“Colón cambia para que nada canse”, sería el axioma de Diego Osella como capitán del barco. Es que hoy terminará en alta mar —en realidad Alta Córdoba— la seguidilla de tres partidos en una semana para el navegante Colón y los marineros no serán los mismos que en el último puerto correntino del miércoles a la noche cuando se trajo un puntazo frente a Boca Unidos. Hoy, a las 21, se escribirá en el césped inundado de “La Gloria” el tercer capítulo del maratón Santa Fe-Córdoba.
Si bien no hubo declaratoria (Colón partió hacia “La Docta” sin confirmación de Osella), la idea es la misma aunque cambien las caras.
La clave, desde el vamos, será el abanico en la zona de medios. Allí, los extremos serán Villarruel por derecha y Pavón por izquierda. ¿Cómo se armarán los otros tres todocampistas?: con Poblete de volante tapón y dos laderos. A la derecha, Garnier; a la izquierda Cristian Llama.
No habrá mayores novedades atrás (la figura Broun; Castillo y Bíttolo por las líneas; la doble “L” adentro: Landa/Lazzaroni) y volverá el “Pipa” Alario a transformarse en la única referencia de punta para atacar.
Colón cerró la primera rueda con los puntos que proyectaba el comando técnico (la base era 15 y sumó 16). Esta noche se termina la semana más complicada del torneo, no sólo porque el equipo afrontó tres partidos en siete días, sino porque entre el final de la primera rueda y el arranque de la segunda se “pegaron” dos partidos seguidos en condición de visitante. Primero, Corrientes; después, Corrientes. Entonces, el desafío es seguir sumando. Porque Colón hoy comparte el tercer lugar con los jujeños y 16 unidades. El quinto y último clasificado es el “Bicho Colorado” de Riquelme con 14 unidades. Más abajo, a tres de Colón, Aldosivi y Nueva Chicago que casualmente se cruzan mañana en Mataderos (los hinchas sabaleros cruzarán los dedos para que empaten entre sí).
Hasta ahora, el plan rotador de Osella viene bien: le ganó a Douglas Haig en Santa Fe y empató con Boca Unidos en Corrientes. Por eso hay que cerrar esta noche la seguidilla en Alta Córdoba con el mismo ruidito: “¡Clink Caja!”. Y que la moneda —sea una o sean tres— caiga adentro de la alcancía sabalera.
Luego del partido de esta noche en la capital mediterránea llegará una semana “normal” de descanso para el plantel de Osella hasta que el sábado que viene a la tardecita, en principio, reciba a los jujeños del conocido Marito Sciacqua.