Lifschitz dijo que Santa Fe mantendrá firme el reclamo de la deuda a Nación

“No queremos resignar la potestad tributaria”

El gobernador dijo compartir varios de los requerimientos del gobierno central pero marcó distancias con otros. Preocupado y molesto por las escuchas a Pullaro.

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LETRA FINA. Lifschitz dijo que recibieron el texto de la propuesta oficial. “Nos vamos a tomar unos días para analizarlo en profundidad porque cada uno de los puntos tienen múltiples implicancias sobre las economías de las provincias. Queremos ser muy prudentes antes de emitir una opinión”. Foto: Prensa Gobierno

 

Redacción de El Litoral

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El gobernador Miguel Lifschitz afirmó que “no queremos resignar la potestad tributaria que tenemos las provincias; una cosa es que podamos acordar criterios generales y otra cosa, que nos den una receta y nos digan cómo se tienen que bajar los impuestos años tras años y cuándo tiene que haber Sellos y cuándo Ingresos Brutos para unos y para otros. Esto es parte de la competencia de las provincias en un país federal”, aclaró.

El mandatario habló en conferencia de prensa en Rosario sobre la reunión de gobernadores con el presidente Mauricio Macri y también acerca de las escuchas al ministro de Seguridad, Maximiliano Pullaro.

“Recibimos la propuesta en relación a los fondos de coparticipación, a los impuestos y a metas fiscales, todos temas sobre los cuales veníamos conversando, pero que no conocíamos la letra fina, así que nos vamos a tomar unos días para analizarlo en profundidad porque cada uno de los puntos tienen múltiples implicancias sobre las economías de las provincias. Queremos ser muy prudentes antes de emitir una opinión”.

Aclaró que sigue firme el reclamo por el pago de la deuda tras el fallo de la Corte Suprema. “No es negociable y no puede entrar en ningún acuerdo” subrayó. No obstante, Santa Fe tiene otro reclamo ante la Corte y es que sea ciento por ciento coparticipable el impuesto al Cheque, juicio al que Nación pide se deje de lado.

Respecto de las propuestas, Lifschitz dijo que “en líneas generales compartimos varios objetivos planteados por el presidente: reducir el déficit fiscal nacional a 3,2 % del Producto Bruto, el esfuerzo compartido para reducir el déficit y para no gastar más de lo que recaudamos por vía tributaria, reducir impactos tributarios sobre sectores productivos, sobre todo los llamados impuestos en cadena o impuestos distorsivos. Deberían hacerse de manera gradual en la medida en que el gobierno nacional compense a las provincias con recursos adicionales y en la medida también que tengamos la certeza de que esa disminución vaya realmente a inversiones productivas y no termine en los bolsillos de los empresarios en los circuitos financieros como ha ocurrido en otros momentos de la Argentina”.

El gobernador aclaró que “no queremos resignar la potestad tributaria que tenemos las provincias; una cosa es que podamos acordar criterios generales y otra cosa, que nos den una receta y nos digan cómo se tienen que bajar los impuestos años tras años” y adelantó que “Santa Fe no está lejos de los objetivos planteados a nivel nacional porque es la única provincia de las grandes que no tiene gravado con Ingresos Brutos al sistema agropecuario y que tiene gravado a la industria con el 0,5% solamente al sector que factura más de 150 millones de pesos, así que todo el sector Pyme está exento”.

El próximo jueves volverán a reunirse los gobernador. “Nuestra preocupación no es que no podamos cumplir esas pautas sino que quedemos condicionados en el futuro, o perdamos recursos de coparticipación. Una cosa es una adhesión voluntaria y otra una compulsiva con penalidades por no cumplir con esos objetivos”, añadió

Sobre Pullaro

En otro ámbito, Lifschitz dijo estar “personalmente muy preocupado y muy molesto por cómo se han dado las cosas” acerca de las escuchas al ministro de Seguridad, Maximiliano Pullaro. “Valoramos muchísimo todo el proceso de reforma del sistema penal de la provincia de Santa Fe y ponemos el esfuerzo y el compromiso en dotar al Ministerio Público de la Acusación (MPA) de los recursos necesarios, pero eso no puede significar que haya incumplimientos de las normas y procedimientos pocos claros de algunos fiscales”, sostuvo.

“Vamos a pedir que se investigue a fondo la situación que se ha dado con los fiscales de la ciudad de Santa Fe, que de manera bastante irregular han solicitado la intervención a un ministro sin razones que lo fundamenten y sin que tuviera total conocimiento el juez, lo cual también refleja una situación poco clara, violando el derecho a la privacidad y a la intimidad de las personas que debemos garantizarles a todos los ciudadanos, al ministro, al gobernador y a cualquiera”. El gobernador no descartó “intencionalidad política detrás de esa operación, porque nos llama la atención que haya sido en fechas cercanas a las elecciones y lo más grave es la divulgación de cosas que no tenían nada que ver con la presunta investigación. Vamos a agotar todas las instancias para que esta situación se investigue hasta las últimas consecuencias y se determinen las responsabilidades que correspondan. Las herramientas que les da la ley a los fiscales deben ser usadas con prudencia en el marco de los procedimientos habituales y con absoluta objetividad cumpliendo todos los pasos establecidos”, concluyó.

Nueva terminal de pasajeros en Fisherton

El gobernador Lifschitz anunció el llamado a licitación de la obra de ejecución de la nueva terminal de pasajeros del aeropuerto internacional de Rosario, proyecto diseñado por el Ministerio de Obras Públicas de Santa Fe. En esta primera etapa contempla la creación de un nuevo sector de más de 11.550 metros cuadrados para la atención de vuelos internacionales, con una inversión de 946 millones de pesos y un plazo de ejecución de 18 meses.

“Nuestro objetivo es convertirnos en el aeropuerto de alternativa para Ezeiza y Aeroparque, ya que Rosario es el segundo centro emisor de vuelos al exterior después de la ciudad de Buenos Aires y estamos hablando de una zona de influencia donde residen más de 2 millones de habitantes, entre la provincia de Santa Fe, parte de Córdoba, el norte de Buenos Aires y gran parte de Entre Ríos; y estas obras apuntan a esa dirección”, sostuvo.

El gobernador además anunció que enviará a la Legislatura un proyecto de ley para convertir al aeropuerto en una sociedad anónima de capital público.

El edificio a construir está hacia el norte de la actual terminal donde se ubicarán los diferentes sectores resueltos en tres niveles (planta baja y dos pisos). El proceso de embarque y desembarque de las aeronaves se realizará mediante dos mangas. Las salas de arribo y partidas tendrán una capacidad para 440 pasajeros.