Una historia irrefutable

De participante, a protagonista

César Miño

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La génesis del CRAI que pasó de participante a protagonista, surge inequívocamente del proceso conducido por el Dr. Francisco María Miño, quien cumplió la función de head coach del plantel superior, durante las temporadas 2013 y 2014.

Por ende, consideramos imprescindible rememorar con el propio protagonista, una época tan trascendente en la historia reciente del club.

* “En 2013, básicamente nos dedicamos a reordenar los lineamientos del plantel superior, a partir de la modificación de cuestiones que considerábamos importantes: como el aggionarmiento del juego y de los sistemas de entrenamiento. En esos ítems, estoy convencido de que nos ayudó mucho la evolución de representantivos nacionales, como por ejemplo Pampas XV, porque observamos en su accionar un espejo que podía reproducirse en varios aspectos en nuestro ámbito”.

* “Ese plantel superior de 2013 tenía una buena base de jugadores y se enriqueció de manera notable con la incorporación de la Camada 93, que fue extraordinaria: desde rugby infantil, pasando por juveniles, donde no sólo se lució en nuestra zona (se consagró campeón en todas las divisiones), sino también en certámenes nacionales. Tampoco debemos olvidar que había concretado giras internacionales siendo juveniles, lo que obviamente es poco usual en nuestro medio.”

* “ En 2014 también se sumó la Camada 94, conformada por jugadores con aptitudes realmente destacables. A todo esto, la actitud de todo el plantel superior ya disfrutaba de una generosidad extraordinaria de parte de jóvenes decididos a entregar lo mejor de cada uno, en pos de su querido club. Solamente de ese modo fue posible generar -por ejemplo- la cantidad de entrenamientos semanales que aún están en vigencia en el club.”

* “El 2014 fue un gran año, de principio a fin, ya que cosechamos lo sembrado el año anterior. Cómo olvidar que en la primera jornada de la Final Four del Regional del Litoral perdimos 34 a 33 con Duendes, en un partido que pudo haber terminado con victoria de CRAI, de no mediar una polémica decisión del referee (el entrerriano Rabuffetti).”

* “El plantel superior llegó al cenit, pese a que eran muy chicos, porque se dieron cuenta de que se trataba de jugadores que no tenían techo, pese a su juventud (los más grandes, tenían 25 años...)”.

El otro gran paso

La magnífica continuidad se dio a través de la gestión del CPN Pedro Maglianesi, head coach de la temporada 2015, quien con marcada emoción habló sobre una experiencia a la que considera inolvidable, en su vastísima carrera como entrenador.

* “Ante todo, nos planteamos objetivos mensurables. Priorizamos ampliar la base del equipo principal y establecimos una alternancia que permitía que cada jugador descansara una fecha, luego de haber jugado seis partidos consecutivos. En un comienzo, eso generó inconvenientes, pero poco a poco lo fuimos subsanando y se institucionalizó del mejor modo...”

* “Sin dudas fue un año muy intenso, que me encantó y que disfruté muchísimo... Sobre todo, de la segunda mitad para adelante, cuando el crecimiento alcanzado nos permitió enfocarnos más en el juego y logramos mejorar en ese sentido”.

* “Se fueron implementando modalidades defensivas, que rindieron sus frutos, como así también variantes ofensivas que resultaron clave. El inicio del año había sido complicado, ya que en el Torneo del Interior habíamos tenido dificultades por tener un plantel demasiado corto; pero después, todo se hizo mucho más llevadero”.

* “Sin dudas fue una gran performance la cumplida en el TRL: no sólo por resultados, sino porque el juego fue evolucionando. Siempre recordamos que le ganamos a los cuatro grandes de Rosario entre la fase inicial y la zona Campeonato. El único que nos ganó fue Duendes, pero nada menos que en la final, a partir de haber acumulado méritos que justificaron ese resultado”.

* “Sigo convencido de que el mejor equipo del TRL 2015 fue CRAI... Por propuesta de juego; por la continuidad que habíamos alcanzado en nuestro accionar... La final reflejó gran parte de estas virtudes, pero también algunas falencias que teníamos, como lograr mayor efectividad en la búsqueda de los postes (Facundo Beltramino se había ido a jugar a Italia, recuerda...) De todos modos, el subcampeonato fue una posición que debe enorgullecernos”.

Después, el retroceso...

La continuidad en 2016 se dio a través de Luciano Bordón, quien se hizo cargo de un plantel superior de CRAI que sin lugar a dudas estaba en su cenit, merced a la tarea de sus predecesores.

Esa temporada comenzó con una destacada actuación en el Torneo Nacional de Clubes, donde al acceder a cuartos de final, se metió entre los ocho mejores equipos del país.

Luego, en el Regional del Litoral, se cumplió la lógica: CRAI transitó sin mayores dificultades las dos instancias iniciales, clasificándose para semifinales. Allí, inexplicablemente, cayó (en el descuento) ante Old Resian, equipo al que una semana antes (en el cierre de la zona Campeonato), le había ganado por 60 puntos.

Un golpe demasiado duro, cuya responsabilidad recae inexorablemente en la conducción, por una serie de factores tantas veces expuestos. De ese modo, el tercer puesto luego conseguido lució demasiado modesto, atendiendo a la jerarquía del plantel, reconocida unánimente por propios y extraños...

Finalmente, en 2017 primaron las decepciones para un grupo deportivo tan destacable. Primero, al no poder ingresar a los cuartos de final del TNC y luego, en un TRL que fue previsiblemente de más a menos...

Además, como si todo esto fuese poco, Bordón renunció en la mitad de la zona Campeonato (luego de tres derrotas consecutivas), en una actitud impropia de este deporte (tanto como otras que caracterizaron a su gestión).

Con muy buen criterio, la comisión directiva implementó los medios para que el entrenador pudiese completar la temporada, que tuvo un final previsible: CRAI culminó en una posición que dista de ser un reflejo del potencial de un plantel tan calificado.