De la Redacción de El Litoral
Las instituciones educativas que ofrecen talleres de oficio y cursos de formación profesional, expusieron hoy -de 10 a 15 horas- sus productos y quehaceres en la Plaza Pueyrredón.
De la Redacción de El Litoral
Desde el aprendizaje de oficios, desde la lógica del “hacer” con las manos, desde la concepción de que el trabajo dignifica y posibilita el desarrollo individual y social, se realizó hoy la “Megamuestra de formación laboral-profesional” en la plaza Pueyrredón.
Tras haber sido suspendida dos veces por las lluvias, la tercera fue la vencida. El clima de esta mañana propició que alrededor de 50 instituciones de la ciudad -que dictan oficios-, expusieran sus trabajos y quehaceres.
“La megamuestra incluye a escuelas primarias de adultos, talleres de educación manual, Centros de Capacitación Laboral para Adultos (Cecla), Centros de Alfabetización y Educación Básica de Jóvenes y Adultos (Caeba) y escuelas técnicas que tienen formación profesional. La idea es poner en valor ante la comunidad todos los quehaceres de la educación laboral que posibilita un proyecto de vida, la inserción en un trabajo o un emprendimiento propio”, dijo Rafael Bono, director de la Regional IV de Educación, que organizó el evento.
La oferta laboral es para jóvenes y adultos y abarca una variadísima gama de oficios. Desde las especialidades de carpintería, cerámica, encuadernación, mimbrería, aeromodelismo, pintura decorativa, bobinado, refrigeración y aire acondicionado, electricidad, soldadura, radio y tv, modista, tejeduría, productor artesanal, hasta la oferta profesional de secretariado ejecutivo, reparación de PC, entre tantos otros. “Tenemos 7.500 alumnos en los talleres manuales y en la formación profesional dentro de toda la regional”, aportó Bono.
Claudia es una vecina del barrio Centenario y asiste a los talleres nocturnos de la escuela Colón, donde aprendió a fabricar hermosas carteras. “Alimento a mi familia con este oficio”, dijo la mujer a El Litoral.
Dos maestros de la escuela Nº 637 Domingo Cullen señalaron que la demanda para aprender determinados oficios es muy alta. “El curso de refrigeración y aire acondicionado dura 2 años y se llena: 70 alumnos por año vienen buscando una salida laboral inmediata”, comentaron.
La megamuestra era recorrida por chicos de escuelas primarias invitadas. Las demostraciones “en vivo” concitaban atracción: había estudiantes fabricando canastos de mimbre, haciendo alfarería, soldadura o carpintería. En otras mesas se mostraban los productos elaborados: tejidos, cajitas forradas, cuadros, repostería, tinturas ecológicas y hasta un glamoroso vestido de fiesta en un maniquí.
“La novedad este año es que los talleres de oficios recibirán ‘créditos’ para que puedan continuar estudiando en el sistema de educación superior. En este contexto económico, que no es sencillo, queremos que la educación ofrezca la mayor cantidad de posibilidades para que los jóvenes puedan tener un trabajo”, dijo la ministra de Educación, Claudia Balagué, al inaugurar la muestra.