"¡Por el amor de Dios, abre la maldita puerta!", gritó el capitán del avión de Germanwings

El Litoral
EFE

"¡Por el amor de Dios, abre la puerta!", gritó el capitán, y nuevamente algo más tarde "¡Abre la maldita puerta!", lo que permite concluir que el copiloto cerró por dentro la cabina el piloto fue al baño.

Asimismo se oye un fuerte golpe, como si alguien intentara derribar de una patada la puerta de la cabina, y algo más tarde "ruidos metálicos fuertes" contra esa misma puerta y que a unos 4.000 metros de altura, se oye la respiración del copiloto, que no dice nada.

A las 10:40 hora local, dice el diario, el aparato tocó con el ala derecha la montaña y de nuevo se oyen los gritos de los pasajeros, los últimos sonidos que registra la caja negra.

La grabación registró también la conversación previa entre piloto y copiloto, en el que Sondenheimer le explicaba que no había tenido tiempo de ir al baño, a lo que Lubitz le ofreció asumir el mando del aparato en cualquier momento.

La información fue publicada por el diario alemán "Bild" y reconstruye los últimos minutos arriba del avión de Germanwins antes de estrellarse contra los Alpes franceses.

Según el diario, el copiloto estaba siendo tratado por un posible desprendimiento de retina, del que se desconoce, agrega el diario, si tiene origen orgánico o psicosomático.

En todo caso, con este problema probablemente no pasaría el próximo control médico de junio y su empleador le habría prohibido volar en la cabina, afirma el diario.

La Fiscalía de Düsseldorf informó el viernes del hallazgo durante el registro de la vivienda de Lubitz y de la de sus padres de "bajas médicas, actuales e incluso vigente para el día de los hechos, hechas pedazos", lo cual permite concluir que el copiloto ocultó la enfermedad a Germanwings.

El "Bild" agrega que los agentes encontraron además en su vivienda de Düsseldorf recetas de psicofármacos para tratar trastornos bipolares, así como gran cantidad de somníferos.

La misma publicación informa, además, que la pareja del copiloto, profesora de inglés y matemáticas, estaba supuestamente embarazada y que así se lo comunicó hace unas semanas a sus alumnos.

Según el semanario "Der Spiegel", la pareja, que al parecer se conoció cuando Lubitz tenía 18 años y poco después comenzó a salir, tenía previsto incluso casarse.

Esta mañana se retomaron las tareas de recuperación de los restos de las víctimas y la búsqueda de la segunda caja negra, al tiempo que se está abriendo un camino que permita llegar a la zona a vehículos todoterreno.

El acceso para los vehículos parte de la pequeña localidad de Seyne-les-Alpes y podría estar terminado esta tarde. Hasta ahora los equipos de rescate y se desescombro son transportados a lo largo de todo el día en helicóptero hasta el lugar, de muy difícil acceso. El objetivo es poder llevar equipo pesado de desescombro.

Los médicos forenses ya están trabajando en la identificación de los restos hallados hasta el momento. Según se informó, hasta ahora se han recuperado en el lugar del siniestro ADN de aproximadamente la mitad de las víctimas. Se han identificado "huellas de 78 diferentes perfiles genéticos", informó el fiscal Brice Robin.

El fiscal confirmó a dpa que la recuperación de las víctimas tiene absoluta prioridad.

A su vez, la búsqueda de la segunda caja negra es importante para poder confirmar o no la teoría de que el copiloto estrelló de forma voluntaria la aeronave, en la que murieron 150 personas.