El Litoral
Dijo que aspiran a que “todos los sectores políticos se unan” para votar las leyes, y aseguró que están “abiertos a todos los proyectos”.
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Ivana Fux - [email protected]
A pesar de las críticas de la oposición, el Jefe de Gabinete de la Nación, Marcos Peña, se mostró hoy confiado en que el Congreso convalidará el paquete de medidas anunciadas este viernes por Mauricio Macri para pagar juicios a jubilados y blanquear capitales.
Consultado por El Litoral después de presidir un acto junto a José Corral para la construcción de viviendas en la ciudad, el funcionario dijo que se trata de un “anuncio histórico que, en trascendencia, implica resolver el default interno que había”, ya que la deuda con los jubilados “era un motivo de vergüenza para el país”.
“Por las primeras conversaciones que hemos tenido, hay un espíritu bastante amplio de acompañamiento. Obviamente habrá que dar el debate parlamentario puntual de los temas pero aspiramos a que todos los sectores políticos nos unamos para cerrar esta herida y estar a la altura de la dignidad que implica la posibilidad de que nuestros abuelos tengan la jubilación que se merecen”, planteó.
Según estimó, son “alrededor de 2,5 millones de pasivos que tienen situaciones de deuda, la minoría con sentencia judicial y otros que han iniciado los juicios aunque no tienen sentencia, más otros casi dos millones que no han iniciado el proceso judicial”.
Peña dijo que se trabajará “para hacer acuerdos individuales” a fin de poder determinar “la recomposión del haber y discutir lo pendiente en los casos en que haya sentencia”.
El funcionario aseguró que “siempre estamos dispuestos a dialogar”, a propósito del senador Miguel Pichetto (FPV), quien anunció que presentará su propio proyecto de blanqueo de capitales. “Uno de los cambios de esta Argentina es que el Congreso funciona de verdad; hay diálogo y todos los proyectos se han podido discutir y trabajar. Estamos abiertos a todos los proyectos que se puedan presentar tanto en el Senado como en Diputados”.
Demandas sociales
Sobre las demandas sociales derivadas del aumento de tarifas, la inflación y la pérdida de empleo en los últimos meses, Peña volvió a esbozar el argumento de la actual gestión al sostener que Macri “recibió una economía muy complicada, que en cualquier otro contexto histórico hubiera generado una gran crisis como la de 2001. Sin dudas -reiteró-, la Argentina iba rumbo a terminar como Venezuela con una economía colapsada”.
Sobre esa base, insistió en que “hay que hacer enormes sacrificios para evitar una gran crisis, ya que la verdad ha sido puesta debajo de la alfombra durante muchos años”.
Peña aseguró que “según las estadísticas oficiales, no ha habido una merma del empleo, sino que por el contrario, las grandes empresas están pensando en generar más trabajo e inversión”.
El funcionario aseveró que “a partir de julio vamos a tener una inflación más baja, y ése será probablemente uno de los cambios más importantes junto al aceleramiento de la obra pública y de la inversión privada”.
Según explicó, “todo ello irá tomando velocidad a lo largo del segundo semestre y lo vamos a ir viendo cada vez más fuerte el año que viene. Estamos convencidos de que estamos terminando el peor momento de esta transición económica y vamos a tener a partir de ahora una mejora sustancial”.
Francisco con Hebe
Peña, consultado por El Litoral, opinó también sobre la visita de Hebe de Bonafini al Papa Francisco, con quien estuvo cerca de dos horas mientras que al presidente sólo lo había recibido durante veinte minutos.
“Tenemos un enorme respeto por el Papa. Creemos que todos los argentinos nos tenemos que unir detrás de ese sentimiento y no tratar de llevarlo a la política interna, sino entender que lo que él hace es en función de su tarea que es muy importante, no sólo para los argentinos sino para toda la humanidad. Entonces, para nada sentimos ni interpretamos ninguna acción del Papa como una injerencia en política interna. Nos parece bien que en este año, como lo han planteado algunos voceros de la Iglesia, de la misericordia haya espacios donde las personas se encuentren y dialoguen. Nunca el encuentro de dos argentinos nos puede parecer algo que atente contra los argentinos. El diálogo no se da siempre entre dos personas que piensan lo mismo; el diálogo también se debe dar entre aquellas personas que tienen diferencias”, comentó.
Según interpretó, el encuentro papal es “un mensaje sobre la necesidad de que los argentinos nos encontremos a partir del diálogo y la palabra. No vemos allí ninguna cuestión ni compleja ni rara de parte del Papa”, concluyó.