El bloque del PJ acordó cambios con la Casa Gris

Inundación: créditos y ayuda económica para productores

El martes, el gobernador anunció medidas para enfrentar la crisis económica que causó la emergencia hídrica. El proyecto llegó a la Cámara Alta el miércoles y ayer lo aprobó.

 

Luis Rodrigo

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En trámite muy veloz, el proyecto de ley para la creación del Fondo de Inversión y Desarrollo de la provincia de Santa Fe logró media sanción de la Cámara de Senadores. La de Diputados lo tratará -según se estima en la Legislatura- el primer jueves de marzo, con los cambios que ya fueron consensuados, ayer, entre el peronismo y el Poder Ejecutivo provincial.

Se trata de la Ley que pidió el gobernador Miguel Lifschitz, en el marco de una serie de medidas para enfrentar, al menos en parte, las secuelas económicas de la emergencia hídrica.

La crisis en el aparato productivo santafesino, en especial en el borde oeste de la provincia y sobre todo entre los tambos afectados por la inundación es el foco que tiene el mensaje 4534 (Expediente 34.483 PE) que con un tratamiento exprés despachó ayer el Senado.

Unas horas antes de la sesión, los senadores del PJ se entrevistaron con los ministros de la Producción, Luis Contigiani, y de Economía, Gonzalo Saglione, para analizar de forma integral la situación del agro y de las industrias derivadas de la producción primaria, en el marco de la crisis económica causada no sólo por la emergencia hídrica sino también la situación económica nacional.

En el bloque del justicialismo, los ministros acordaron cambios al proyecto de ley que procuran ampliar los mecanismos para dar una ayuda a los productores.

“Al mensaje lo recibimos hace unas pocas horas y ya hemos logrado el consenso para contar con la media sanción”, destacó en su banca el senador Alcides Calvo (PJ-Castellanos), presidente de la Comisión de Presupuesto, cuyo despacho se usó para el tratamiento sobre tablas, con los dos tercios que el caso exige.

Detalles

Antes, el jefe del oficialismo Felipe Michlig (UCR-San Cristóbal) abundó en los detalles del Fondo, que tendrá dos líneas.

La primera formada por $ 400 millones apunta especialmente a los tambos más afectados, es decir, aquellos que además de la crisis hídrica ya vienen con graves problemas económicos que “los han llevado a salir del sistema bancario”, o lo que es lo mismo que no pueden ya ir a pedir préstamos.

Ese monto se formará con $150 millones de la provincia y un préstamo de la Nación por 250 “que esperamos que el gobierno nacional cumpla en otorgar a la provincia”, dijo el radical.

Ambos destacaron que entre los ministros y los senadores del peronismo se agregó otra línea de acción para atender a aquellos productores que sí cuentan con posibilidades de acceder al crédito bancario. La intención es que lo hagan en mejores condiciones y con un año de gracia.

Calvo dijo que “a pedido de los senadores del justicialismo que representan a varios de los departamentos afectados” se cambió el texto finalmente aprobado para que la provincia “pueda otorgar créditos a partir de una licitación de tasas por parte de entidades financieras que operan en Santa Fe para los productores, que van a contar con préstamos con un período de gracia y una tasa ventajosa: con 4 puntos subsidiados por el Estado provincial para que -como máximo- la tasa final no supere el 13%”.

Se estima que mediante este mecanismo podrían volcarse a los productores con problemas unos $ 500 millones.

Michlig, por su parte, destacó que el Fondo que se anunció para la emergencia tendrá un carácter permanente y universal, para toda la actividad productiva en Santa Fe y subrayó que la mayoría justicialista colaboró con la media sanción, al dar un tratamiento exprés al despacho que pasó a la Cámara Baja.

Debate sobre las causas

  • En algo estuvieron de acuerdo el oficialismo y la oposición en el Senado, respecto de las causas de la inundación. Además de la obviedad de la lluvia, los protagonistas de ese debate señalaron y admitieron, según el caso, a la falta de obras hídricas que pudieron haber mitigado la inundación.

Alcides Calvo (PJ-Castellanos) mostró la cruel materialización de un concepto que parece abstracto cada vez que se discute el próximo presupuesto y se revisa lo hecho respecto del anterior: la subejecución de obras, es decir, los altos números presupuestados en la cuenta de Bienes de Capital que sólo decoran la llamada ley de leyes. Advirtió que ahora hay una suma inédita para Infraestructura: $29.000 millones, y remató con un “ojalá”, para que las obras finalmente se hagan.

A Felipe Michlig (UCR-San Cristóbal) le tocó responderle. El jefe del oficialismo en el Senado hizo equilibrio entre una defensa de las dos gestiones del Frente y la necesidad de contar con los votos del peronismo para aprobar la ley en discusión (ver aparte).

El radical recordó entonces que los gobiernos de Binner y Bonfatti sufrieron “la discriminación más enconada” del gobierno nacional kirchnerista. Y también puso números: “Estábamos en el puesto 24 en la lista de las provincias beneficiadas con asignaciones nacionales”. A la ausencia de inversiones nacionales en esos años sumó el reclamo por la coparticipación, que la Corte reconoció recién cuando se terminaba el gobierno K y, de paso, con más actualidad agregó: “El gobierno nacional actual ha comprometido ayuda por la inundación que esperamos que se concrete”. Y en el mismo sentido indicó que “todavía Santa Fe está esperando que la Nación la autorice (como ha hecho con Buenos Aires y la Ciudad Autónoma) la totalidad del endeudamiento externo previsto, se aprobaron 250 millones de dólares y resta una suma igual”.

El dato

Algunos números

  • En el Senado, hubo ayer números contundentes en el debate sobre qué ha provocado la inundación en Santa Fe. Los senadores dijeron que en 2016 cerraron 60 tambos en el departamento Castellanos y que en lo que va de 2017, ése también es el número que se ha perdido. Más aún: de los 1.400 con que contaba el departamento unos años atrás, hoy quedan menos de mil.