Ganancias en el país del rojo fiscal y la recesión

Déficit o salarios, ésa es la cuestión

Macri quiere volver a los “superávit gemelos” que cuidaba Néstor. Prat Gay promete devolver a los contribuyentes lo que Cristina les sacó. Cambiemos acepta gravar más a los casinos que proliferaron con los “K”, pero no la renta financiera.

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Massa es generoso porque no tiene que pagar lo que él propone aumentar. Macri hizo en campaña una promesa que ahora, como presidente, posterga en el tiempo. Foto: Archivo El Litoral

 

De la redacción de El Litoral

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DyN/Télam

Cambiemos no quiere -por ahora- un impuesto a la renta financiera, porque eso ahuyentaría inversores en los títulos que emiten el Tesoro o el Banco Central para financiar el déficit enorme que tiene el país. Pero podría acceder a cobrar un gravamen a los tragamonedas, para mejorar la reforma del Impuesto a las Ganancias y acercarse al proyecto de Sergio Massa.

“Este nuevo tributo del que se habla provocará automáticamente que las empresas ajusten su parque de máquinas”, se quejó hoy el Sindicato de Juegos de Azar. Curioso argumento de un sindicato que defiende... ¿las máquinas?

El oficialismo en Diputados aceptaría además duplicar los topes de facturación para los monotributistas y que se permita deducir hasta el 40 % de los alquileres de vivienda única, beneficios no incluidos originalmente en el proyecto oficial. El impuesto a las tragamonedas aportaría unos 6 mil millones al año para financiar esos beneficios.

Mauricio Macri defendió el proyecto oficial que aumenta 15 % el mínimo no imponible de Ganancias, porque “es lo posible” que puede hacer en este momento, y aseguró que el tributo afecta sólo al “3 % que más gana” en el país. “Yo gobierno especialmente para los que menos tienen, para el 32 % que está en la pobreza”, aseguró el presidente.

El jefe de Estado apeló a una explicación que solía usar Kicillof (los alcanzados son pocos y ganan más) aunque la ex presidente aumentaba la presión fiscal. Macri además le apunta a Massa, cuyo proyecto beneficia más a los que más cobran... entre ellos los camioneros representados por los Moyano. Los bancarios no estarán contentos.

Durante una entrevista publicada por varios medios del interior, el mandatario resaltó que en el inicio de su gestión se triplicó el mínimo no imponible de la cuarta categoría de ese impuesto, y afirmó que la propuesta que impulsa genera “una escala progresiva mucho más justa”.

El jefe de Estado reconoció que “el problema fundamental que enfrenta la Argentina en términos de su equilibrio como sociedad es el enorme déficit fiscal, que hay que bajar, y tiene la carga impositiva más alta de la región”.

“Eso es un impedimento enorme para generar trabajo, y es el trabajo el que nos va a sacar de la pobreza. Espero que el año que viene nos sentemos alrededor de una mesa y que en vez de que todos vengan a pedir, todos vengan a decir qué vamos a hacer para lograr ese equilibrio. Alguien alguna vez valoró los superávits gemelos, después se los olvidó”, subrayó en referencia al ex presidente Néstor Kirchner.

Alfonso Prat-Gay aseguró, en su cuenta de Twitter, que la rebaja proyectada de Ganancias sobre el salario es “la más grande de la historia” y que al cabo de la presidencia de Macri, se devolverá a los contribuyentes “lo que Cristina Fernández les sacó en el segundo mandato”.

Mineras

  • Massa propone gravar a la minería; la Cámara Argentina de Empresarios del sector replicó que eso generaría daños al sector que prevé aumentar exportaciones por U$S 1.300 millones desde Alumbrera, Pirquitas, Casposo, Manantial Espejo y Sierra Grande. Planifican compras de bienes y servicios nacionales más salarios por U$S 870 millones. Sin retenciones -aseguran- se preservaron 12.000 puestos de trabajo directos e indirectos, y ocho empresas anunciaron inversiones por U$S 1.900 millones. La Ley de Glaciares sigue vigente e inocua.