán cuatro y no uno solo como ahora.

Un técnico puesto porque no había otro que agarrara el equipo a seis días de un clásico y en medio de una crisis. Un vestuario quebrado, primero con Franco, después con Alan Ruiz. Un equipo donde en el peor momento deben aparecer los jugadores menos conocidos. Un equipo fantasma el de Colón esta noche.

Mientras los dirigentes de Colón siguen agregando capítulos a “Titanes en el ring”, el equipo de fútbol viene perdiendo por nocaut. ¿Podrá hoy el Colón fantasma encontrar puntos y paz en el Cementerio?