El Litoral
El muchacho de 28 años falleció de un disparo en la axila. Cuatro ladrones en moto lo mataron para sustraerle el teléfono. Los vecinos escucharon cuando la víctima rogaba para que no lo asesinen
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Corresponsalía Rosario
Un joven de 28 años fue asesinado de un balazo en el pecho luego de que dos motociclistas le robaron su teléfono celular en la esquina de Italia y Amenábar.
Este nuevo hecho suma 129 crímenes en Rosario en lo que va del año, una cifra que muestra que el número de homicidios no logra descender en la ciudad.
Anoche, cerca de las 20, Nahuel Ciarroca fue abordado por cuatro ladrones que se movían en dos motos. Tras sustraerle el celular, los asaltantes le dispararon al joven, que quedó tendido en el piso con un bolso de mano. Entre sus pertenencias la policía detectó que le faltaba un celular Samsung J7, que sus familiares confirmaron que había comprado recientemente. Ese dato orienta la investigación como un homicidio en ocasión de robo.
Ciarroca volvía de la casa de sus padres que viven en la zona y se dirigía a su casa en Bv. Seguí al 2200. Tras el hecho, los aparentes agresores abrieron fuego contra una vecina que pasaba en automóvil que no vio el hecho. Se estima que lo habrían hecho para amedrentarla mientras huían. Ese vehículo fue remitido para peritarse.
“Fue muy feo lo que pasó. Cerca de las 20 escuché a alguien que decía: ‘por favor, no Flaco. Por favor’. Y luego un disparo. Cuando salí a la vereda estaba el chico tirado y llamamos a la ambulancia, que tardó más de media hora en llegar. Nahuel murió cinco minutos antes de que llegara la ambulancia. Fue muy feo porque el muchacho se murió frente a los vecinos”, describió Hernán, un vecino del barrio, que como otra gente del lugar estaba conmocionado por el hecho.