Ayer y hoy. Hace cuatro años, sólo había un gran terreno vacío. Con la apertura de calles, iluminación y otras obras de infraestructura, las primeras industrias ya comenzaron a producir en Los Polígonos I (Teniente Loza y Camino Viejo a Esperanza). Fotos: Amancio Alem y Guillermo Di Salvatore
El noroeste de la ciudad se afianza como un polo industrial y logístico. A cinco años de la creación del primer parque para la radicación de industrias de Santa Fe, ya no quedan terrenos disponibles. En Los Polígonos I, un predio de 22,5 hectáreas, hay cinco firmas produciendo, otras cinco están a punto de terminar la construcción de sus plantas y planean inaugurar este año, diez más lo harán en 2016, y otras seis ya reservaron lotes para instalar sus empresas.
Con este impulso, lo que hace un lustro era un gran terreno vacío, hoy cobija inversiones e infraestructura adecuada para generar en forma directa unos 300 empleos y de modo indirecto otros 500, según se proyecta.
Con el Mercado Abastecedor de Frutas y Verduras como vecino pionero, Los Polígonos II se sumará a un área que busca concentrar la producción local. Hace una semana, el Concejo Municipal dio el visto bueno a la creación de la segunda parte del área industrial de la ciudad. El nuevo predio tendrá unos 150 metros de ancho y 600 metros de largo, y estará dividido por una avenida central, que conectará Monseñor Rodríguez con Teniente Loza. Se generarán allí más de 50 lotes para la radicación de firmas.
Además, al otro lado de la avenida Circunvalación, se reservó un predio de 100 hectáreas para convertir a Santa Fe en la rotonda logística del país. Interpuertos se proyecta como un parque para descarga y despacho de hacienda, depósitos y servicios.
La transformación de la zona es evidente. Grandes estructuras cobraron vida, mientras otras crecen al ritmo del esfuerzo de albañiles, herreros, soldadores y pintores que cada día llegan al predio para dar forma a las futuras plantas industriales. Calles asfaltadas, con mejorado e iluminación, son parte de la nueva infraestructura, a la que pronto se sumará mayor presión de agua potable, cuando finalice la construcción del Acueducto Santa Marta.
“Tenemos más proyectos que lotes”, contó Pablo Tabares, el secretario de Producción de la Municipalidad de Santa Fe, para dar cuenta de la importancia que tiene la creación del nuevo espacio. “En Los Polígonos I, quedan seis lotes vacantes pero ya están reservados con los proyectos de radicación que tenemos en estudio”.
Para el funcionario, el punto fuerte del área es su capacidad de dinamizar la economía, generar puestos de trabajo y radicar inversiones que quedan en la ciudad y “mejoran la rentabilidad general de la economía santafesina”. Como ejemplo citó un caso concreto: “Antes de que aquí comience a funcionar una planta de tratamiento ecológico, los generadores de residuos patológicos tenían que enviarlos a Rosario o a Concordia. Ahora tenemos una acá, lo cual beneficia indirectamente a la economía general porque significa una mejora de costos para quienes utilizan el servicio, entre otros beneficios”.
El gas natural nunca llegó. Y esto “limita a las empresas que requieren un uso intensivo pero se han radicado otro tipo de empresas que no lo necesitan; y a pesar de esa restricción ya completamos el parque porque tiene otras potencias como el lugar estratégico donde está ubicado”, afirmó Tabares.
Concentrar industrias en un único lugar, y trasladarlas del área urbana genera beneficios extras e impacta positivamente en los barrios que las “soportaron” durante años.
“Las empresas que vienen acá son nuevas o se trasladan porque les ha quedado inapropiado el lugar donde funcionaban, ya sea por la misma dinámica del desarrollo urbano o porque necesitan otro tipo de superficie y no pueden ampliar. Además, tienen problemas en la convivencia con los vecinos por los ruidos que generan y el tránsito de camiones de gran porte, con lo cual hasta deben implementar mecanismos para entrar a la madrugada”, destacó el subsecretario de Industrias, Julio Tealdo.
“Es notable cómo responden los industriales para apropiarse del terreno, aparecen los inversores y los proyectos cuando desde el Estado se dan las condiciones mínimas, que en este caso no fue más que un lugar destinado a tal fin con infraestructura básica”, finalizó Tabares.
Las empresas Para los pocos lotes que quedan vacíos en Los Polígonos I, ya han hecho sus reservas Heladería Trevi, un astillero, una fábrica de muebles para edificios, una empresa que provee gas y oxígeno medicinal envasado. Sus proyectos de inversión y producción están siendo estudiados. El resto de las empresas que se radicaron, o están construyendo sus plantas son: Papelera Doble V, Efiplast, Descansito, Distriver, Indaquin, Hein, Asistotel, Agronegocios, Puyer, Figan, Pilar, Vidrios y Aberturas, Establecimiento Metalúrgico Santa Fe, Guillermo David Amoblamientos, Horn y Cía., Automatismos Santa Fe, Tatú Muebles, Renzi Hnos. Amoblamientos, Sanitek, El Tero, Gianabe, Inger, Tecsus y Ersa.
En construcción. Numerosos obreros llegan al predio cada día para levantar los edificios que albergarán los nuevos emprendimientos. Fotos: Guillermo Di Salvatore.
/ Dos firmas que apostaron
“Un lugar estratégico y necesario”
La creación de un Parque Industrial le permitió a Mauro Rímolo poner en marcha un sueño, y a la ciudad sumar una actividad de la que adolecía: una planta de tratamientos de residuos patológicos. Hasta este año, cuando se habilitó la firma Tecsus en Los Polígonos I, todos los desechos de este tipo que producían hospitales y centros médicos debían ser trasladados a Rosario o a Concordia. “Este parque era para nosotros un lugar sumamente necesario porque generamos un impacto ambiental y no podemos establecernos en cualquier parte de la ciudad; necesitamos un lugar controlado y acá lo tenemos”, resaltó Rímolo, socio y representante técnico de la firma. Entre las grandes fortalezas del predio destacó su ubicación: “Está estratégicamente ubicado porque no sólo recibimos residuos generados en Santa Fe sino también en Santo Tomé. Poder ingresar por circunvalación es clave para nuestro funcionamiento porque es mucho más seguro que el residuo patológico que se retira de los lugares que lo generan tengan un acceso externo y no circulen por la ciudad”. Su proyecto debió sortear una minuciosa evaluación antes de ser aprobado como uno de los habilitados para instalarse en Los Polígonos I. Según contó, “había tanta demanda de terrenos que tuvimos que hacer un proyecto y presentarlo, no sólo ante funcionarios municipales, sino también ante otras entidades como el Colegio de Ingenieros, la UNL y muchos más que evaluaron las factibilidades de nuestra propuesta". Al ser unos de los primeros en radicarse, Rímolo tiene una participación activa en la conformación de un consorcio que tome decisiones para el gerenciamiento del parque.
En marcha. Mauro Rímolo es socio y representante técnico de Tecsus, la primera planta de tratamiento de residuos patológicos que se radicó en Santa Fe.
“Mayor escala de producción”
Imponente. Así es la nueva planta que proyecta en Los Polígonos I Figan, la firma que deleita con sus carnes porcinas magras. La primera etapa ya está lista y se inaugurará en los próximos días. Pero al ingresar, la maqueta de una futura ampliación exhibe la ambiciosa meta de expansión que planea la firma para sus próximos años. Por eso compró dos lotes. Algo imposible de proyectar en el lugar donde se ubica actualmente el frigorífico. “Estamos en Quintana y Saavedra, es una casa modificada transformada en frigorífico con muchísimas falencias porque ni siquiera tenemos para hacer tratamiento de efluentes. No está dentro del reglamento de zonificación e indudablemente afecta el entorno y la ciudad y tenemos problemas con eso”, contó Carlos Ingino, su titular. Con la nueva planta “tendremos mayor comodidad para trabajar, mejor logística y más escala porque nos permitirá crecer y expandirnos a todo el país, antes no podíamos ni pensarlo”. Las cámaras frigoríficas y las maquinarias, algunas importadas, están listas para comenzar a funcionar. “Estamos muy ilusionados. En este momento en que la economía general no está muy bien, nosotros estamos terminando de consolidar nuestro proyecto y vamos a crecer mucho en los próximos años. Este predio, que hace cuatro años era una ruina, hoy está generando un montón de oportunidades a los santafesinos y a los inversores que nos animamos a correr riesgos y a generar empleo. Es parte de lo que tienen que hacer los gobiernos: generar condiciones para que se puedan radicar empresas, generar empleo e inclusión”, finalizó Ingino.
A punto. Carlos Ingino, de Figan, está dando los últimos ajustes a su planta de producción de carne porcina. Proyecta una futura ampliación.