Danilo Chiapello
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Es favorable la evolución del cuadro clínico de Leyla Molinas (11), la niña que fue atacada con una trincheta a la salida de la Copa de Leche, en Villa Oculta.
“La herida ya fue suturada y el pronóstico es bastante bueno”, consignó hoy la doctora Mariela Alassia, directora del Hospital de Niños donde la menor se encuentra internada.
Más adelante la profesional explicó que “la niña ya está en condiciones de alta médica clínica. Ahora estamos tratando de articular su atención con la parte de Salud Mental, para brindarle contención, que es lo que corresponde para este tipo de casos”.
“Una vez que se coordinen esos trabajos se le va a dar el alta domiciliaria”, precisó Alassia.
Como se sabe, Leyla ingresó a dicho nosocomio la tarde del miércoles cuando un grupo de chicas la atacó a la salida de la Copa de Leche.
Una de las adolescentes agresoras estaba armada con una trincheta con la que le causó un profundo corte en el rostro a Leyla. Dicha lesión fue de semejante magnitud que para cerrarla fue necesario una intervención quirúrgica y darle 20 puntos de sutura.
Pese a que algunos chicos que compartían la merienda con Leyla intentaron atrapar a las agresoras, en rigor nada se sabe de ellas porque escaparon del lugar a la carrera.
No obstante trascendió que estas verdaderas “chicas malas” asisten a la misma escuela donde concurre la víctima, (escuela Padre Catena) y que algunas de ellas llegaron hace poco al barrio junto a sus familias procedentes de la Vuelta del Paraguayo.
La mamá de Leyla, María Angélica Martínez, explicó que “yo no voy cambiar a mi hija de escuela ni tampoco me voy a ir del barrio. Ella quiere hablar con la directora y con la ministra. Tiene miedo si la chica que la atacó va a seguir concurriendo. “Ella me dijo que le quiere escribir una carta a la ministra de Educación. Les va a pedir que se vayan estas nenas de la escuela o se va a ir ella”, culminó.
Grave
En tanto sigue siendo crítica la situación del pequeño Ian Moncada, el bebé que resultó con graves quemaduras tras un atentado en el domicilio de Sarsotti al 6800.
El pequeño permanece alojado en la sala de cuidados intensivos del hospital Alassia, con respiración asistida, en condición grave y con pronóstico reservado.
Todo tuvo lugar en la cuadra de Sarsotti al 6800, a pocos metros del predio del Mercado de Productores, dentro de una humilde vivienda.
Aproximadamente las 7 se desencadenó el lamentable episodio, mientras Uriel Moncada, de 14 años, y su hermanito Ian, que está por cumplir 2, miraban televisión en la pieza de sus padres. En ese momento, alguien golpeó a la ventana de la habitación. La madre, que justo pasaba por allí, corrió la ventana para ver quién era. Entonces, alguien arrojó desde afuera una botella de sidra con un líquido adentro que estalló al romperse contra el piso.
La onda expansiva hizo volar los vidrios en pedazos y provocó inmediatamente un incendio que alcanzó a los pequeños