Festival del Pescador

Los Tekis en Sauce Viejo

La fiesta jujeña llega al Festival del Pescador para la primera noche la del viernes 13 de enero próximo. Mauro Coletti, Sebastián López, Juanjo Pestoni, Walter Sader y José “Pucho” Ponce son los protagonistas de esta historia que ya cumplió 25 años desde que subieron por primera vez en el año 1991 al escenario de la Serenata a Cafayate. Eran adolescentes que se conocían desde chicos y que se fueron convirtiendo en profesionales como grupo. Se consagraron después en el Festival Nacional de Cosquín.

Son muy fieles a su provincia Jujuy y a sus tradiciones. Pretenden que Jujuy se convierta en la capital de la cultura andina en Latinoamérica. Destacan que “hoy, el 80 por ciento de los grupos folclóricos argentinos incorporó la quena y el charango e incluyó por lo menos un carnavalito en sus repertorios”.

Entendimientos

Surgen varias inquietudes para que Los Tekis respondan pero fundamentalmente todo lo relacionado con las creencias y la Pachamama. Dicen que “es un sentimiento tan real y fuerte como difícil de explicar. Cuando participamos de la ceremonia de la Madre Tierra, es como que nos liberamos del pasado, nos llenamos de energía y arrancamos de nuevo. Desde el escenario, tratamos de generar conciencia para que el público cuide los recursos naturales que se están agotando, como el agua. Si queremos dejarles a nuestros hijos un futuro mejor, debemos enseñarles a respetar el medio ambiente, como nos pide la Pachamama”.

Llegaron a Santa Fe hace poco tiempo por el cumpleaños de la ciudad y conquistaron al público en la Costanera, ahora vuelven al Festival del Pescador adonde fueron ovacionados en la edición anterior.

—¿Hay alguna clave para mantenerse en el tiempo con tanto éxito?

—Sin el cariño y la amistad que nos tenemos no hubiéramos podido recorrer este largo camino. La clave es ser sinceros entre nosotros. Discutimos bastante, pero eso nos sirve para desagotar y volver a empezar. Siempre priorizamos la cuestión humana por sobre los proyectos laborales. Cuando uno alcanza un objetivo, siempre se pone nuevas metas. Por ejemplo, nos gustaría que la continuidad que tenemos con las giras en la Argentina se extienda por toda Latinoamérica; y que, en lugar de estar nominados para un Grammy, terminemos ganándolo -señalan.