Redescubrimiento de una especie extinta

El hallazgo del puercoespín que habitó en la provincia

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De fondo, un ejemplar taxidermizado de una especie actual de puercoespín. Sobre la mano, la pieza fósil de la especie extinta redescubierta por el paleontólogo local, que está en el Museo Ameghino.

Foto: Flavio Raina

 

L. A.

Vezzosi y otro científico brasileño estudiaron una especie extinta de puercoespín, del cual hay una pieza fósil (una mandíbula, ver foto) en el Museo de Ciencias Naturales Florentino Ameghino. En ese museo hay miles de joyas de la fauna, flora, piedras y minerales de la región, y sus especialistas trabajan día a día para cuidar cada pieza. Hoy, el edificio está en remodelación: sólo algunas salas están habilitadas para el público. Se estima que las mejoras se inaugurarán en los próximos meses.

El puercoespín es un roedor cuya principal característica es que está cubierto con púas, y que las usa como defensa. Los científicos desandaron el camino histórico de esta especie de puercoespín sudamericano ya extinta, emparentada con los coendoues actuales de las selvas regionales (Yunga y Paranaense). Y concluyeron que esa especie vivió hace 120 mil a 50 mil años aproximadamente, y que habitó en las provincias de Santa Fe y Entre Ríos.

El trabajo científico elaborado por Vezzosi y su colega de Brasil, Leonardo Kerber, fue publicado en una revista especializada (Journal of South American Earth Sciences, enero de 2018). La publicación es todo un reconocimiento para cualquier científico.

Cómo se investigó

“Con mi colega brasileño nos dividimos el trabajo. Yo indagué emparentamientos de especies de puercoespines en colecciones en la región, con material de referencia. Y él pudo conocer colecciones de Europa. Así complementamos el muestreo y sacamos, con una muestra muy completa, la comparación morfológica y anatómica de la especie”, explica.

Con todo ese volumen de material científico comparado y cotejado, lograron inferir que la pieza fósil (la mandíbula que está en el Ameghino, y que fue extraída hace muchos años del río Carcarañá) es muy similar a una encontrada en una cueva de Brasil (en el siglo XIX) y con otra pieza hallada en Bolivia. “Eso nos permitió un rango de distribución aproximado que abarcó nuestra provincia. El animal ya extinto buscaba ambientes más boscosos, con características climáticas pampeanas, de mayor temperatura y muy arbóreo. Dedujimos que habitó estas latitudes provinciales”.

Los ejemplares de puercoespines que hoy quedan están en Jujuy, Salta y Tucumán, y en la selva de Misiones. “Estas especies actuales están emparentadas con la especie de coendue ya extinta que investigamos”, agrega.

La mandíbula es un registro fósil muy antiguo que se redescubrió en las colecciones del museo. “Era un material ‘NN’ que se encontraba desde hacía mucho tiempo aquí y logramos redescubrirla hace 5 ó 6 años. Todo fue posible mediante un trabajo interdisciplinario, con el aporte de científicos de la región, sobre todo de colegas geólogos que nos dieron información complementaria muy valiosa”, dice Vezzosi.

El caso del puercoespín también es patrimonial, dice el paleontólogo. “Lo mismo pasa con el patrimonio que tenemos en la plaza, con las ammonites: si bien las lajas vinieron de otro lado para embellecer un espacio público, hoy forman parte del patrimonio local”, concluyó.

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Para Vezzosi, “en la ciudad y provincia existe un patrimonio cultural, histórico y científico tan valioso que es necesario preservar”.

Foto: Flavio Raina