Sigue la tensión; la convocatoria es para mañana a las 11

Concejo: comisiones “a medias” y aún es duda si sesionará el FPCyS

En el interbloque frentista piden al presidente un “gesto de diálogo”; es decir que complete con sus nombres la conformación de las comisiones. Para un edil opositor, con ese argumento “nos quieren condicionar a que aprobemos el endeudamiento por $ 300 millones”.

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Las tensiones institucionales en el Deliberativo siguen por la designación de las comisiones. Al cierre, aún el FPCyS no confirmó si asistirá a la sesión prevista para mañana.

Foto: Archivo El Litoral / Pablo Aguirre

 

Luciano Andreychuk

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El Concejo sigue un derrotero de tensiones institucionales de escasos antecedentes en su historia. Luego de que la semana pasada el presidente del Concejo, Sebastián Pignata, conformara las cinco comisiones por decreto -haciendo uso de sus facultades- con mayoría del interbloque opositor (PJ) y dejando “casilleros en blanco” de minoría para que las completen los propios ediles frentistas, éstos reaccionaron duramente en una conferencia y con fuegos cruzados a través de los medios.

¿Pero por qué tanto ruido sobre las comisiones, que parecen ser el “patio trasero” del Concejo? Pues porque tienen más importancia de lo que se cree: las cinco comisiones permanentes se encargan del estudio y despacho de todos los proyectos ingresados. Y los despachos firmados con firmas suficientes llegan al recinto para su tratamiento final. Cada comisión es la “cocina” desde donde salen proyectos que impactarán, directa o indirectamente, en la vida de los vecinos.

A una semana de aquel “culebrón” político entre oficialistas y opositores por la designación de nombres, El Litoral supo que el lunes sesionaron dos comisiones (Servicios Públicos y Planeamiento Urbano) de las tres convocadas (Desarrollo Social no trabajó por falta de quórum), y sólo con los concejales del PJ. “Ayer martes trabajaron las dos comisiones restantes (Hacienda y Gobierno), también sólo con los ediles del PJ”, confirmaron fuentes de secretaría legislativa a este medio.

“El lunes se notificó formalmente mediante telefonograma (un sistema interno de notificación que llega a cada domicilio legal de cada uno de los 17 ediles de Concejo) de la convocatoria de la sesión para mañana jueves a las 11”, dijeron las mismas fuentes. Pero con un trabajo “a medias” en las comisiones -sin todos sus integrantes- y el diálogo entre ambos interbloques casi fracturado, hay dudas sobre si habrá una sesión “normal”.

“Un gesto de diálogo”

“Aún no hay nada decidido. Estuvimos conversando ayer entre todos los miembros de nuestro interbloque. Pero no se nos han llamado: el lunes presentamos nota a presidencia, y no se nos respondió. Seguramente mañana (por hoy) decidiremos si asistimos a la sesión o no”, adelantó ayer a la tarde a El Litoral Adriana Molina, presidenta del interbloque del FPCyS, poniendo un manto de dudas sobre qué pasará el jueves. El interbloque opositor, con nueve de los 17 ediles, reúne quórum. Pero, en un escenario hipotético, un recinto sesionando con únicamente los ediles del PJ sería algo cuanto menos insólito.

El clima interno por los pasillos del Concejo es de “tensión y preocupación. Hoy no hay un funcionamiento democrático o regular (del Concejo)”, marcó el termómetro Molina. Desde su sector se sigue con la misma posición de la semana pasada: “En el decreto (Nº 8.862 de presidencia) no estaban nuestros nombres, y en todas las comisiones había mayoría de la oposición. No prestamos acuerdo” a ese decreto.

“No nos sentimos representados”, agregó la radical. Y confirmó que no se asistió al trabajo en comisiones (ni lunes ni martes) “porque aún no formamos parte de las comisiones, porque éstas están sin nuestros nombres. “Esperamos un gesto de diálogo del presidente del Concejo (Sebastián Pignata)”.

Carlos Suárez, también del interbloque del FPCyS, coincidió con Molina en que aún no está definido si el sector al que pertenece irá a sesión. “Queremos una instancia de diálogo que nos represente. De lo contrario, pareciera que no nos necesitan (desde el PJ) para funcionar... Eso es lo que seguimos planteando”. Y se esperanzó en “encontrar la normalidad del funcionamiento institucional con un llamamiento al diálogo”.

¿Pero por qué tanto ruido sobre las comisiones, que parecen ser el “patio trasero” del Concejo? Pues porque tienen más importancia de lo que se cree: las cinco comisiones permanentes se encargan del estudio y despacho de todos los proyectos ingresados. Y los despachos firmados con firmas suficientes llegan al recinto para su tratamiento final. Cada comisión es la “cocina” desde donde salen proyectos que impactarán, directa o indirectamente, en la vida de los vecinos.

“Nos quieren condicionar”

“Cuando ellos (por el interbloque frentista) quieran integrar las comisiones, lo podrán hacer con total libertad”, dijo el opositor Ignacio Martínez Kerz (interbloque PJ). Se refería a que hoy las comisiones están integradas con quórum por tres concejales de su sector, y se dejaron disponibles los dos nombres de los ediles del FPCyS. Cada comisión tiene cinco ediles.

A las designaciones de los nombres para llenar esos casilleros en blanco “las pueden completar la presidenta del interbloque frentista (Adriana Molina), o los presidentes de cada sub-bloque que conforman el interbloque: por ejemplo, si viene Franco Ponce de León (del CC-Ari) y dice: ‘Quiero estar en estas dos comisiones’, listo. Durante cuatro años (los ediles del FPCyS) tuvieron mayoría en las comisiones, hicieron lo mismo”, fustigó.

Pero Martínez Kerz fue más al hueso de la cuestión política: “El tema no pasa por una comisión más o una menos. Ellos (los concejales/as frentistas) están condicionando su integración a las comisiones si nosotros comprometemos nuestro voto para dar autorización al endeudamiento de $300 millones que está pidiendo (el intendente José) Corral”, disparó.

“Y no lo vamos a hacer. Ese pedido de toma de deuda es flojo, no tiene sustancia. Nos condicionan por el endeudamiento, que a nuestro criterio tiene aristas irrisorias. La intendencia pide plata para pintar sendas peatonales, o para comprar semáforos por cifras exorbitantes”.

Aclaró que no se está en contra de las obras de gas domiciliario para Colastiné (de $42 millones), que se harían con esa toma de deuda. “Pero primero decimos que hagan el gasoducto troncal. O que primero precisen cuánto pagarán por contribución por mejoras los frentistas de ese distrito: es del sentido común”, fijó posición.

El dato

Endeudamiento

El último día de abril, el intendente Corral deberá remitir al Concejo la ejecución presupuestaria de 2016. “Recién con esa ejecución en la mano, se puede analizar cómo se ejecutaron los fondos en las diferentes áreas de gestión. Con esos datos se podrá analizar si se autoriza o no el pedido de toma de deuda”, dijo Martínez Kerz.