El Litoral
EFE
Se registraron 63 heridos entre manifestantes y efectivos de seguridad durante la segunda jornada de protesta en contra de la violencia policial hacia miembros de la comunidad con origen etíope.
Por los disturbios, que tuvieron lugar en la Plaza Rabin de Tel Aviv, la policía israelí detuvo a 43 personas tras una verdadera batalla campal.
Galería de imágenes de la manifestación
Los agentes emplearon gas pimienta y gas lacrimógeno para hacer retroceder a los manifestantes, lo que acrecentó aún más la tensión y los enfrentamientos. El jefe de la Policía israelí, Yohanán Danino, dijo a los medios locales que sus agentes actuaron con “contención” y trataron de negociar en todo momento con los organizadores una salida, pero que en cualquier caso se trataba de !una concentración no autorizada”.
Las tensiones estallaron el pasado 26 de abril con la difusión por internet de un vídeo casero en el que dos agentes policiales blancos arrestaban violentamente y con un excesivo uso de la fuerza a un emigrante etíope en la ciudad de Holón.
Sin embargo, según los portavoces de la protesta con la salida a las calles lo que quieren en realidad es expresar su descontento por el ‘racismo‘ y la ‘discriminación‘ de las que son objeto por las autoridades y la población del país.
“El 70 % de los etíopes han sido concentrados en guetos en 17 localidades, creando tensiones con el resto de la población, y desde que nos colocaron allí no se acuerdan más de nosotros”, dijo Avi, uno de los miembros de la comunidad.
La protesta de ayer, que seguía a otra en Jerusalén no menos violenta el jueves, comenzó a primera hora de la tarde a la entrada sur de la ciudad, cuando los manifestantes bloquearon la principal autopista de Tel Aviv a la hora de salida de los trabajos, lo que provocó atascos kilométricos durante varias horas.