Tras la emboscada

Posponen la sentencia por el crimen del líder de los Monos

Se tomó esa decisión porque Facundo Muñoz, uno de los acusados, fue herido en el ataque en la autopista y su estado de salud no le permite asistir al final del juicio.

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“Macaco” Muñoz fue trasladado al hospital Cullen, luego de ser herido en el episodio de la autopista.

Foto: El Litoral

 

Germán de los Santos

Corresponsalía Rosario

Tres días después de la emboscada en la autopista Rosario-Santa Fe contra los tres acusados del crimen de Claudio Cantero, líder de los Monos, se pospuso la lectura de la sentencia en este juicio debido a que Facundo Muñoz, uno de los heridos en el atentado, no podrá participar del final del proceso judicial a causa de las heridas que le provocaron los balazos.

Aún no hay ningún detenido por el ataque, ni tampoco pistas certeras. Lo único que despejó el fiscal Miguel Moreno es que se trató de un ataque homicida. Este atentado provocó “conmoción” dentro de los tribunales, como admitió la fiscal Cristina Herrera, quien el martes pidió al tribunal prisión perpetua para Milton Damario y Muñoz, imputados de ser los autores materiales del crimen de Pájaro Cantero, y solicitó 22 años de cárcel para Luis Pollo Bassi, por considerarlo instigador.

Enrique Sirio, abogado de Bassi, opinó en diálogo con El Litoral que con el atentado contra los tres imputados se buscó “eliminar a los protagonistas de esta historia para evitar una sentencia”. Explicó que en el juicio “se ventilaron una cantidad de irregularidades de la investigación” y agregó: “Citaron a uno de los sospechosos, como es Luis Paz, y nunca lo encontraron. Este hombre salió del país [hacia Chile] un día antes de que comenzara el juicio”.

“El juicio se terminaba; los alegatos ya habían concluido, y el lunes próximo se tiene que dictar la sentencia. Hay una situación muy delicada que se estuvo ventilando en el proceso. Salieron a la luz cosas que durante cuatro años nunca fueron investigadas. Una red de connivencia con algunos testigos para favorecer la posición de la Fiscalía que logramos desbaratar con planteos de contradicciones serias en sus testimonios. Un armado de pruebas de red telefónicas que no condicen con la realidad”.

Paz es el padre de Martín, alias El Fantasma, que fue asesinado el 8 de septiembre de 2012. Los Monos están acusados de este homicidio. Vive actualmente en un barrio cerrado de la ciudad de Santa Fe y está siendo investigado por supuesto lavado de activos ligados al narcotráfico.

Interrogantes

Con el paso de las horas sólo se lograron despejar unos pocos interrogantes sobre la emboscada. El fiscal Moreno afirmó que se había tratado de un “ataque homicida” y descartó la hipótesis del intento de rescate que rondaba por el Ministerio de Seguridad provincial, a pesar de que el ministro Maximiliano Pullaro sostuvo, en una conferencia de prensa, que el atentado no tuvo “ni premeditación ni logística”.

El fiscal detalló que la policía aún no secuestró vainas de los proyectiles que se usaron en la emboscada, pero descartó el uso de fusiles FAL. Confirmó que participaron dos vehículos. Moreno afirmó, además, que los uniformados que custodiaban el traslado “no repelieron el ataque”. El móvil penitenciario y el vehículo de custodia recibieron siete balazos cada uno.

Análisis

El titular del Servicio Penitenciario Pablo Coccocioni explicó que “por protocolo no pueden utilizar ese armamento en un lugar público y abierto como una autopista para evitar herir a otras personas”.

Pullaro aseguró que el ataque a balazos contra los tres acusados del crimen de Pájaro Cantero “se trató de un arrebato de matones, que pretendió, en principio, cobrarse la vida de los detenidos, el cual no tuvo ningún tipo de éxito porque el protocolo que llevó adelante el Servicio Penitenciario logró detener esta agresión”.

Los investigadores analizaban las cámaras de seguridad en la zona céntrica para detectar si hubo un seguimiento previo del móvil del Servicio Penitenciario que trasladaba a los detenidos desde los Tribunales hasta la cárcel de Coronda.

La policía dijo que tras el ataque se montó un operativo cerrojo en las rutas de la zona, pero los atacantes nunca fueron encontrados. Lo que llamó la atención es que más de dos horas después del atentado la policía decidió cerrar el carril que va de Rosario hacia Santa Fe de la autopista. Allí buscaban las vainas que hasta ahora no encontraron.