En San Jorge
Autoconvocados contra el alcohol al volante cumplieron un año y replantean objetivos
“El balance tras cumplir el primer aniversario de existencia de Autoconvocados San Jorge es que somos gente común que consiguió cambios positivos y que debe seguir en ese camino que es el de peticionar y reclamar a las autoridades como derecho y obligación”, dice Marcela Pagliero, una de las fundadoras de este grupo.
“La temática se amplió y hay un abordaje más extenso de trabajo, más allá de que los siniestros viales por consumo de alcohol y otras sustancias son nuestra batalla principal”, sostienen.
Foto: Gentileza
Clarisa Ercolano
“Hace exactamente un verano, el dolor y la desesperación nos dieron cita de manera espontánea en la plaza central y allí quedó en claro que no íbamos a naturalizar que cada fin de semana, una sirena anunciara una vida menos en San Jorge o en algún pueblo vecino”, rememora Pagliero y recuerda que la falta de reglas y de orden se cobraban vidas cada fin de semana.
De repente, la imagen de un grupo de personas sostenidas por termos de café, con chalecos fluorescentes y más voluntad que cansancio, parando conductores a la salida de boliches y en las calles para impedir que manejen si estaban alcoholizados; se fue volviendo cotidiana y comenzó a reemplazar a las imágenes de los choques y de los destrozos.
Con frío, con lluvia; la acción le había ganado al miedo: “Fue difícil, estábamos repletos de dudas porque no queríamos que los jóvenes nos vieran como controladores y nosotros no somos abstemios o aburridos, sólo queremos decir que si se bebe no se maneja y que siempre hay alguien que espera por ellos”, cuenta Pagliero y subraya que la falta de conciencia no excluye a los adultos, padres y madres que muchas veces, miran hacia un costado.
Las estadísticas no mienten
En la provincia de Santa Fe se contabiliza un promedio de 60 muertes al volante por año y es la segunda en la estadística nacional. De esas muertes, el 40 por ciento ocurren los fines de semana y con el alcohol de por medio como ingrediente fatal.
“La temática se amplió y hay un abordaje más extenso de trabajo, más allá de que los siniestros viales por consumo de alcohol y otras sustancias son nuestra batalla principal”. En tan sólo un año de existencia, esta organización consiguió que se realice el control de alcoholemia en el ejido urbano y que se ponga el foco en la labor de concientizar.
“Mediante un petitorio conseguimos los controles dentro de la ciudad y luego presentamos un anteproyecto de ordenanza, que el Concejo deliberante debatió y aprobó por unanimidad para trabajar además en la concientización de toda la población‘” reseña Pagliero.
Hace un año atrás, más de 300 personas se movilizaron al centro de la ciudad alertados por las muertes al volante como consecuencia de manejar en estado de ebriedad. Así comenzó el grupo que hoy es guardián de la vida y la salud de muchos cada fin de semana.
Conductor designado
Pagliero reconoce los logros pero sabe que en este camino, siempre hay más por hacer. “El consumo de alcohol es muy alto y hay que trabajar en eso generando conciencia mas allá de que la persona no suba a un vehículo a manejar, no es algo que se puede negar”, reflexiona y agrega que si bien lograron la ordenanza de “Conductor designado” para que en los dos boliches de la ciudad sea regla la elección de una persona que no consumirá alcohol para luego conducir a su grupo de amigos al finalizar la noche, “aún no funciona como queremos, por eso hay que seguir trabajando”.
La conciencia es para este grupo la principal causa para lograr un cambio verdadero en la sociedad donde la premisa es que quien maneja alcoholizado “se arriesga y arriesga a otros por lo cual se trata de pensar en la vida propia y ajena”.
Una idea que se extiende
El estado provincial fue según cuenta Pagliero, el primero en colaborar con el grupo y de esa forma se realizan los operativos de la Agencia de Seguridad Vial de la provincia en la ruta 13 de San Jorge. “Fueron los primeros que dijeron sí y respondieron nuestras inquietudes, colaboramos de manera mutua y sostenida mediante un acuerdo con nuestra agrupación”, agradece Pagliero y destaca que “la ciudad de San Jorge nos ha legitimado y en la ciudad de El Trébol llevaron a la práctica nuestra modalidad de prevención y trabajo”.
Además, las fuerzas policiales acompañan a los voluntarios y los asisten según cuentan, “con gran compromiso”. Pese a la necesidad clara de la labor de estos vecinos, en San Jorge no es posible labrar actas o secuestrar vehículos porque el Ejecutivo no acordó con la provincia: “Es algo engorroso que dificulta el trato con el infractor que de por sí no es fácil”, admite Pagliero.
“Al principio hubo resistencias políticas y costó hacerles entender que no había una ambición partidaria, pero nosotros entendemos que hacemos un ida y vuelta con ellos y que debemos sentarnos porque son quienes hacen las leyes y se encargan de que se ejecuten, la remamos y hablamos con todos”, aclara Pagliero a este medio y dice que desde el estado nacional recibieron folletería y materiales para concientizar y que “este año tenemos en suspenso un proyecto de ley provincial de horarios unificados para los cierres de boliches, que nos dijo la senadora Cristina Berra que se iba a impulsar pero por ahora está en nada”.
Cada lunes, la reunión grupal hace lugar al debate y a las propuestas: “Ese día evaluamos y vemos siempre cómo reforzar la prevención; por ejemplo ahora sumando el aporte de médicos y profesionales y luego cada fin de semana los controles en rutas y calles y si queda gente, en la puerta de los boliches para hablar con los jóvenes”.
“Más allá de que la gente nos dona café y nos apoya a través de las redes sociales, necesitamos personas que se comprometan a venir a los controles el fin de semana porque hasta ahora, así existimos, con la constancia y la responsabilidad de cada persona que se acerca y que sigue ayudando a salvar vidas cada fin de semana”, pide Pagliero para finalizar.
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