Miles de personas marchan en EEUU

Trump considera armar a profesores

El presidente recibió en la Casa Blanca a varias víctimas de masacres y padres que perdieron a sus hijos en éstas. Los estudiantes harán el 24 de marzo una gran manifestación bajo el lema “Marcha por nuestras vidas”.

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El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, insinuó la posibilidad de aumentar la edad mínima para adquirir un arma legalmente.

Foto: Telam

 

Tatiana Rodríguez - DPA

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Al cumplirse una semana de la masacre en una escuela de Florida que causó 17 muertos, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, consideró que una posible solución a esta problemática sería armar a los profesores.

Después de que miles de estudiantes salieran a las calles a marchar en Tallahassee, capital de Florida, Washington y otras ciudades del país para pedir al Gobierno un control de armas más estricto, el mandatario escuchó por más de una hora en la Casa Blanca a varias víctimas de masacres y padres que perdieron a sus hijos en éstas.

Durante el encuentro, que se tornó emotivo en más de una ocasión, los sobrevivientes de la secundaria Marjory Stoneman Douglas de Parkland, en donde el pasado 14 de febrero un joven de 19 años abrió fuego, plantearon algunas salidas al inminente peligro que dicen correr en las aulas ante eventuales tiroteos.

Una de las propuestas fue la de Frederick Abt, padre de una de las sobrevivientes de Florida, quien dijo que una “posible solución no muy popular sería tener en las escuelas profesores o personal que voluntariamente tenga armas en las salas de clase y reciban entrenamiento para usarlas”.

La propuesta fue asentada por el mandatario estadounidense, quien desde el día de la tragedia ha matizado poco a poco su posición frente al uso de las armas en la nación norteamericana, en donde no hay más restricción que ser mayor de 18 años para comprar un arma.

“Si hubiera un maestro experto en armas de fuego, el ataque podría terminar muy rápidamente”, consideró Trump al indicar que esa posibilidad será analizada con rigor. “Mucha gente estará en contra y pienso que mucha gente estará a favor, pero lo bueno es que habrá mucha gente del lado de esa idea”, agregó en la charla televisada.

Entretanto, sobrevivientes de la matanza en la escuela de Parkland, ubicada a unos 58 kilómetros al norte de Miami, y otros jóvenes se reunieron en solidaridad al movimiento en las afueras del Capitolio de Florida.

Al interior del edificio y tras viajar más de 600 kilómetros en autobús, una decena de estudiantes de la secundaria que vivió el horror el Día de San Valentín fue escuchada por los congresistas presentes.

“Nos quitaron la tranquilidad de nuestra ciudad, de nuestra escuela. Quiero que recuerden que solo somos niños sin ningún propósito financiero ni político, simplemente estamos aquí para lograr un cambio y no pararemos hasta conseguirlo”, dijo ante la audiencia Alfonso Calderón, uno de los jóvenes que logró escapar de las balas en Parkland.

En las afueras del Capitolio y en los alrededores de la escuela secundaria otros miles marcharon con carteles y arengas pidiendo respeto por sus vidas y exigiendo un cambio. “Suficiente es suficiente” y “No más silencio” fueron solo algunas de las frases que más corearon los jóvenes.

Además, en Washington, estudiantes de todas las edades se movilizaron desde el Capitolio hasta la Casa Blanca.

El ataque de la semana pasada en Florida, que dejó tres adultos y 14 menores muertos, desató una ola de indignación y reabrió el debate sobre las armas, debido a que el atacante, Nikolas Cruz, tenía un rifle semiautomático que había comprado legalmente y con el que provocó la masacre en apenas unos minutos.

Este lunes, el mandatario ya había mostrado su favorecimiento a la implementación de mayores controles sobre los potenciales compradores de armas de fuego, y el martes pidió al Departamento de Justicia regular el uso de “bump-stocks”, los dispositivos que se instalan en armas semiautomáticas para que éstas funcionen de manera automática.

Ya durante el fin de semana los supervivientes de la masacre en Florida habían atacado al lobby de armas en Estados Unidos y exigido leyes más estrictas. “A todos los políticos que aceptan donaciones de (la Asociación Nacional del Rifle) NRA, les digo: ¡Qué vergüenza!”, aseguró la alumna Emma Gonzales en una protesta el sábado.

Algunos estadounidenses han decidido destruir sus armas y hacerlo público en Internet con el hashtag #oneless (una menos). A lo largo del fin de semana se difundieron en las redes sociales cada vez más fotos y videos en los que los usuarios se deshacían de sus armas. Uno de los primeros fue Scott Pappalardo, del estado de Nueva York, que publicó su video el sábado, según explicó la CNN. En las imágenes difundidas en Facebook, el hombre muestra su fusil AR-15, legalmente adquirido. Se trata del mismo tipo de arma que utilizó el presunto autor de la masacre de Florida.

Según una encuesta realizada tras la masacre y difundida ayer, el 66 por ciento de los electores estadounidenses está a favor de que haya leyes más rígidas sobre la tenencia de armas, frente a un 31 por ciento que se opone.

Poco antes de la Navidad, el 50 por ciento de los encuestados se había manifestado contrario a la introducción de leyes más severas, frente a solo un 47 por ciento que estaba a favor. En un período wde poco más de dos años, el apoyo a un endurecimiento de la ley de armas ha aumentado en 19 puntos porcentuales. Estados Unidos tiene una de las tasas más altas de muertes por armas de fuego entre los llamados países desarrollados, según la Organización Mundial de la Salud. Los estudiantes planean una gran manifestación para el 24 de marzo bajo el lema “Marcha por nuestras vidas”. Varias estrellas de Hollywood decidieron donar millones de dólares al movimiento juvenil para apoyar la iniciativa, entre ellos George Clooney y su esposa Amal, el director Steven Spielberg y su mujer Kate Capshaw y Oprah Winfrey.