El viernes llegan a Buenos Aires los abogados del DT

Sampaoli se niega a dirigir el Sub 20 y su fin se precipita

El presidente de la AFA, Claudio Tapia, le dijo que tenía que viajar sí o sí al torneo de L’Alcudia. Pero el entrenador considera que es un torneo “menor a uno de chicos”.

UD4-21-06-2018_NIZHNI_NOVGOROD_RUSIA_EL_DIRECTOR.jpg

¿Para dónde va? Sampaoli empieza a mostrar un poco de dignidad ante los atropellos de la dirigencia que no lo quiere ya en el cargo. Su decisión de no dirigir al Sub 20 puede ser el punto final para el vínculo con la AFA.

Foto: Archivo

 

Redacción de El Litoral

[email protected]

Clarín

—Tenés que ir vos.

—Yo soy el técnico de Mayor, no de la Sub 20. Le están dando a este torneo la importancia de una Champions League y es menor a un campeonato de chicos. Lo puede dirigir Scaloni, que vive a una hora de L’Alcudia.

—El 25 de julio, a las 13, te tenés que presentar en Ezeiza para subirte al avión con los juveniles.

El diálogo fuerte, cargado de tensión, se produjo en la intimidad del predio de Ezeiza. Ahí mismo, Claudio Tapia y Jorge Sampaoli se sacaban chispas. El presidente de la AFA se encontró con la negativa del entrenador de viajar a L’Alcudia, donde se disputará el tradicional torneo juvenil. El Zurdo de Casilda, que había aceptado hacerse cargo del Sub 20, le sugirió a “Chiqui” que dirijan al equipo Lionel Scaloni, radicado a 35 kilómetros la ciudad valenciana, y Matías Manna, el analista de videos. Tapia no quiere saber nada. Se mostró como un patrón de estancia. Y la cuerda se tensó.

Sampaoli cree que es una mancha para su carrera dirigir un certamen que no es reconocido por la FIFA, que se juega en césped sintético y en el que se pueden hacer ¡11 cambios! Pero entregó la lista de juveniles y le pidió a Tapia que lo eximiera de viajar a L’Alcudia. Chiqui se puso duro. Y el hombrecito se retiró del predio de Ezeiza con la certeza de que está atravesando sus últimas horas en la Selección.

“Esto es como curar una infección con una curita”, le dijo un allegado al entrenador a Clarín. El viernes llegará al país Fernando Baredes, abogado del entrenador, y empezarán a delinear los números de la salida. El operativo desgaste está teniendo éxito. A Sampaoli le rodearon la manzana para que dejara su cargo. Aunque el santafesino siempre dijo que pretende “una revancha”, los dirigentes nunca estuvieron dispuestos a dársela. Tampoco, a hacerse cargo de la millonaria cifra que desembocaría un despido ahora mismo: 8.624.000 dólares.

Sampaoli había dicho que el dinero no sería un problema. AFA quiere pagarle hasta fin de año, liquidar sus haberes y empezar a darle forma al proyecto de refundación. La negativa del técnico de viajar a España le daría argumento a Tapia para echarlo por “incumplimiento del contrato”. Una fuente de la calle Viamonte le dijo a Clarín: “Sampaoli es empleado de la AFA y si el presidente le dice que tiene que viajar a Valencia, va a tener que sentar el orto (sic) en el avión y volar a España”.

Bajo esta coyuntura, está con un pie afuera. ¿O cambiará de parecer y aceptará cruzar el Atlántico y continuar con esta guerra que dejó de ser fría para entrar en su etapa más caliente? “Es muy inestable. Un día dice una cosa y otro día, otra. Es impredecible”, aseguran en la AFA. Habrá que ver si Sampaoli, como canta “Pato” Fontanet, su amigo y líder de Callejeros, dice “no escucho y sigo” o toma un nuevo rumbo, a esta altura, lo mejor que le puede pasar al propio técnico y a la Selección.

Almeyda se postula

Mientras se define la continuidad o la salida de Jorge Sampaoli de la Selección Argentina, Matías Almeyda se mostró muy interesado en ser el entrenador y es uno de los nombres que está en carpeta para hacerse cargo.

“Soy un técnico libre y escucho propuestas. ¿A quién no le gustaría? Pero quiero ser respetuoso porque tanto Argentina como México tienen entrenadores en el cargo”, afirmó el ex DT de River y Banfield, en diálogo con la señal Fox Sports.

La respuesta de Almeyda también se refiere al interés de México para sumarlo en lugar de Juan Carlos Osorio luego de su gran paso por el fútbol azteca, donde ganó dos copas y una liga local, además de la Concachampions con Chivas.

Sobre lo ocurrido con la selección en el Mundial, analizó: “Es un fiel reflejo de los últimos años. Estábamos esperando ser campeones para tapar el sol con una moneda. La historia nuestra no marca un estilo”.