Radios del norte y cordón oeste, los más afectados

Más de un 50 % de los santafesinos vive en zonas altamente vulnerables

El dato surge de un estudio presentado en el encuentro “Vínculos entre ecosistemas y sociedad”, que tuvo lugar en el salón de actos de la Fhuc. El objetivo de la charla consistió en promover líneas de acción sobre problemáticas específicas, desde el campo de la ciencia, la tecnología y la innovación.

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En conjunto. La actividad fue organizada por autoridades nacionales, provinciales y locales, cuestión que fue resaltada por el rector de la Universidad. Foto: Guillermo Di Salvatore

 

Mauro L. Muñoz

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La vulnerabilidad social en la ciudad de Santa Fe tiene informe y tiene números. Más de un 50 % de los santafesinos vive en zonas de vulnerabilidad alta o muy alta. La estadística se desprende de un informe presentado por el Departamento de Geografía de la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Universidad Nacional del Litoral.

El diagnóstico involucra la medición de vulnerabilidad y servicios en ámbitos urbanos y tiene como base metodológica a la ciudad de Santa Fe. La exposición estuvo a cargo de Mercedes Cardoso, docente de la casa de estudios, en el marco del encuentro “Vínculos entre ecosistemas y sociedad” en el ciclo de charlas Ciencia, Tecnología y Desarrollo Sustentable.

Este fue el quinto de una serie de paneles que recorre el país. Estuvo organizado por los Ministerios de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva; de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación; de Ciencia, Tecnología e Innovación de Santa Fe; y la Fhuc de la Universidad Nacional del Litoral.

El informe presentado tomó como fuente datos de indirectos del Indec. Para su análisis se eligieron las variables de servicio de salud, educación, equipamiento y servicios, habitabilidad, pobreza. A partir de allí, se generó un índice sintético de vulnerabilidad socioambiental para distintas zonas de la ciudad.

Los resultados presentados indican que micro y macro centro, ribera este de la ciudad y barrio El Pozo tienen vulnerabilidad baja. Mientras que el cordón oeste, radios del norte y gran parte de Alto Verde se enfrentan a una vulnerabilidad alta. De esta manera, más de la mitad del territorio de la ciudad está abarcada por este índice, que está “compuesto por una esfera natural y tangible, y otra esfera de lo simbólico y producido socialmente”, aclaró Cardoso.

A partir de lo cuantitativo, la docente explicó que el contexto urbano influye en la historia familiar, principalmente en la vida de niños y adultos mayores, que son los más expuestos. “Los sectores con vulnerabilidad alta frecuentemente se encuentran relacionados con la pobreza, por lo que corre gran riesgo de volverse crónica. Quienes más lo sufren son personas mayores y los jóvenes. Esto hace que los más chicos vean afectada su situación en problemas de aprendizaje”.

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Compromiso conjunto

El 25 de septiembre de 2015, los líderes mundiales adoptaron una serie de objetivos globales, agrupados en la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, en el marco de la Organización de las Naciones Unidas (ONU). En el documento Transformar Nuestro Mundo: la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, se establecieron 17 objetivos y 169 metas que guían el trabajo y los esfuerzos de los países adheridos.

Con intenciones de trabajar por esta agenda, se presentó el Programa Citides que está orientado a gestionar desde el campo de la ciencia, la tecnología y la innovación, líneas de acción que atiendan a problemáticas específicas del desarrollo sustentable en el territorio nacional, en colaboración con dependencias del Estado nacional y organismos del ámbito regional e internacional.

De acuerdo a lo acontecido, se vuelve imperioso destacar cuando es posible el diálogo fluido entre actores provenientes de distintos sectores, como lo fue en esta oportunidad. Sector público nacional, provincial, científico-tecnológico, del emprendedurismo y la sociedad civil, dieron pie a un rico intercambio de un área que, en la Argentina, aún espera instalarse en la agenda pública.

Esta apreciación fue reflejada en el discurso del rector Enrique Mamarella: “Celebro el encuentro de áreas que puedan afrontar la responsabilidad de tomar decisiones y hacernos cargo de estas problemáticas”, destacó en la bienvenida. Aunque el disgusto no tardó en llegar: “De todas maneras, veo pocas autoridades de facultades. Me gustaría que estén todas porque son políticas que abarcan a todas las disciplinas”.

Posteriormente, Prem Zalzman y Erica Carrizo, representantes de los ministerios nacionales, también apreciaron el espacio que permiten la resignificación de temáticas urgentes. “Generalmente no nos planteamos estas temáticas porque nos creemos por fuera de los ecosistemas. Pero para lograr cambios apostamos a estos diálogos junto a experiencias ya establecidas, que sirvan para nuestro desarrollo con el entorno”, dijo Zalzman.

“Consideramos importante pensar que, en torno a los conflictos socioambientales, tengamos en cuenta los aportes latinoamericanos, de los pueblos originarios y los movimientos sociales. Además valoramos el aporte local, como el de una universidad pública, para abordar, pensar y desarrollar este encuentro”, sopesó Carrizo.

Por su lado, la ministra de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva de Santa Fe, Erica Hynes, destacó el papel del Estado como regulador de los avances en favor de lo social: “Nuestra principal misión es la de ser articulador entre el sistema científico y el productivo generando mayor desarrollo para beneficio del conjunto de la sociedad civil. Trabajamos en pos de que el Estado participe no sólo como subsidiario sino con inversión; no para generar ganancias sino para obtener un retorno de las inversiones que se realicen”.

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Giraudo, Díaz y Locher repasaron acciones y desafíos frente a la problemática. Foto: Guillermo Di Salvatore

Aliento al desarrollo

“Estamos ante la primera crisis ambiental provocada por un ser viviente que tiene conciencia de sus acciones”, así definió la coyuntura actual Alejandro Giraudo, del departamento de Ciencias Naturales de Fhuc-UNL.

Su exposición -que centralizó las preguntas posteriores- allanó el camino andado a lo largo de la jornada. “Vivimos en una disociación artificial planteada desde la revolución industrial. Nos trasladamos a ciudades alejándonos de la naturaleza, crecemos creyendo que esto es normal”, aseveró.

En este punto, Giraudo acentuó el rol que debe asumir la educación y la ciencia ya que “cuestionar siempre ha sido su tarea”, e insistió en el trabajo que se lleva adelante con los humedales y las reservas ecológicas como el de la ciudad universitaria.

Prosiguiendo con las tareas locales, Valentina Locher, del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva de Santa Fe, argumentó sobre los lineamientos que viene llevando adelante la provincia, con el objetivo reducir el uso de combustibles fósiles y desechos que van al ambiente.

“En Santa Fe somos pioneros en el desarrollo de programas para el desarrollo de biomasa. Esto se debe a las amplias ventajas -ambientales, distributivas y de diversidad- con respecto a otras provincias. La estimación de biomasa disponible es de 8 millones, sin considerar a los residuos urbanos. Esto es elevado, pero necesitamos más centros de investigación como el Intec y empresas biotecnológicas. Por ello, consideramos fundamental un Estado presente y activo”, manifestó.

Además, presentó modelos que se están desarrollando en la provincia como el caso de los biodigestores y adelantó la producción de bioplástico, a partir de suero de leche.

A continuación, Martín Díaz, representante del laboratorio Lipomize SRL, participó como ejemplo de emprendedurismo científico-tecnológico regional. En su exposición disertó sobre la experiencia de esta novedosa empresa local involucrada en soluciones nanotecnológicas, que está presente en el Parque Tecnológico del Litoral Centro.

Díaz acentuó la importancia de las redes de apoyo en el proceso de establecerse en el mercado, destacando a la UNL a través de la Red de Emprendedores y el aporte de la Municipalidad santafesina en un viaje de negocios a Francia que sirvió para poder realizar la primera venta al exterior.