Se agrava la situación

Venezuela: la oposición toma distancia del diálogo y convoca a una huelga

Buscan aumentar la presión sobre el gobierno de Nicolás Maduro.

De la Redacción de El Litoral

[email protected]

Telam

Durante una multitudinaria protesta contra el gobierno de Nicolás Maduro, la oposición venezolana llamó a una huelga general de doce horas para el próximo viernes y a una marcha hacia la sede del gobierno el 3 de noviembre, en una nueva escalada de confrontación que abate el ánimo de los impulsores del “diálogo nacional”.

Las medidas de fuerza anunciadas por la opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) buscan aumentar la presión sobre el gobierno de Maduro para que dé vía libre al proceso de activación de un referendo con el que el antichavismo aspira a revocar su mandato.

Los opositores “están borrachos, están desesperados y han recibido la instrucción del norte de acabar con la revolución bolivariana como sea. (Barack) Obama se va y quiere destruir a Venezuela antes de irse”, disparó Maduro durante una manifestación de seguidores que se llevó a cabo en Caracas como respuesta a la “toma de Venezuela” con la que la oposición salió a las calles en las principales ciudades del país.

Las manifestaciones de este miércoles, la huelga del viernes y la marcha del 3 de noviembre hacia el Palacio Miraflores ponen en evidencia el endurecimiento de la oposición ante la convocatoria de un enviado del papa Francisco a Venezuela para reunir en un “diálogo nacional” a representantes del oficialismo y la oposición el próximo domingo en la isla Maragarita.

Este miércoles el ex candidato presidencial Henrique Capriles aseguró que la MUD no acudirá a esa instancia de diálogo y condicionó cualquier negociación a la realización del referendo. Sin embargo, hay disidencias en la oposición sobre la conveniencia o no de abrir el diálogo, promovido por la Unasur y bendecido por el papa Francisco.

Las calles de Caracas y de otras grandes ciudades venezolanas se colmaron ayer de manifestantes que pidieron la salida de Maduro del poder.

Capriles -indicó un despacho de la agencia ANSA- informó que al menos 120 personas resultaron

heridas y otras 147 fueron detenidas tras los choques registrados con los cuerpos de seguridad en distintos lugares del territorio venezolano.

“El gobierno garantizó que el pueblo podría protestar sin que ellos se metieran a generar violencia. Tenemos heridos y presos de la jornada de hoy y queremos que estén informados”, expresó el también gobernador del estado Miranda, vecino a Caracas.

Precisó que en Zulia los manifestantes fueron reprimidos por colectivos violentos causando cuatro heridos de bala, mientras que en el céntrico estado Aragua cinco policías agredieron “a patadas a una mujer”.

El dos veces excandidato presidencial opositor aseguró que redactará un informe sobre las agresiones para presentarlo ante instancias internacionales.

A su vez, Alfredo Romero, director de La ONG Foro Penal dijo que los arrestos se produjeron en siete de los 24 estados del país, la mayoría en Nueva Esparta y Sucre (noreste), e indicó que otras 60 personas fueron detenidas en Aragua pero más tarde quedaron en libertad.

En una de esas demostraciones, en Caracas, el secretario ejecutivo de la MUD, Jesús Torrealba, anunció los próximos pasos del antichavismo para forzar a Maduro a “retomar el orden constitucional”.

“Convocamos a una huelga general el próximo viernes; todo el mundo en sus casas”, dijo Torrealba. Añadió que el 3 de noviembre se hará una nueva marcha, esta vez hacia el Palacio Miraflores, la sede del gobierno, salvo que el gobierno decida reactivar el referendo revocatorio.