Caso Erica Soriano

Lagostena se declaró inocente del crimen de su pareja embarazada

Nunca fue hallado el cadáver de la mujer, asesinada en el partido de Lanús durante 2010.

Télam

Daniel Lagostena se declaró inocente del crimen de Erica Soriano, su pareja embarazada que permanece desaparecida desde agosto de 2010 en el partido bonaerense de Lanús, al ser indagado durante casi siete horas por el fiscal de la causa y seguirá detenido, informaron fuentes judiciales.

Por su parte, el abogado de la familia Soriano, Marcelo Mazzeo, afirmó que está convencido de que Lagostena (54) “la mató y la hizo desaparecer” a Erica (30) y que espera que en los próximos días la Justicia le dicte la prisión preventiva.

Lagostena quedó detenido el domingo en su casa de Lanús, donde residía junto a su pareja, y ayer fue llevado a los tribunales de Lomas de Zamora para ser indagado por el fiscal de la causa, Gerardo Loureyro. Asistido por un abogado particular, el acusado comenzó a declarar alrededor de las 13.30 y terminó a las 20.15, aproximadamente.

Durante la extensa indagatoria, Lagostena se declaró inocente.

Mientras se realizaba la indagatoria, detectives de la División Casos Especiales de la bonaerense, por orden del juez de Garantías de Lomas de Zamora Gabriel Vitale, allanaron una sucursal del Banco Itaú.

Los efectivos inspeccionaron una caja que Lagostena tiene allí en busca de alguna evidencia que pudiera respaldar la hipótesis de que asesinó a su pareja e hizo desaparecer el cuerpo, pero el cofre estaba vacío.

Lo que sí detectaron los pesquisas fue que a partir de la desaparición de Erica y de la imputación que pesaba sobre él, Lagostena concurrió con frecuencia al banco y esos registros fueron secuestrados para incorporar a la causa.

“Son crímenes cometidos entre cuatro paredes pero sabemos que (Lagostena) la mató y la hizo desaparecer. Ahora hay que establecer la manera en que la mató y con qué la mató”, dijo el abogado Mazzeo.

“Es la tercera vez que se lo detiene a Lagostena y yo creo que en los próximos días se le va a dictar la prisión preventiva”, indicó el letrado y aclaró que “en este caso no se encontró el objeto del delito, que es el cadáver, pero sí se encontraron muchísimos elementos de juicio” al acusado.

Sin esperanza

Mazzeo reconoció que “la esperanza de encontrar a Erica con vida ha desaparecido” y explicó que “la relación de pareja era muy mala”, ya que la mujer “estaba a punto de abandonarlo a él” y “ése es uno de los móviles del homicidio. Había consultado con un agente inmobiliario para conseguir un departamento. La perseguía, la había separado de su familia, estaba viviendo un calvario, la típica relación de un psicópata”, añadió.

Mazzeo afirmó que “hay más de una persona que no sólo ayudó a matar a Erica sino también a hacer desaparecer el cuerpo” y en ese sentido apuntó contra un sobrino de Lagostena con quien la noche de la desaparición de la mujer hubo un intercambio excesivo de llamadas.

Según el abogado, el sistema informático de análisis de las comunicaciones Vaic determinó que “Lagostena tenía cuatro teléfonos más” y que hubo llamadas “salientes” de su casa “cuando él dijo que no había nadie”.

Cómplices

“Hubo una persona esperándolos en la casa. Se está estableciendo si son familiares o amigos de Lagostena”, dijo el letrado, quien consideró que “hay bastantes elementos para pedir la detención del sobrino” ya que “puede ser una de las personas” que colaboraron.

La detención de Lagostena fue ordenada por el juez Vitale luego de que surgieran nuevos elementos de prueba a partir del análisis de los llamados telefónicos y de la conducta inusual de la pareja de Erica.

Según el juez, el 20 de agosto de 2010, la pareja regresaba del ginecólogo a su domicilio en Lanús donde “ya se encontraba una persona no identificada al día de la fecha, quien utiliza el teléfono de línea, realizando una llamada en el horario de 22.01” y “este dato objetivo incorpora un elemento valioso en el análisis integral de la prueba, otra persona en la escena de la desaparición”.