DyN-Télam
A partir de 2015, en la provincia de Buenos Aires, no habrá aplazos en las escuelas del nivel primario.
La medida, que ya despertó la polémica pública y se viralizó en las redes sociales, implica que la evaluación se “flexibiliza” y cambia el enfoque en la medición de resultados escolares. Los alumnos podrán “adeudar” hasta dos materias (de un total de seis) pero avanzarán al año siguiente. Tendrán tiempo hasta diciembre de ese segundo ciclo para recuperar los contenidos, y si no logran los objetivos pedagógicos sí repetirán.
Los cambios se establecieron mediante una resolución de la Dirección General de Cultura y Educación bonaerense, en lo que se denominó el nuevo “régimen académico del nivel primario”. La medida modifica radicalmente el sistema de calificación, evaluación y promoción.
En esa provincia, el nivel primario es de 6 años, y la secundaria también es de 6 años, a diferencia de otros distritos como Santa Fe que tiene siete años para la primaria y cinco para la secundaria.
El boletín de calificaciones ahora se llamará “libreta de trayectoria”. Cambiará el sistema de notas: para los que cursan 1°, 2° y 3° grado, las calificaciones serán “muy bueno”, “bueno” y “regular” (esta última estará “sujeta a desaprobación”, explica la resolución). El 1° y 2° año de la primaria serán una “unidad pedagógica” de dos años cronológicamente consecutivos.
En tanto, para los chicos que cursan de 4° a 6° grado, las notas más bajas serán de 4 a 6 (“sujetas a desaprobación”), y las más altas de 7 a 10 (“aprobación”).
El proceso de evaluación de la performance escolar constará de tres informes periódicos, y un cuarto informe que será el final. Las calificaciones resultantes serán comunicadas en la Libreta de Trayectoria Escolar.
Más tiempo
La directora general de Cultura y Educación bonaerense, Nora de Lucía, defendió hoy la reforma en el área para 2015 y aseguró que la posibilidad de que los alumnos pasen de grado con materias sin aprobar tiene como finalidad “no excluir a los chicos del sistema”.
De Lucía explicó que, si un alumno aprueba la mayoría de las asignaturas pero falla en una, “pasa (al grado siguiente) y tiene, desde el primer día de clases, un maestro especial” que lo ayudará a recuperar la materia pendiente. “Priorizamos el saber, no la nota”, dijo la funcionaria sciolista a Radio Mitre, y aseveró que “los aplazos existen, el chico va a tener la nota real en su libreta de trayectoria”. También destacó que la reforma educativa “salió aprobada por el Consejo de Educación por unanimidad, inclusive los consejeros del Frente Renovador” que conduce el diputado opositor Sergio Massa.
“El concepto que hay que entender es el de los tiempos acompañados, de las promociones acompañadas y de los tiempos de aprendizaje. Un chico que tenía un 1, un 1 y un 1 (en los trimestres), en una semana de compensación en diciembre terminaba aprobando sin respetar si había aprendido o no, para que pudiera promover”, prosiguió.
De Lucía insistió con que “simplemente, lo que tenemos es que darle más tiempo al alumno. El chico (que no aprueba una materia) no puede aprender todos los contenidos del año en una semana”.