Télam La prisión domiciliaria de la esposa de un jefe de la banda “Los Monos” y la reciente autorización para viajar a visitar a su marido a la prisión de Rawson, donde está detenido, generó la alama del fiscal de Rosario que investiga a la organización narcocriminal, quien apeló la última medida ante el riesgo de fuga, informaron hoy fuentes judiciales. La Cámara Federal de Rosario ratificó ayer la decisión del juez federal 4, Marcelo Bailaque, de conceder la prisión domiciliaria a Vanesa Jaquelina Barrios (30), la esposa de Ariel Máximo “Guille” Cantero (27), otorgada en diciembre último. El juez basó su decisión en que la mujer tiene una hija de un año, quien posee el derecho a ser criada en un ámbito familiar por uno de sus progenitores al menos hasta cumplir cinco, como lo establece la ley. Pero además, Bailaque le otorgó en junio autorización para viajar trimestralmente y durante cinco días a Rawson, para visitar junto a su hija a su marido, el jefe de “Los Monos” Guille Cantero, detenido allí en una causa por narcotráfico. El fiscal federal 3 de Rosario, Federico Reynares Solari, dijo hoy a Télam que la decisión del juez Bailaque “podría colocar a la mujer en la misma situación en la cual fue procesada”. La condena Barrios fue procesada junto a Cantero como organizadora de una asociación ilícita dedicada al tráfico de drogas. El juez la imputó por ejecutar órdenes que recibía de su pareja, “quien le daba directivas desde su lugar de detención” cuando estaba arrestado en Rosario por delitos que se ventilan en la Justicia ordinaria de esta ciudad. Reynares Solari, que apeló la autorización otorgada a la mujer para viajar a Rawson a visitar a su marido, dijo que el permiso le podría posibilitar “repetir el modus operandi” por el que fue procesada por narcotráfico. En un recurso de queja ante la Cámara, el fiscal señala que la autorización podría traer aparejado “riesgo procesal”, ya sean tanto por la posibilidad de fuga cuanto por el entorpecimiento de la investigación. El fiscal argumentó que “si bien no existen dudas sobre la importancia de que el niño se desarrolle en un medio adecuado, en ciertas ocasiones su interés superior impone mantener la detención de sus progenitores, como único modo para garantizar la efectiva tutela de sus derechos”. En esa línea, afirmó que “la materialización del contacto entre la menor y su padre podría concretarse por otro medio distinto del dispuesto” por el juez, “que igualmente garantice los derechos consagrados en la Convención sobre los Derechos del Niño”. Cantero fue procesado junto a Emanuel Chamorro (27) -lugarteniente de la banda- y las esposas de ambos (Barrios y Jesica Lloan -23-) por liderar una banda narco desde la cárcel de Piñero, donde los varones estaban detenidos. Según la acusación, por vía telefónicas daban la órdenes a sus mujeres para continuar con el tráfico de estupefacientes. En un operativo realizado en noviembre del año pasado la Policía detuvo a 22 personas y secuestró 11 kilos de cocaína, 700 de marihuana y precursores químicos, pertenecientes a la organización que Cantero lideraba desde la cárcel.