Por primera vez en la historia de los Mundiales de Rugby el equipo local y organizador quedó eliminado en la primera fase: Inglaterra tenía la obligación de vencer a Australia, pero estuvo lejos y perdió 33 a 13. Claro que esto no pasó desapercibido: se trata de una de las potencias, el país que inventó el rugby, y la unión de rugby más poderosa del mundo en el aspecto económico.