Aguas Abiertas

“Antes de comenzar a ganar, tuve que perder muchas carreras”

Luis Gudiño

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Simpática, agradable, clara en sus conceptos: así es Pilar Geijo, que fue subcampeona mundial este año, pero no se cansa de repetir que ama lo que hace, que disfruta cada viaje, y además se hace tiempo para cursar segundo año de periodismo deportivo en el Instituto de River Plate, club al que representa en las competiciones de todo el mundo.

“Pili” fue además subcampeona mundial de aguas abiertas en 2009, 2012 y campeona mundial 2010, 2011, 2014 y 2015, todo un logro.

Balance positivo

“Este fue un año deportivo corto, atípico, con sólo tres carreras y mi balance es muy bueno. Primero corrí en Canadá, que es una de mis preferidas y donde este año quedé tercera, por lo que llevo ocho años de podio en esa carrera, lo que es algo muy especial”, comenzó diciendo.

Luego agregó: “Al ser tan pocas competencias, te tenía que ir bien en todas, ya que había poco margen de error. Luego fui a Macedonia y por lejos la mejor que tuve fue la Capri-Nápoles que gané, se me dio todo perfecto. Fui ajustando poco a poco y en la de Italia equilibré todo. Fueron dos meses de viajes largos, bastante agotadores”.

Después, indicó: “En 2017 se confirmó la Santa Fe-Coronda, lo que es una gran alegría; no sólo para mí, no hay nada como competir en mi país, pero para el circuito también ayuda muchísimo. Estaría buenísimo que se sumen también Croacia, Magog, Holanda, Francia; esperemos que se confirmen. Me gustan las carreras tradicionales de aguas abiertas, largas, de 8 o más horas”.

Sueños cumplidos

“Estoy en un momento de mi carrera que logré todos mis sueños; gané todas las carreras que quería, recibí los premios que deseaba y no perdí la motivación, eso es lo más importante. Estoy en un momento ideal, donde me estoy dando cuenta de todo lo que logré y en consecuencia, lo disfruto mucho”, dijo con una sonrisa.

“Cuando era chiquita yo hice una listita. Dije quiero ganar la Capri-Nápoles, el premio Clarín, los premios Olimpia, quiero ser la mejor nadadora, ganar el Mundial...; lo logré y hasta lo repetí en algunas ocasiones. Después de todo eso tengo que encontrar el verdadero significado del porqué estoy haciendo esto y me di cuenta de que mi satisfacción no es material, sino el hecho de hacer simplemente la actividad que tanto disfruto...”, concluyó.

Después indicó: “Soy feliz nadando, nado fuerte y gano, no es una cosa que me presione, me divierte nadar rápido. Hace dos años que me dí cuenta, y fue una satisfacción enorme, que ganando y no ganando un circuito o carrera yo era igual de feliz, y que esa felicidad no dependía de un resultado deportivo, y eso es lo más importante.

“La felicidad de una persona no puede estar en cosas que no sean internas, cómo estás en familia, con tu pareja, con tus amigos, la autoestima debe estar basada en eso y no puede depender de una carrera porque si no estás dejando mucho poder a otra cosa. Para muchos deportistas su autoestima depende de los resultados deportivos y creo que eso es un arma de doble filo. Si te va bien, la autoestima está bien alta, y cuando no, estás muy mal y deprimido”, reflexionó.

“Sé que la natación de alto rendimiento tiene un tope, defiendo ser madre y allí me alejaría de lo competitivo, pero sé que podría volver. En realidad, la maternidad no es hoy para mí un tema prioritario. En este momento estoy estudiando, soy joven, tengo 32 años. No me veo en otra faceta en el mundo de la natación. Como entrenadora no tengo vocación de enseñar, además, no sé mucho de entrenamientos. La dirigencia no es un ambiente que me guste, por mi personalidad”, expresó.

Transmite sus vivencias

En el tramo final de la charla, “Pili” indica: “Si me divierte, quiero seguir vinculada al deporte que hice toda la vida; hacer clínicas, transmitir mis vivencias, escribir. Yo siempre relaciono cosas que me pasan en la natación para superar momentos de la vida. Empecé a estudiar ciencias económicas, pero dejé porque dije no puedo estar encerrada en una oficina.

“Hoy en día, los nadadores argentinos somos muy reconocidos, siempre somos vistos como posibles ganadores, muchos hacen podios. Lo que es una lástima, es que cuando yo era chica siempre había circuitos armados y con muchos chicos en diferentes regiones. Es muy difícil que un niño incursione en Aguas Abiertas si no hay campeonatos locales. Es increíble que no haya un campeonato argentino de Aguas Abiertas”, dijo para finalizar.

Otros testimonios

Un momento de la charla con Pilar Geijo estuvo focalizado en el “Maratón más lindo del mundo”, que el año próximo volverá a correrse.

* “Ganar la Santa Fe-Coronda me gustaría, ojalá lo pueda lograr, ya que es la única del circuito mundial que nunca gané. Es muy lindo el escenario, la gente, no se ve en otro lugar algo similar.

* “Yo me inicié acá, en Santa Fe, en el Maratón del Río Paraná, por lo que tengo cariño por las dos. Yo, cuando era chiquita, corrí la Santa Fe-Sauce Viejo, la Villa Urquiza-Paraná; son localidades en las que no paro de ver amigos, de encontrarme con gente y me siento muy cómoda”.

* “El deporte en general me dejó una formación que la puedo aplicar en la vida en general. Con la natación, yo antes de comenzar a ganar, tuve que perder muchísimas carreras. Fueron muchas veces más las que perdí que las que gané”.

* “La perseverancia, pensando en positivo, en que la próxima vez será mejor; que tengo que seguir trabajando... Eso es algo que aprendí en el deporte, es un valor que yo tengo y lo aplico para cualquier cosa, para un examen, para una relación; el deporte te forma...”

* “Nunca fui a los Juegos Olímpicos; sí a Panamericanos y Mundiales. No lo busqué, no me deslumbra y no es una frustración. Yo hago lo que me divierte, me gusta nadar ocho horas. No es el formato original de las Aguas Abiertas en los JJ.OO. No es lo mismo, nadar en un río o en el mar, más de ocho horas. Yo no hago nada que no me guste, es una filosofía de vida”.

Gesto solidario

• A través de cálidas palabras, que expresan los buenos recuerdos que posee de la ciudad de Paraná, Pilar Geijo comenta que acaba de concretar una ayuda para la Escuela Integral Celia de Ortiz de Montoya de la capital entrerriana.

Por ende, agradeció a su sponsor Weber Saint-Gobain Argentina y también extendió su especial agradecimiento “a la directora, Paula Herrera y a Alicia, por su decisión constante y amor por los chicos, como todas las maestras y la gente que colabora con la escuela...”

Por último, indicó: “También debo agradecer a Alberto Sampayo y a Andrés Solioz, por ponerme en contacto con este establecimiento educativo, cuando les comenté que quería elegir una escuela de su ciudad para colaborar...”

“Hoy gané mucho más que una carrera y me siento muy feliz por ello...”, finalizó la nadadora internacional.