Expresiones de pesar en todo el mundo

Tragedia del Chapecoense: la cifra de muertos se ajustó a 71

  • El trabajo de los rescatistas en la zona de desastre más el cotejo con la información de personal embargado permitió precisar la cantidad de fallecidos a 71 personas. Los seis heridos se encuentran en grave estado.
14-1-92FA0026D6CDD4.jpg

Los brigadistas que trabajan en la zona del desastre pudieron rescatar las cajas negras del avión que permitirían dilucidar qué ocurrió con la aeronave. Foto: DPA

 

DPA - DyN - Télam

El avión que transportaba al club brasileño Chapecoense hacia Colombia para disputar la final de la Copa Sudamericana se estrelló el lunes por la noche cerca de Medellín, dejando un saldo de 71 muertos, entre ellos casi la totalidad del equipo, y seis heridos.

El avión que operaba con vuelos chárter, perteneciente a la empresa boliviana de capitales venezolanos Lamia, fue contratado por el club para desplazar a su plantel deportivo, acompañantes y periodistas a Medellín, donde hoy se debía disputar el partido de ida de la final ante el Atlético Nacional.

La delegación había viajado de Sao Paulo a la ciudad boliviana de Santa Cruz de la Sierra, donde comenzó el trayecto final hacia Medellín, que tendría una distancia de vuelo aproximada de 3.000 kilómetros.

Según el coronel de la Fuerza Aérea Colombiana Édgar Sánchez, la tripulación del avión reportó averías eléctricas al aeropuerto José María Córdoba del municipio de Rionegro, que sirve a Medellín, poco antes de las 22:00 horas del lunes.

Segundos después, el avión desapareció de los radares y fue encontrado partido en tres pedazos en Cerro Gordo, una cadena montañosa con 3.000 metros de altura situada a corta distancia del municipio de La Unión, a 200 kilómetros al noroeste de Bogotá y a 38 de Medellín, la capital del departamento de Antioquia.

Aunque en un principio se habló de 81 personas a bordo, autoridades de socorro confirmaron al finalizar las tareas de rescate que tras cotejar la información en los tres puertos realmente se subieron al avión 68 pasajeros de nacionalidad brasileña y nueve tripulantes bolivianos, venezolanos y paraguayos.

El director de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo y de Desastres (UNGRD), adscrita a la Presidencia, Carlos Iván Márquez, indicó que la cifra debió ser “ajustada debido a que cuatro de las personas que estaban en la lista no viajaron a última hora”.

“El balance es de seis personas heridas y 71 personas fallecidas para un total de 77 personas”, dijo Márquez.

Por su parte, la Aeronáutica Civil de Colombia (Aerocivil) reportó que seis personas fueron rescatadas con vida, entre ellas el portero Jackson Follmann, a quien le fue amputada una pierna, y los defensores Alan Ruschel y Neto.

Los restantes sobrevivientes son Rafael Valmorbida (periodista brasileño, internado en el hospital del vecino poblado de La Ceja), Ximena Suárez (auxiliar de vuelo, en la Ceja también) y Erwin Tumiri (técnico de aeronave, en clínica Somer).

¿Sin combustible?

Los socorristas que llegaron al lugar del siniestro, caracterizado por ser lluvioso y de difícil acceso aéreo y terrestre, indicaron que el avión no se incendió, por lo que no se descarta una falta de combustible.

No obstante, la Dirección General de Aeronáutica Civil de Bolivia (DGAC) aseguró que el avión siniestrado en Colombia “salió en perfectas condiciones de suelo boliviano” y confió en el resultado de las investigaciones.

La Aerocivil confirmó luego el hallazgo de las cajas negras del avión, lo que podría ayudar a esclarecer las causas del siniestro. Según versiones periodísticas la responsabilidad del siniestro habría sido del piloto Miguel Quiroga, quien presuntamente omitió varios de los protocolos establecidos para este tipo de emergencias.

A raíz del accidente, la Conmebol (Confederación Sudamericana de Fútbol) anunció la suspensión de la final y de todas sus actividades por tiempo indefinido. “Todas las actividades de la Confederación quedan suspendidas hasta nuevo aviso”, comunicó el ente rector.

El presidente del organismo, el paraguayo Alejandro Domínguez, arribó a Medellín para afrontar de cerca la tragedia y definir cómo sigue la Copa Sudamericana tras la petición hecha por el Nacional de declarar al Chapecoense campeón del torneo.

También como muestra de solidaridad, varios clubes de fútbol brasileños propusieron de forma conjunta una batería de medidas solidarias para la reconstrucción del Chapecoense, entre las que está el préstamo gratuito de jugadores para la temporada 2017.

Además, varios de los grandes clubes y jugadores del mundo y también la FIFA publicaron en sus páginas oficiales, sus cuentas de Twitter o por medio de comunicados, sus condolencias respecto al siniestro. Entre los mensajes de luto y solidaridad se encuentran los de iconos como Pelé, Neymar, Lionel Messi o Diego Maradona, quien se declaró “desde hoy hincha del Chapecoense”.

Las hipótesis que se barajan sobre la caída de la aeronave

La hipótesis respecto a las causas del siniestro aéreo que provocó la muerte de 71 pasajeros es que “el piloto de la nave no declaró a tiempo la emergencia” cuando se quedó sin combustible, informó hoy a Télam el periodista colombiano Steven Arce.

“La más clara hipótesis que se maneja ‘off de record’ es que, al parecer, el piloto no eligió Cali y Bogotá para evitar una multa, y no declara la emergencia cuando se queda sin combustible”, dijo Arce a Télam, a poco de terminar el noticiero Radio Caracol. Arce relató que la torre de control “le da prioridad al (avión) de Viva Colombia porque trae más pasajeros”.

El avión siniestrado, de Lamia, “es el único que declara emergencia, pero ya poco antes de aterrizar, a 9.000 pies (unos 2.700 metros), cuando se requieren al menos 10 mil pies”.

“Acabo de salir del programa de televisión nacional, y se vive un ambiente de tristeza generalizada, no sólo de los futboleros”, describió Arce.

Respecto a los seis pasajeros heridos, el periodista de Caracol contó que “sólo se dan los partes autorizados por las familias”.

“La última información es de uno de los porteros (el arquero suplente) Jackson Follmann, que fue amputada una de sus piernas para salvarle la vida, en el hospital de Antioquia”.

¿Le cayó un rayo?

El presidente de la Línea Aérea Mérida Internacional de Aviación (Lamia) de Venezuela, vinculada a Lamia Bolivia, y propietario del avión siniestrado en Colombia, Ricardo Albacete, afirmó que “no se sabe si lo agarró un rayo y lo apagó”.

Albacete, de nacionalidad venezolana, había inaugurado la empresa en 2011 en Venezuela pero, por diferentes motivos administrativos y comerciales, arrendó sus aviones ARJ85 a Lamia de Bolivia, una empresa de la que él asegura no ser responsable.

En diálogo con el portal español elconfidencial.com, Albacete sostuvo: “no somos accionistas ni empleados de Lamia Bolivia, sino de Lamia Venezuela; dejamos el mismo nombre para no perder la pintura del avión; nosotros somos los que les arrendamos a ellos los aviones, pero el avión es operado por la empresa boliviana”.

El venezolano también se desentendió del empresario chino Sam Pa, tachado de mafioso en Estados Unidos por apoyar a Robert Mugabe, de quien dijo: “Iba a comprar los aviones, pero al final no se concretó nada”, aunque consideró un “amigo” al inversor asiático.

Lamia comenzó a operar desde el aeropuerto Alberto Carnevali de la ciudad venezolana de Mérida y dio el salto a Bolivia en 2014 con los aviones de Albacete.

Baja autonomía

El avión de la compañía Lamia “debería tener por reglamentación autonomía de vuelo suficiente, más 30 minutos de espera y 45 por cualquier eventualidad”, aseguró el director nacional de la Jiacc Daniel Barafani.

El avión ARJ 85 partió del aeropuerto Viru Viru de Santa Cruz de la Sierra, Bolivia y tenía previsto llegar en cuatro horas a Medellín, Colombia, aunque minutos antes de arribar comenzó a volar en círculos, sin comunicación con la torre de control hasta que desapareció de los radares.

Barafani dijo a Télam que “al haberse recuperado las dos cajas negras servirá para dilucidar gran parte de lo que pasó, si la calidad de la información es buena, se facilita mucho la investigación”.

“Cuando un avión vuela en círculos es porque está en patrón de espera y, en ese lapso, si el piloto detecta alguna falla debería haber una comunicación inmediata con la torre de control para pedir prioridad de aterrizaje”, aseguró el funcionario.

Barafani destacó que “el avión es seguro, tiene cuatro motores” y detalló que por un mecanismo e cooperación que hay en la región, “estamos analizando enviar un inspector observador si es que Colombia nos lo pide”.

“Primero hay que enfocarse en el qué y en el cómo y eso se verifica de forma relativamente rápida y nos acercaríamos bastante a la realidad de lo que pasó, luego hay que poner el foco en el por qué, que es en donde se detectan probables fallas en el sistema y eso es lo que lleva más tiempo”, aseguró.

El dato

Sin pasaporte

  • Matheus Saroli, hijo del director técnico del Club Chapecoense, iba a viajar junto con su padre y el resto del plantel pero no se embarcó en San Pablo al haberse olvidado su pasaporte. A través de las redes sociales se conoció la historia del hijo del entrenador que a raíz de este percance se salvó de milagro. Su padre, Caio Junior, entrenador del equipo, es uno de los fallecidos. “Estaba en San Pablo, pero no embarqué porque me había olvidado el pasaporte‘, explicó en las redes sociales Matheus Saroli.
14-2-20161130-636160614451343184.jpg

Fotografía del capitán boliviano Miguel Quiroga, quien pilotaba el avión Lamia que se estrelló Colombia. Foto: Agencia EFE

Estado de los heridos

  • Los seis sobrevivientes de la tragedia de Chapecoense están internados en varios hospitales con fracturas, traumatismos y golpes, algunos de ellos en grave estado. “Sobreviví porque me manejé con los protocolos de seguridad, puse las maletas entre las piernas para mantener la posición fetal”, dijo el tripulante boliviano Erwin Tumiri a radio Caracol.

Otra de las sobrevivientes y miembro de la tripulación es Ximena Suárez, de 27 años: “Súbitamente, se apagaron las luces del avión y sentí un estruendo”, dijo la azafata boliviana, quien está internada en el hospital San juan de Dios con fractura de tibia y peroné en la pierna derecha, fractura de cuello, de radio y cúbito y golpes en la cabeza. Fue llevada al hospital San Juan de Dios de la Ceja. En tanto, los tres jugadores que sobrevivieron al accidente son Alan Ruschel, Jackson Follmann y Helio Neto. De Follmann, de 24 años, se sabe, por testimonio de un médico del hospital San Juan de Dios, que debieron amputarle una pierna. Ex jugador de Gremio, era suplente de Danilo y se había sumado este año al Chapecoense.

Ruschel es lateral izquierdo, y tiene 27 años. Les pidió a los rescatistas que buscaran su anillo de compromiso mientras lo retiraban del avión. “¿Mis amigos? ¿Mi familia? ¿Dónde están?”, dijo en medio de la desesperación. Su estado es crítico porque tiene una vértebra fracturada y una lesión en la médula. “Después de una cirugía, en condición estable, se fue a la clínica de Río Negro para los exámenes, ya que las secuelas en las extremidades inferiores llevan a riesgo de pérdida de movimiento”, informaron desde el San Juan de Dios. Neto es el que presenta más riesgo: “Tiene traumatismo cerebral y fracturas expuestas en extremidades. Fue entubado y está siendo operado”, reveló un parte médico de ese mismo hospital. Tiene 31 años, jugó en Guaraní y Santos y fue el último en ser rescatado con vida.

El último sobreviviente es el periodista Rafael Valmorbida Henzel, quien tiene más de 20 años de experiencia en radio y televisión. Está internado con un trauma en el tórax y fractura expuesta en la pierna izquierda.