Juliano Salierno
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Cuatro personas permanecen detenidas a disposición del Juzgado Federal de Reconquista, acusadas por el transporte de 250 kilos de marihuana que fueron incautadas la mañana del Jueves Santo en una estación de servicios de Villa Ocampo, en el norte provincial. Entre ellos, todos oriundos de las ciudades de Santa Fe y Santo Tomé, se encuentra un personaje típico de las crónicas policiales, que con el correr de los años ha sabido ganarse un lugar en las páginas de El Litoral.
Se trata de Armando Manuel Rojas, “Nando”, que con sus 75 años volvió a ser noticia, esta vez vinculado al tráfico de estupefacientes. Muchas veces detenido y liberado, Rojas acaba de pedir la detención domiciliaria, a través de un planteo realizado por su abogado defensor, el Dr. Raúl Berizo.
“A él no lo sorprenden con ninguna mercadería ni nada, iba en otro auto y estaba durmiendo por toda la medicación que toma” cuando fueron interceptados por la policía, explicó el abogado, que justificó el viaje de su cliente diciendo que “Rojas había ido a visitar la Virgen de Itatí” en Corrientes y que no conoce a quienes “le habían ofrecido llevarlo”.
Domiciliaria
Por edad avanzada y un estado de salud precario, el Dr. Berizo solicitó la medida alternativa a la detención que viene sufriendo desde hace 22 días en la Alcaidía de Vera. Como respuesta, el juez Federal N° 5, Aldo Mario Alurralde, ordenó para Rojas un exhaustivo estudio médico que se realizará el próximo 6 de mayo en la ciudad de Santa Fe y estará a cargo de la Junta Médica Forense del Tribunal Oral Federal. Mientras tanto, el imputado cuenta con atención diaria en el Samco de Vera.
Rojas viajaba en un auto Citröen C-4 junto con otros dos sujetos de 36 y 25 años, cuando fueron interceptados por el Comando Radioléctrico de Reconquista, en la bajada sur del puente sobre el arroyo El Rey y el bulevar Independencia, en el acceso a dicha ciudad.
Según consta en la investigación, el trío había escapado momentos antes desde la playa de estacionamiento de una estación de servicios de las afueras de Villa Ocampo, donde la policía descubrió el cargamento de droga en otro auto.
Los 250 kilos de marihuana eran transportados en un Peugeot 504 blanco, cuyo conductor, un santotomesino de 30 años, trató en vano de escapar por zona de monte, ya que fue rápidamente localizado y detenido.
Auxilio mecánico
Si bien ninguno de los imputados declaró en relación al cargamento, se cree que el C-4 iba adelante barriendo el camino para detectar retenes policiales cuando se encontró con un control de Gendarmería Nacional a la altura de Tacuarendí, en el departamento General Obligado.
Entonces inventaron un desperfecto mecánico, llamaron un auxilio de la ciudad de Villa Ocampo y le pidieron al chofer que lo llevara hasta Santa Fe. Por la distancia y el costo del remolque, el trabajador sugirió que sería más económico arreglar el coche en un taller de Villa Ocampo, pero los contratantes hicieron caso omiso.
La rotunda negativa no hizo más que despertar las sospechas del trabajador, que al llegar a su ciudad paró en la estación de servicios de la ruta con la excusa de tener que cargar nafta. Una vez en el lugar y a sabiendas de que eran vigilados por los del C-4, el chofer del remolque se las ingenió para avisar a la policía que no tardó en poner las manos encima del coche que estaba en la plancha.
Breve fuga
Si bien su conductor, Pablo Daniel Bordoy, de 30 años, logró fugarse, efectivos de Los Pumas lo atraparon a campo traviesa. En el vehículo se secuestraron 250 kilos de marihuana que estaban destinados a Santa Fe y el sur provincial.
Ni lerdos ni perezosos, los del auto de apoyo escaparon hacia el sur, pero fueron interceptados 80 km más adelante, en la entrada a Reconquista gracias a un operativo cerrojo montado en toda la zona norte. Entre los detenidos se encuentran Sergio Daniel Pelleritti Mallea, 36 años, Cristian Mauro Lescano, de 25 y el ya nombrado Armando Manuel Rojas.
De los cuatro imputados el único en prestar declaración fue “Nando”, quien hilvanó una historia desopilante en la que lejos de estar relacionado a un caso de narcotráfico, se presentó como un fiel devoto de la Virgen de Itatí, a la que había prometido ir a visitar, sea cual sea el medio. Así fue que por buenaventura se encontró con uno de los muchachos ahora detenidos, quien se ofreció a llevarlo a Corrientes a cambio de que pagara los gastos.
Actualmente el Juzgado Federal se encuentra recopilando elementos de prueba para determinar la responsabilidad de cada uno de los imputados. Para ello se tomaron testimoniales la semana pasada y se requirieron filmaciones de cámaras de seguridad para establecer los sitios por los que pasaron, además de periciales de Gendarmería Nacional, entre otras.
Algunas anécdotas
Entre las andanzas que se recuerdan de “Nando” Rojas y que fueron reflejadas por las páginas del diario, se cuenta el robo al Banco Sudameris, ocurrido el 30 de marzo de 2001, en el microcentro de la capital provincial. En aquella oportunidad, el acusado tenía 15 años menos y una vasta historia delictual.
La crónica de entonces le concedió a Rojas el rol de partícipe principal de robo calificado, por la colaboración prestada para cometer el atraco que tuvo lugar en la sucursal bancaria de calle 25 de Mayo al 2500 en el que cuatro hombres armados se llevaron algo más de 19 mil pesos.
A mediados de la década pasada, Nando fue nuevamente procesado por la Justicia provincial. En esa oportunidad por el delito de estafa y falsificación de documento privado. El juez que lo investigó fue Manuel García Porta y le endilgó responsabilidad, junto con un abogado que actualmente ejerce en el norte provincial la responsabilidad en la confección de pagarés falsos.
Y como de manera cíclica se las ingenió para llamar la atención, tres años atrás volvió a quedar detenido en Humboldt, departamento Las Colonias, acusado junto a otros cómplices por el robo a una casa de Nuevo Torino.
En julio de 2013, la casa de Rojas fue una vez más allanada por la policía, que seguía los rastros de una banda de asaltantes que actuaba en Recreo. En aquella oportunidad se secuestraron billetes falsos, tanto dólares como de moneda nacional.
En su ausencia
La policía local allanó a principios de mes una casa del barrio María Selva, donde tiene domicilio “Nando” Rojas. Según se presume, en su ausencia desconocidos ingresaron a la casa con fines de robo y en la huida uno de ellos se lastimó con las chuzas del tapial, dejando un reguero de sangre que llamó la atención de los vecinos.
Al llegar la policía, que ingresó a la vivienda, se encontró con un mueble roto y numerosos sellos apócrifos de organismos oficiales, como así también de profesionales y fuerzas de seguridad.