La generación Z y el trabajo: no todo es rápido y breve

La generación Z y el trabajo:  no todo es rápido y breve

El mercado se transformó y las empresas se adaptan para recibir a estos jóvenes nacidos alrededor del cambio de milenio al ofrecer estructuras nuevas y flexibles.

 

Fuente. DPA.

¿Generación Z? El término suena un poco a fin del mundo. Y un poco de realidad hay en ello, porque esta generación conoce de tiempos de crisis, ya que forman parte de ella los jóvenes que nacieron cerca del cambio de milenio. Algunos ya tienen su primer empleo, otros están en la universidad o iniciarán pronto sus estudios. Sus ideas acerca del mundo del empleo son distintas a las de sus antecesores, y por eso hay varios potenciales conflictos que amenazan la relación entre estos jóvenes y sus empleadores.

UN EMPLEO SEGURO

Los expertos discuten acerca de a partir de qué año de nacimiento enmarcar esta generación. Para algunos expertos, forman parte de esta generación los jóvenes que nacieron después de 2000. Otros toman como referencia 1995. Muchos de estos jóvenes anhelan, en primer lugar, un lugar de trabajo seguro. El dinero no les es tan importante, lo que necesitan es que el trabajo los divierta. También valoran poder trabajar con cierta flexibilidad para poder combinar el trabajo con la familia y sus pasatiempos. Esta es una generación que no está interesada en hacer carrera a cualquier precio, afirma un estudio de la empresa Shell difundido a fines de 2015. Tampoco aceptan fácilmente hacer horas extra.

NUEVAS ESTRUCTURAS

Los Z no deben hacerse grandes problemas por su futuro laboral, al menos cuando están bien calificados. El mercado cambió y son las empresas las que se están adaptando a estos jóvenes, ofreciendo estructuras nuevas y flexibles que sean más atractivas para ellos. Esto suele incluir días de “home office”. Pero, ¿qué puede hacer la generación Z para prepararse para la vida laboral?

Los especialistas recomiendan el diálogo fluido con los jefes. Sólo logrará combinar con éxito tiempo libre y trabajo quien se comunique claramente. También deben preguntarse de qué forma solucionarán los conflictos. La generación Z suele evitar el camino más directo. En vez de hablar de forma directa con sus superiores, estos jóvenes suelen dirigirse directamente a la comisión interna de la empresa. Estas estrategias pueden no ser siempre fructíferas. Por eso, se recomienda hablar primero con el jefe para ver si es posible hallar una solución.

PREPARACIÓN

La generación Z es además la primera generación que hace todo con la computadora y que se crió entre tablets y smartphones. Esto puede ser problemático, ya que se trata de personas que están acostumbradas a que todo funcione con rapidez. Si bien, por un lado, el multitasking es uno de sus fuertes, les cuesta pensar en ciclos largos y concentrarse durante períodos prolongados. Por eso, es importante que estos jóvenes sean conscientes de que los procesos más largos y a veces aburridos también forman parte cada tanto del trabajo.

Lo que está claro es que estas capacidades no se aprenden en las universidades y las escuelas. El primer trabajo es siempre un poco un salto al vacío, sobre todo para los Z. Por eso, es importante que mediten cuanto antes sobre cómo prepararse para la vida laboral y aprovechen la instancia de los estudios, haciendo por ejemplo prácticas laborales como pasantes.