Tierra de pescadores. Como el río está al alcance de cualquier caña de pescar, ésta es una postal típica del barrio protagonizada en su mayoría por personas mayores.
Es la jurisdicción costera más alejada del centro de la ciudad. Según estima la vecinal, allí viven unas 400 familias cuyo principal reclamo es el acceso al agua potable.
Tierra de pescadores. Como el río está al alcance de cualquier caña de pescar, ésta es una postal típica del barrio protagonizada en su mayoría por personas mayores.
Colastiné Sur se sitúa en un desvío que nace en la Ruta 168 y que, a comienzo del siglo pasado, fue el atracadero de la balsa que navegaba hacia la vecina ciudad de Paraná. Pero la historia de este lugar se remonta a muchísimos años antes, a 352 concretamente.
Carlos Vallejos es vecino de esta jurisdicción desde hace 20 años, cuando dejó barrio Candioti de la ciudad de Santa Fe en la búsqueda de una zona tranquila y rodeada de naturaleza. Hoy está jubilado y lleva un estilo de vida envidiable: hace artesanías y, pese a que lo que más le gusta armar son relojes, jamás está pendiente de las agujas que marcan el tiempo. Durante sus años laborables, fue profesor de matemáticas de la UNL y leyó mucho sobre la historia de Santa Fe. Sus conocimientos acerca del barrio que habita lo dejaron en evidencia.
“Este lugar tiene 352 años. Cuando Santa Fe se traslada de Cayastá a donde está ahora, el rey de España declara a este lugar como el puerto de Santa Fe. Lo llama Puerto Obligado, porque los barcos que iban al Paraguay estaban obligados a parar acá y pagar un impuesto”, cuenta este hombre. Y agrega: “Cuando le sacaron el carácter de Puerto Obligado decayó la provincia. Eso tuvo que ver con la creación del Puerto de Buenos Aires. Por acá pasaban barcos de Europa”.
Pero la zona se pobló mucho más con la extensión de un ramal que hizo el Ferrocarril Francés después de que el paraje tuviera más de cien años.
Según el archivo de El Litoral, en los orígenes de Colastiné Sur, la Municipalidad ofreció lotes allí en comodato por un año con la principal condición de que, llegado el caso, sean confiscados; pero después de 1944 ese régimen quedó sin efecto. Quienes habitaban por entonces la zona no frenaron la construcción de sus viviendas y su crecimiento fue en aumento.
Hoy, en Colastiné Sur residen unas 400 familias —2 mil personas— según estimaciones de la vecinal. Una sola calle principal abre camino en el barrio. De allí, para un lado y para el otro, se bifurcan otras tantas con piso de arena y sauces que mecen sus copas al compás del viento.
POSTALES
Patrimonio Histórico Cultural. Un proyecto del justicialista Mario Lacava, que tuvo media sanción en Diputados, pretende que se declare a Colastiné Sur como Patrimonio Histórico Cultural por ser la sede donde estuvo emplazado el primer puerto santafesino, llamado por entonces Puerto Obligado.
Para relajarse. Ésta es una de las vistas que ofrece el club Caza y Pesca. La postal de un río manso invita a relajarse y dejar de lado las preocupaciones. Sin embargo, en época de crecida la situación es otra. En los vecinos de este sector que está del otro lado de la ruta, hay mucha preocupación, porque no está protegido contra inundaciones.
Barrio tranquilo. Todos los vecinos que conversaron con El Litoral coincidieron en que la zona es muy tranquila en comparación con los barrios céntricos de la ciudad. En Colastiné Sur, la inseguridad no encabeza la lista de reclamos. Los principales pedidos de la gente son: el acceso a la red de agua potable y el mantenimiento de la defensa.
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