Danilo Chiapello
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Así como tiempo atrás fue La Llorona, hoy los santafesinos no duermen tranquilos a raíz de los quema-coches, los que esta madrugada dieron tres nuevos golpes.
A la cabeza de esta lista de potenciales víctimas, se encuentran todos aquellos que hacen “dormir” sus vehículos en la vía pública.
Así, últimamente al inicio cada jornada se está convirtiendo en una peligrosa “costumbre” el enterarse de quién o quiénes fueron los nuevos “bocados” de los incendiarios.
Desde marzo hasta la fecha, ya suman 30 los atentados con fuego, según consignó hoy el comisario Omar Aldorino, jefe de la Agrupación Bomberos Zapadores.
La situación ya alcanzó niveles de máxima preocupación no sólo entre los vecinos de la ciudad (los que sienten un lógico temor), sino también entre los responsables de la seguridad.
Es que hasta el momento no se tiene ninguna pista cierta con respecto a los autores de los ataques. En rigor, nadie sabe si esta secuencia es obra de un loco piromaníaco o si se trata de una banda organizada que persigue otros fines.
Atento a la situación, el jefe de la Unidad Regional I, comisario Adrián Rodríguez, dispuso un operativo especial del que tomaron partes distintas secciones de la fuerza.
Se sabe que hubo un aumento de la recorridas nocturnas, vigilancias en lugares estratégicos y control de las cámaras de vigilancia, aunque sin resultados positivos.
Hasta ahora, el o los incendiarios ganan la partida.
Últimos casos
El raid de esta madrugada se inició a la 1.15, cuando un Fiat Duna color bordó -modelo 1996- fue prendido fuego en Mendoza al 4700, esto es, en el corazón de barrio Santa Rosa de Lima.
A la emergencia acudieron los bomberos y las actuaciones fueron del personal de la subcomisaría 2ª de policía local.
El auto estaba estacionado frente a un taller mecánico adonde su dueño lo había llevado para realizarle una reparación.
Carlos Monzón, el encargado del local detalló en diálogo con este diario que se encontraba muy apenado por lo ocurrido.
“Es que el propietario del coche es gente humilde y trabajadora. Usaba el vehículo para llevar mercadería a El Trueque.
Justo había terminado las reparaciones recientemente y estaba listo para ser retirado por su dueño.
Agregó que en la madrugada escuchó ruidos afuera y que un miembro de su familia salió a ver qué pasaba y vio que se estaba quemando el auto. Precisó además que entre los vecinos combatieron las llamas hasta que se produjo la llegada de los bomberos.
Por último, el mecánico explicó que “de alguna manera yo voy a ayudar al dueño del coche. Trataré de conseguir algún auto para que pueda seguir haciendo su trabajo”, culminó.
* 50 minutos después del primer ataque alguien quemó otro vehículo.
En este caso, fue un Fiat Uno color negro, incendiado en la esquina de Teniente Loza y Reutemann del barrio Abasto, en el noroeste de la ciudad.
Una dotación del Cuartel Norte de Bomberos Zapadores asistió al lugar para apagar las llamas aunque los daños fueron totales.
* Por último, en Pje. Parpal al 4040 del barrio Villa Hipódromo otro auto fue incendiado cerca de las 3.
Se trató de un Fiat Duna celeste que estaba estacionado en la vía pública.
Según reportaron voceros de Bomberos, una cuadrilla del Cuartel Central de Bomberos Zapadores llegó al lugar y apagó el fuego.
El rodado quedó inutilizado por completo por la acción de las llamas.
Fuego provocado
* Cabe destacar que en ninguno de los siniestros hubo personas afectadas y que, según distintas fuentes consultadas, la pista más fuerte es que los incendios fueron provocados.
“Nosotros no descartamos que antes del fuego pudo haber aspersión del algún elemento combustible sobre los rodados siniestrados”, indicó el jefe de los Bomberos.
“En todos los casos cuando llegamos encontramos un incendio generalizado, por lo que sospechamos que se pudo utilizar algún acelerante”, explicó.
Mapa de los incendios
A la cabeza de esta lista de potenciales víctimas, se encuentran todos aquellos que hacen “dormir” sus vehículos en la vía pública.
Así, últimamente al inicio cada jornada se está convirtiendo en una peligrosa “costumbre” el enterarse de quién o quiénes fueron los nuevos “bocados” de los incendiarios.
Desde marzo hasta la fecha, ya suman 30 los atentados con fuego, según consignó hoy el comisario Omar Aldorino, jefe de la Agrupación Bomberos Zapadores.
La situación ya alcanzó niveles de máxima preocupación no sólo entre los vecinos de la ciudad (los que sienten un lógico temor), sino también entre los responsables de la seguridad.
Es que hasta el momento no se tiene ninguna pista cierta con respecto a los autores de los ataques. En rigor, nadie sabe si esta secuencia es obra de un loco piromaníaco o si se trata de una banda organizada que persigue otros fines.
Atento a la situación, el jefe de la Unidad Regional I, comisario Adrián Rodríguez, dispuso un operativo especial del que tomaron partes distintas secciones de la fuerza.
Se sabe que hubo un aumento de la recorridas nocturnas, vigilancias en lugares estratégicos y control de las cámaras de vigilancia, aunque sin resultados positivos.
Hasta ahora, el o los incendiarios ganan la partida.
Últimos casos
El raid de esta madrugada se inició a la 1.15, cuando un Fiat Duna color bordó -modelo 1996- fue prendido fuego en Mendoza al 4700, esto es, en el corazón de barrio Santa Rosa de Lima.
A la emergencia acudieron los bomberos y las actuaciones fueron del personal de la subcomisaría 2ª de policía local.
El auto estaba estacionado frente a un taller mecánico adonde su dueño lo había llevado para realizarle una reparación.
Carlos Monzón, el encargado del local detalló en diálogo con este diario que se encontraba muy apenado por lo ocurrido.
“Es que el propietario del coche es gente humilde y trabajadora. Usaba el vehículo para llevar mercadería a El Trueque.
Justo había terminado las reparaciones recientemente y estaba listo para ser retirado por su dueño.
Agregó que en la madrugada escuchó ruidos afuera y que un miembro de su familia salió a ver qué pasaba y vio que se estaba quemando el auto. Precisó además que entre los vecinos combatieron las llamas hasta que se produjo la llegada de los bomberos.
Por último, el mecánico explicó que “de alguna manera yo voy a ayudar al dueño del coche. Trataré de conseguir algún auto para que pueda seguir haciendo su trabajo”, culminó.
* 50 minutos después del primer ataque alguien quemó otro vehículo.
En este caso, fue un Fiat Uno color negro, incendiado en la esquina de Teniente Loza y Reutemann del barrio Abasto, en el noroeste de la ciudad.
Una dotación del Cuartel Norte de Bomberos Zapadores asistió al lugar para apagar las llamas aunque los daños fueron totales.
* Por último, en Pje. Parpal al 4040 del barrio Villa Hipódromo otro auto fue incendiado cerca de las 3.
Se trató de un Fiat Duna celeste que estaba estacionado en la vía pública.
Según reportaron voceros de Bomberos, una cuadrilla del Cuartel Central de Bomberos Zapadores llegó al lugar y apagó el fuego.
El rodado quedó inutilizado por completo por la acción de las llamas.
Fuego provocado
* Cabe destacar que en ninguno de los siniestros hubo personas afectadas y que, según distintas fuentes consultadas, la pista más fuerte es que los incendios fueron provocados.
“Nosotros no descartamos que antes del fuego pudo haber aspersión del algún elemento combustible sobre los rodados siniestrados”, indicó el jefe de los Bomberos.
“En todos los casos cuando llegamos encontramos un incendio generalizado, por lo que sospechamos que se pudo utilizar algún acelerante”, explicó.
Mapa de los incendios
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