Club de Lectura

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Esta semana proponemos una entrañable historia que ahonda en las dificultades de las personas para establecer relaciones, y en la gracia de la soledad.

Por Romina Santopietro.

La elegancia del erizo (Seix Barral), es una oda a la belleza de las personas que nos rodean y, a la vez, una crítica mordaz a la burguesía francesa. La escritora habla en su literatura de la soledad, de la inteligencia del individuo y de la solidaridad.

La elegancia del erizo descubre a mujeres y hombres que viven juntos pero en mundos diferentes, separados por la cultura y las condiciones sociales.

Cuenta una historia que emerge del número 7 de la calle Grenelle, un inmueble burgués de París, en el que nada es lo que parece. Dos de sus habitantes esconden un secreto. Renée, la portera, lleva mucho tiempo fingiendo ser una mujer común. Paloma tiene 12 años y oculta una inteligencia extraordinaria. Ambas llevan una vida solitaria, mientras se esfuerzan por vencer la desesperanza.

“Deseé crear un personaje en el que cupiese el desarraigo y la soledad más absoluta y que al mismo tiempo tuviese la capacidad de tener un amplio conocimiento de la vida y fuese una sabia”, dice la autora.

Muriel Barbery ha llegado a la conclusión de que “la inteligencia es algo transversal a todos los estratos sociales” y, por ello, tanto Renée como Paloma pueden compartir las mismas inquietudes intelectuales.

La escritora alude a las dificultades de algunos seres humanos para entablar relaciones. Su peculiar forma de escribir se condensa en capítulos muy cortos que dejan al lector expectante ante los acontecimientos que va descubriendo en la trama.

El libro nos cuenta la otra cara de dos personajes muy singulares: una portera de un edificio de la calle Grenelle, en París, un edificio de ricos, pero ricos, ricos ¿eh? diputados, críticos de cocina, de esos vecinos que no tiene cualquiera, y una niña de 12 años superdotada y decidida a suicidarse no sin antes haber prendido fuego a su casa.

Renée, la portera, esconde tras una fachada de mujer inculta y vulgar a una auténtica persona con conocimientos en casi todas las materias debido a su desmedido interés. A escondidas, junto a su amiga Manuela -una portuguesa empleada de hogar y “aristócrata”, como ella misma se denomina- hablan de todo. Pero en su mundo, Renée se sienta frente a su video para ver grandes obras del cine o para escuchar a los más maravillosos músicos, sin pasar por alto sus lecturas de los filósofos o de los poetas. Así se describe: “en la seguridad de mi espíritu, no existe desafío que yo no sea capaz de afrontar. Indigente de nombre, posición y apariencia, soy en mi entendimiento una diosa invicta”.

Paloma, la niña, hija de un diputado, tiene una hermana a la que no soporta, una madre que abusa del psicoanálisis y un padre que pasa el tiempo fuera de la casa. Es muy ácida para su corta edad, y lapidaria en sus juicios: “A la belleza se le perdona todo, incluso la vulgaridad”, escribirá furiosa.

Paloma está documentando sus ideas profundas por si hay suerte y en algún momento descubre que la vida merece la pena vivirla, porque “si se teme el mañana es porque no se sabe construir el presente, uno se dice a sí mismo que podrá hacerlo mañana y entonces ya está perdido porque el mañana siempre termina por convertirse en el hoy”, filosofa en sus diarios.

La vida de estos dos “erizos” cambiará cuando llegue al edificio un nuevo inquilino, un japonés que sacará de ellas lo mejor que cada una tiene.

Una obra maravillosa, tierna, divertida, inteligente, sagaz, irónica... Realmente bella.

Para leer cuando podamos tolerar que la pátina azul de la añoranza nos tiña el día.

Sobre la autora

Muriel Barbery es una escritora francesa nacida el 28 de mayo de 1969 en la ciudad marroquí de Casablanca.

Estudió Filosofía en la Escuela de Letras y Ciencias Humanas de Lyon y ejerció la docencia en diferentes centros hasta abandonar su labor como profesora para residir en Kyoto, Japón.

Debutó como novelista con “Una Golosina” (2000), un libro centrado en los recuerdos de un crítico gastronómico a punto de morir que conoció un nuevo título, “Rapsodia Gourmet”, en una posterior reedición.

Seis años después logró un gran éxito internacional, principalmente en Europa, con su segundo libro, “La Elegancia Del Erizo” (2006).

Su tercera novela es “La Vida De Los Elfos” (2015).

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