Política monetaria

Otro fuerte vencimiento de Lebacs

Tras abandonar formalmente la meta de 2017, el Banco Central afrontará mañana martes un vencimiento de Lebacs por 484 mil millones de pesos, con el objetivo de reducir la tasa de inflación a 1 % en el último trimestre y cimentar la pauta de 12 % establecida para 2018.

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El Banco Central de la República Argentina y las dudas sobre si se mantendrá la tasa de 26,25% en las Lebacs.

Foto: Archivo El Litoral

 

Roberto Pico

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DyN

Con una inflación núcleo con valores inconsistentes con los objetivos trazados, la autoridad monetaria está obligada a mantener altas tasas de interés para domar los precios, decisión que como contrapartida ralentiza el proceso de recuperación económica.

El martes 12 el BCRA mantuvo su tasa de política monetaria en 26,25%, cumpliendo seis meses en el mismo valor. En tanto, en la última licitación de Lebacs -títulos que se utilizan para retirar el exceso de pesos del mercado- del 15 de agosto el rendimiento fue de 26,50%, valor que se incrementó en las operaciones en el mercado secundario.

Mañana martes las licitaciones serán a: 28, 56, 91, 154, 210 y 274 días. Si bien el vencimiento es de 484 mil millones de pesos, el stock de estos títulos ya supera el billón de pesos y enciende la luz de alerta entre varios economistas.

Primero el Banco Central quitando de su informe de Política Monetaria el párrafo correspondiente al objetivo 2017 y luego el Ministerio de Hacienda fijando en el presupuesto 2018 una inflación promedio consistente con un 21 por ciento punta a punta, fueron los arietes oficiales obligados a blanquear que no se logrará el cometido.

Para esta semana, el Gobierno aguarda dos buenas noticias que compensen este bache. El miércoles el jefe del Palacio de Hacienda, Nicolás Dujovne, dará a conocer el resultado de las cuentas fiscales de agosto, y el jueves el INDEC difundirá el nivel de actividad económica correspondiente al segundo trimestre.

Según funcionarios del Palacio de Hacienda, Dujovne podrá dar cuenta de un gasto público consistente con la meta de 3,2 por ciento establecida para 2017. Incluso se animan a decir que se ‘está sobrecumpliendo‘ con las pautas y que el balance fiscal de fin de año ya está garantizado.

En tanto, al otro día el Indec informará el nivel de actividad del segundo trimestre, que se estima consolidará cifras sobre la mejora de la economía. Los datos ya conocidos anticipan este comportamiento, especialmente por los resultados en construcción, industria. Durante los meses de abril mayo y junio la construcción sumó avances superiores al 10 por ciento.

En tanto, la industria manufacturera cayó en abril 1,9 por ciento, para sumar 2,2 por ciento en mayo y 6,2 por ciento en junio. Así quebró una recesión que se extendía desde principios de 2016.

Según el EMAE publicado por INDEC, el consumo en comercio bajó 2,4 por ciento en abril, para luego mejorar 4,2 por ciento en mayo y 4,4 por ciento en junio. En tanto, la agricultura marcó subas de 5,1 por ciento, 3,8 por ciento y 4 por ciento, respectivamente.

Diferencia entre productor y mostrador: 4,3 veces

La diferencia entre el precio que pagó el consumidor en góndola por productos agroganaderos en agosto “se multiplicó 4,3 veces” respecto de lo que recibió el productor en el campo, indicó la Confederación Argentina de la Mediana Empresa.

Según el Índice de Precios en Origen y Destino (IPOD) de CAME sobre una canasta de 25 alimentos, la manzana roja fue el producto que mostró mayor disparidad en su valor, y alcanzó una brecha de 7,25 veces.

El informe precisó que el índice IPOD de CAME registró en agosto una reducción de 6,8 por ciento frente a julio, y destacó que “acumula una baja de 22,7 por ciento en cuatro meses”.

Asimismo, significa un descenso de 16,6 por ciento en relación a agosto de 2016 cuando la brecha se ubicaba en 5,15 veces.

“La caída en la diferencia promedio de agosto se debe principalmente al comportamiento de cuatro alimentos: la mandarina, con un descenso de 2,48 veces en la disparidad y la calabaza (-2,27 veces)ambos con fuerte aumento en los valores al agricultor, y la pera (-1,98 veces) y la manzana (-1,92 veces) con rebajas en los costos al cliente”, explicó.

Según detalló, el IPOD agrícola en agosto alcanzó un valor de 4,42 veces, lo que implica una caída de 6,1 por ciento frente a julio, y “acumula una caída de 25,7 por ciento en cuatro meses”.

Por su parte, el IPOD ganadero en agosto se ubicó en 3,79 veces, lo que representa una disminución de 9,6 por ciento en la comparación con julio último, aunque se ubica “5,6 por ciento por encima2 de igual mes de 2016.

De los 25 alimentos agropecuarios que integran la canasta del IPOD relevados en agosto, en 16 bajó la brecha, y en 9 se aumentó.

Los alimentos agrícolas con mayor distorsión de precios en agosto fueron: la manzana roja con una diferencia de 7,25 veces, seguido por la pera con una brecha de 7,09 veces, la naranja con una desigualdad de 6,55 veces, el limón (6,53 veces), y el arroz (6,50 veces).

Los menores contrastes en agosto, se registraron en: la calabaza con una disparidad de 1,68 veces, seguida por el huevo (2,24 veces), el pollo (2,26 veces) y el tomate (2,72 veces).

El informe también puntualizó que “la participación del productor en el precio que pagan los consumidores mejoró 5,8 por ciento alcanzado al 27,2 por ciento, la cifra más alta desde julio de 2016”.

Los alimentos con menos participación del agricultor en el importe fueron: la manzana con 13,8 por ciento, la pera con 14,1 por ciento, el limón y la naranja 15,3 por ciento, y el arroz con 15,4 por ciento.

El análisis destacó que “una verdura donde la brecha tuvo un salto importante en agosto fue la zanahoria, aumentando desde 3,12 veces en julio a 5,49 veces en agosto”.

Al respecto, explicó que “si bien los precios al público cayeron 11,6 por ciento, la retribución al productor bajó casi 50 por ciento, ya que al estar en plena cosecha, hay más oferta y cae el precio”.