Mariela Goy
[email protected]
El gobierno nacional promulgó ayer la ley que establece la obligatoriedad de la sala de 4 años en todo el país a partir del 2015. Hasta ahora se establecía como obligatoria solo la sala de cinco años del nivel inicial, pero a partir de esta medida se extenderá a 14 años el cumplimiento de la escolaridad.
En la provincia de Santa Fe, la cobertura de la sala de cuatro años tanto en el sistema público como privado alcanza al 82 %, que en números concretos implican 42.000 niños. Faltarían sumar unos 7.500 chicos de 4 años para incluir al ciento por ciento en el sistema formal, según los datos oficiales.
La directora provincial de Educación Inicial, Silvia Pezzoni, pidió a los padres que “no se desesperen” en la segunda inscripción escolar de febrero, porque aún cuando no consigan banco en la sala de 4 años, todos los niños podrán ser anotados tanto en la sala de cinco como en el primer grado. “Más aún, la Ley de Educación Nacional establece que aunque no se curse el nivel inicial, los chicos pueden ingresar igual a la escuela primaria”, explicó.
Pezzoni dijo que si bien la cobertura es del 82 %, en los hechos hay más chicos que concurren a los maternos privados, de universidades o mutuales, y que no están contabilizados en el sistema formal.
“Cualquier duda de las familias, se deben comunicar con la Regional o con la Dirección Provincial de Educación Inicial. Vamos a buscarle un lugar para cada niño. Lo ideal es manejarse con el radio escolar para respetar el contexto del chico, su barrio y sus amigos, pero los padres no deben desesperarse si no encuentran banco en la escuela cercana porque les vamos a buscar espacio”, tranquilizó la funcionaria.
Valoró también el rol de las familias en la educación de sus hijos. “Hay padres que no quieren enviar a sus hijos de 4 años a la escuela. A ellos, les garantizamos la certificación cuando hagan la sala de 5. No es que el niño llega al jardín de infantes sin haber aprendido nada, porque la familia juega un papel muy importante en la primera infancia. Desde el ministerio, sostenemos eso fuertemente, y consideramos que la educación inicial viene a complementar algunos aspectos que los padres, por múltiples razones, no pueden ofrecerle”, opinó.
Más cargos e infraestructura
Pezzoni señaló que sumar el 18 % de cobertura faltante será un trabajo paulatino de 3 ó 4 años en la provincia de Santa Fe, y advirtió que la ley no implica llegar al ciento por ciento de niños incluidos “de un día para el otro, sino que es una forma de traccionar para ir universalizando esa sala”.
“Apenas alcanzamos a garantizar el total de la sala de cinco, donde tenemos más de 50.000 chicos, empezamos a trabajar con las de 4 años. Hay provincias más avanzadas, como Córdoba y Buenos Aires, que tienen una cobertura total, pero hay otras más atrasadas que nosotros. Estamos conformes con lo logrado en Santa Fe”, aseguró.
Este año se crearán 60 cargos para abrir nuevas salas de cuatro en aquellos jardines de infantes que cuenten con el espacio físico suficiente. Además, durante el 2015 se avanzará en la construcción de más aulas y ya se solicitó al gobierno nacional los fondos necesarios para crear 10 nuevas instituciones de nivel inicial en la provincia.
“La demanda más importante está en las ciudades grandes como Rosario, Santa Fe, Rafaela y Reconquista que es adonde a veces se instalan grupos de familias que llegan de otras partes”, dijo Pezzoni.
Rendimiento
Según estimaciones nacionales, la nueva norma exigirá que se incorporen al sistema educativo alrededor de 100 mil niños en todo el país. El ministro de Educación de la Nación, Alberto Sileoni, aseguró que la obligatoriedad de la enseñanza inicial para niños de 4 años mejorará “los rendimientos” de los estudiantes “en la primaria y en la secundaria”.
Sileoni recordó que “hace unos años hablábamos de preescolar, de algo que ocurría antes de la escuela, y hoy en día el nivel inicial es una etapa en sí mismo, con complejidades, logros y objetivos propios, con personal capacitado para desempeñarse idóneamente y recursos que promuevan el desarrollo pleno de los niños y la conquista de aquellos logros y objetivos”.
El ministro aclaró: “No es que queremos que salgan leyendo del nivel inicial, pero sí, con competencias lectoras, con algunos rudimentos de matemáticas, sabiendo arte, expresarse y afirmándose en su subjetividad, advirtiendo que hay otros que tienen derechos como él. Son cuestiones que quizá pasan desapercibidas pero tienen una importancia fenomenal porque van a mejorar los rendimientos en la primaria y en la secundaria”, agregó.
Asimismo, destacó que la entrada en vigencia de la norma implica “un esfuerzo específico del Estado orientado hacia los sectores sociales más desfavorecidos, hacia esas mamás que llevan adelante sus hogares solas y necesitan la tranquilidad de que sus chicos están en el mejor lugar en el que pueden estar: la escuela”