La política en foco

Emboscada y conmoción

El intento de asesinar a tres detenidos durante un traslado por la autopista genera muchas dudas. Y las pocas certezas no son nada tranquilizadoras.

Germán de los Santos

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La emboscada del martes pasado en la autopista Santa Fe-Rosario derramó una sensación extraña, de “conmoción”. El hecho es de suma gravedad y aún no hay hipótesis firmes sobre los posibles autores ni hay detenidos. La única certeza es que quisieron matar a los tres hombres que iban en el camión del Servicio Penitenciario.

La palabra “conmoción” la usó la fiscal Cristina Herrera. Cuarenta minutos antes del ataque había desplegado en el edificio de tribunales un duro alegato contra los acusados que fueron atacados a balazos a la altura del kilómetro 7 de la autopista Brigadier López.

La funcionaria del Ministerio Público pidió prisión perpetua para Milton Damario y Facundo Muñoz, imputados como los autores materiales del crimen de Claudio Pájaro Cantero. Y solicitó 22 años de cárcel para Luis Bassi, acusado de ser el instigador del asesinato, que encendió en mayo de 2013 un raid de venganzas que conmovieron a la ciudad.

Esa seguidilla de muertes tras el homicidio del líder de la banda de los Monos profundizó una causa que estaba dormida hasta aquel momento en los tribunales de Rosario. Era el expediente 913/12, en el que se investigaba otro crimen, el de Martín Paz, acribillado a las 3 de la tarde en pleno macrocentro de Rosario. Esa causa cobró un ritmo frenético tras el crimen del Pájaro Cantero, ocho meses después. Desde el gobierno se sospechaba que los Cantero irían en busca de los asesinos y Rosario quedaría envuelta en una saga de sangre y rabia. En esa semana de fines de mayo fueron asesinadas cinco personas a plena luz del día.

La causa que manejó el juez Juan Carlos Vienna acumuló muchísima evidencia contra la banda de los Monos. Se hizo un inventario del manejo del negocio narcocriminal y la violencia que giraba en torno a la disputa de territorio por la venta de droga. Ese expediente fue ratificado en todas las instancias judiciales y llegará a juicio a mitad de año. El magistrado se apartó del caso, luego del escándalo en el que se lo ligó a viajes al exterior con Luis Paz, padre del narco asesinado. En esa causa nunca se investigó a este hombre ligado al negocio del box que vive actualmente en Santa Fe.

Pero en el juicio por el crimen del Pájaro volvió a aparecer con fuerza ese nombre. La fiscal Herrera pidió que se abra una causa por su posible vinculación en el crimen del líder de los Monos. Fue citado a declarar junto con su hija Mercedes, ex pareja del Pájaro Cantero, pero la policía nunca lo encontró.

Cuando su nombre apareció por primera vez comprometido en tribunales se produjo la emboscada en la autopista. Los tres hombres que intentaron asesinar argumentaron que Paz fue quien estuvo detrás del crimen por el que los van a condenar.

Enrique Sirio, abogado de Bassi, opinó en diálogo con El Litoral que con el atentado contra los tres imputados se buscó “eliminar a los protagonistas de esta historia para evitar una sentencia”. Explicó que en el juicio “se ventilaron una cantidad de irregularidades de la investigación” y agregó: “Citaron a uno de los sospechosos, como es Luis Paz, y nunca lo encontraron. Este hombre salió del país [hacia Chile] un día antes de que comenzara el juicio”. Tras el ataque en la autopista, el juicio se pospuso hasta nuevo aviso.

La seguidilla de muertes tras el homicidio del líder de la Banda de los Monos profundizó una causa que estaba dormida hasta aquel momento en los tribunales de Rosario.