Un empate que se veía venir

Lo negativo: no ganó; lo positivo: no perdió

  • Unión igualó con Patronato 0 a 0 pero eso es lo que menos importa. En el banco estuvo Eduardo Magnín, en la platea Pablo Marini, en el campo de juego, casi nadie.
Lo negativo: no ganó; lo positivo: no perdió
 

Mismos actores, mismo arco. En la pretemporada más larga del fútbol argentino. Durante los meses de verano, jugaron un par de veces Unión y Patronato de manera amistosa. Y un sábado de febrero se dio la famosa imagen que dio vueltas por todos lados, cuando Ema Brítez decidió “regalarle” la pelota en las manos de Sebastián Bértoli. ¿Qué había pasado?: los jugadores de Patronato discutieron el penal y para no despertar polémicas, Ema pateó un “tirito” que fue despacito hasta un Bértoli que se había quedado parado en el medio del arco de López y Planes. Anoche, por los puntos y a cancha llena, volvieron los mismos actores y tampoco fue gol: el arquero de Patronato se lo atajó a Brítez. Foto: Luis Cetraro

Alberto “Nene” Sánchez

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Si había un resultado más lógico para Unión-Patronato, ése era el 0-0. Al 15 de Abril llegó el “Patrón” de Rubén Darío Forestello, un equipo que con el de anoche lleva siete partidos sin ganar, con cuatro igualdades y tres derrotas. Está bien que le empató a Boca y a Newell‘s, pero Independiente le metió 5 y Olimpo 4, ambos en el Grella.

Lo recibió este irregular Unión, que también llegó a cuatro partidos sin sumar de a tres (su último triunfo fue el 4-2 sobre Talleres), pero que además fue dirigido desde el banco por Eduardo Magnín, el técnico de la reserva que asumió interinamente en lugar de renunciante Juan Pablo Pumpido, pero sabiendo que en la platea estaba observando el partido el ya contratado nuevo entrenador, Pablo Marini.

Hacía mucho tiempo que no se daba un interinato tan claro. Porque casi siempre pasaba que asumía un DT de emergencia, pero si las cosas le salían medianamente bien se quedaba, como le pasó a “Juampi” Pumpido, y a muchos otros más, que por supuesto terminaron renunciando a su cargo de técnico del plantel profesional, y también del que ocupaba antes de asumirlo.

Pero ése es un tema para analizar en otro momento, y para charlarlo con protagonistas involucrados. Hoy la cuestión pasa por comentar lo pobre (por no decir malo) que fue el cotejo de anoche, sin alguna jugada colectiva para rescatar; y sin ningún jugador para destacar desde lo individual, nada de nada.

Si no hubiese sido por el penal que Abal cobró por falta a Soldano a los 11 minutos de juego, y que Bértoli, el arquero visitante, se lo contuvo a Brítez un minuto después, no habría mucho para señalar de los 95 minutos de un partido para olvidar, sobre todo para Unión.

¿Por qué solamente para Unión? Justamente porque sólo se trató de un cotejo que marcó el interinato de un técnico de inferiores, y que desde hoy ya está trabajando Pablo Marini, a quien la dirigencia fue a buscar a México para tratar de dar vuelta la historia, la que tendrá su primer capítulo el próximo sábado, pero que tendrá uno mucho más importante el domingo 14, cuando en el Centenario, Unión visite a Colón para tomarse revancha de los sucedido hace 42 días en la avenida, cuando comenzó la debacle unionista, que sólo tuvo un “recreo” en el 4-2 sobre Talleres.

Fue claramente visible que uno no pudo (Unión) y otro no quiso (Patronato). Palabras más, palabras menos, ya lo había dicho el propio Magnín en la previa de este choque: “Unión no tiene un jugador que haga la diferencia. Para ganar, Unión necesita estar diez puntos desde lo mental, desde lo anímico, para que colectivamente pueda mostrar superioridad”.

Por eso pasó lo que pasó anoche. Es cierto lo que dijo Magnín, individualmente Unión no tiene un jugador de jerarquía. Pero además la cabeza de todos y cada uno estaba en otra cosa, sabiendo que al otro día (hoy) empezaba otra era, algo que puede provocar un cimbronazo, aún sin conocer profundamente a quien se hizo cargo del plantel.

Por lo pronto, si hay que criticarle algo al Unión de anoche, es que no pudo ganarle a un equipo tan mediocre como el de Patronato; y si hay que rescatarle algo al Unión de anoche, es que por lo menos no perdió contra un equipo tan mediocre como el de Patronato.

De todas maneras, eso ya forma parte del pasado, hoy ya comenzó a escribirse el futuro de Unión. El que todo unionista desea, hasta aquellos que anoche, luego del 0-0, criticaron con insultos a los dirigentes.

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Ayer lo miró, hoy ya entrenó

Pablo Marini

El entrenador que llegó desde México para hacerse cargo de la conducción técnica de Unión en reemplazo de Juan Pablo Pumpido, se ubicó junto a sus colaboradores en uno de los palcos del estadio 15 de Abril para observar a los jugadores que eligió el interino Eduardo Magnín contra Patronato. Sin tiempo que perder, el ex DT de Morelia de México ya comenzó hoy mismo a la mañana -entrenó por primera vez- a pensar en su debut que será el sábado que viene, a las 19, contra Atlético en el Monumental de Rafaela, en la fecha previa al clásico revancha en la cancha de Colón. Foto: Luis Cetraro

síntesis

UNIÓN 0

PATRONATO 0

Unión: Nereo Fernández; Emanuel Brítez, Rodrigo Erramuspe, Agustín Sandona y Nahuel Zárate; Diego Villar, Manuel De Iriondo, Martín Rivero y Mauro Cejas; Lucas Gamba y Franco Soldano.

D.T.: Eduardo Magnín.

También estuvieron en el banco: Matías Castro, Santiago Magallán, Mauro Pittón, Nicolás Andereggen y Federico Anselmo.

Amonestados: Brítez, Zárate, Villar, De Iriondo y Rivero.

Patronato: Sebastián Bértoli; Lautaro Geminiani, Walter Andrade, Abel Masuero y Marcos Maydana; Damián Lemos, Alejandro Gagliardi, Gabriel Graciani, Nicolás Bertochi y Damián Arce; Matías Quiroga.

D.T.: Rubén Darío Forestello.

También estuvieron en el banco: Federico Costa, Iván Furios, Lautaro Comas y Mauricio Carrasco.

Amonestados: Geminiani, Andrade, Maydana y Quiroga.

Goles: no hubo.

Cambios: todos en el segundo tiempo, a los 17 min., Lucas Algozino por Cejas (U); a los 28 min., Guillermo Méndez por Rivero (U); a los 33 min., Gabriel Vargas por Graciani (P); a los 35 min., Tomás Spinelli por Gagliardi (P); a los 44 min., Lucas Márquez por Arce (P).

Incidencias: a los 12 min. del primer tiempo, Bértoli le atajó un penal a Brítez (U).

Árbitro: Diego Abal.

Cancha: Unión.

Bajo la lupa

Fernández (6): No tuvo trabajo durante 85 minutos, casi que podía irse a su casa sin bañarse, pero faltando cinco minutos, salvó a Unión de la derrota al enviar al córner el remate de Quiroga.

Brítez (5): No tuvo problemas para marcar, ya que Patronato no fue pretencioso en la búsqueda ofensiva. Tampoco aportó mucho en ataque. Lo amonestaron y quedó “colgado”, con 4 amarillas.

Erramuspe (4): Comenzó algo dubitativo con la pelota en las salidas, luego se acomodó, pero Quiroga le dio mucho más trabajo de lo que se podía imaginar.

Sandona (5): Volvió a ser titular e hizo la simple. No se complicó nunca y a diferencia de Erramuspe, por lo menos pudo controlar mejor a Quiroga, sobre todo de arriba.

Zárate (5): Podría utilizarse el mismo concepto que el de Brítez. A favor de él, una jugada en el primer tiempo que tirándose a los pies de Gagliardi, le “extirpó” la pelota cuando encaraba hacia el área.

Villar (4): Intentó ser el dueño del equipo durante los primeros 15 minutos del partido, pero se fue apagando. En el complemento jugó más cerrado, y no tuvo incidencia positiva.

De Iriondo (6): El sacrificio y las ganas de siempre, batallando en un sector de la cancha en el cual a veces se encuentra muy solo. Llegó a la quinta amarilla y “limpiará” contra Rafaela.

Rivero (4): Otro de los jugadores que no aportó casi nada. Lo poco que hizo se observó cuando arrancó el cotejo, pero después de esos 20-25 minutos iniciales, poco y nada.

Cejas (5): De los mediocampistas con más obligación en la faz ofensiva, el “Pitu” fue el que mostró algo más, pero muy poco más. Se fue reemplazado porque estaba “fundido”.

Gamba (6): Por voluntad, ganas, por buscar siempre, y hasta por sacrificio, el mendocino se destacó del resto del equipo. De todos modos, no tuvo muchas posibilidades de desnivelar por la derecha del ataque.

Soldano (4): Otro de los que no aportó nada, pero en su caso hay que decir que se hace muy complicado “ingeniarse” para poder tener aunque sea una oportunidad de cumplir la función de un delantero.

Algozino (5): Ingresó en el segundo período en lugar de Cejas. Le dio algo más de movilidad y profundidad por derecha, pero no alcanzó para cambiarle la cara al equipo.

Méndez (5): Jugó sólo 17 minutos, desde que reemplazó a Rivero. Se acomodó como mediocampista por izquierda y le sucedió lo mismo que a Algozino.