Fuente: Télam
Homenajeado en Dolores como “Ciudadano ilustre” por ser su lugar de origen, y reconocido con el “Lobo de Mar” en Mar del Plata como deportista destacado, Jorge Mario Olguín, no ahorró críticas “al sistema”.
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“Estamos afuera, los del78 y también los del86”, indicó Olguín luego de dirigir en Costa Rica y haciendo un trabajo de “Coordinador de Inferiores” en Villa Dálmine. “En otros países, a los que fueron campeones del mundo los honran, pero aquí no tenemos ni plateas para ver a la selección”, se confesó con Télam.
Olguín, de 64 años, se inició en Club Alvarado de Mar del Plata. “Debuté a los 14 años, récord allá si se tiene en cuenta que llegué a la selección que ganó el Mundial78”, destacó. Y recordó una crónica marplatense del 67: “El pibe Olguín es siempre una pelota bien jugada”, dijo el diario La Capital.
“Los prejuicios por la tragedia argentina en plena dictadura militar bajaron el valor del triunfo futbolístico. Sin caer en polémicas, a Perú ya le habíamos ganado, acá y allá. El 2 a 0 en el primer tiempo y el clima en el Gigante de Arroyito los durmió. Al principio no pintaba para goleada”, evocó.
“En el Mundial de España 82 hubo dos problemas: la guerra en Malvinas que nos quitó concentración, con mensajes de los familiares realmente aterradores, y el relajamiento físico que nos quitó potencia si lo comparamos con el anterior”, describió.
Y respecto del preparador físico Ricardo Pizzarotti admitió que “no tenía el mismo poder que cuatro años antes. Y César Menotti, artífice en la preparación del Mundial 78 tampoco tuvo el mismo método. Nada fue igual y perdimos tres partidos”.
“Antes, Julio Grondona y después la cultura general en la dirigencia y los ámbitos institucionales no se modificó. Grupos del Poder en AFA. también los clubes, las barras y organizaciones, Agremiados, Técnicos, son los mismos. Piensan corporativamente”, sostuvo el polifuncional defensor.
“Los clubes son conducidos por profesionales, abogados, contadores, gente de empresas, referentes del Poder político, económico. Los jugadores, salvo excepciones, estamos afuera. Pero no nos consultan, no existimos”.
Olguín puso un ejemplo claro, “Un caso testigo: hace dos años el querido Negro (Oscar Alberto) Ortiz tuvo un problema de salud. Nadie hizo nada. Figura en San Lorenzo campeón en el74, en River77 y mundialista. Apenas un par de muchachos ayudamos”, repitió.
Olguín destacó que “faltan docentes en inferiores y como dice Diego (por Maradona) decentes en la conducción principal, antes criticando a la FIFA y últimamente a AFA. Los dirigentes que piensen en el club, sus socios, los chicos y no tanto en negocios”.
“De los técnicos siempre valoré a César (por Menotti) por mí convocatoria a la selección cuando se puso a la hinchada de Boca en contra por no llevar a nadie. En un amistoso en Mar del Plata nos silbaron como si jugáramos en otro país”, ironizó.
“Pero curiosamente asimilé mucho de Osvaldo Zubeldía, aunque parezca contradictorio. Su método, experiencia, capacidad para ver el fútbol. A diferencia del Flaco que no le interesaba mucho el rival, cuando Osvaldo llegó a San Lorenzo enseguida tomó la onda y fuimos campeones de nuevo en el Nacional 74”.
En cambio remarcó que nunca se sintió “cerca ni de Juan Carlos Lorenzo ni tampoco de Carlos Bilardo, porque sus métodos y algunas artimañas no iban conmigo ni con otros. Una cuestión de gustos o de estética. Aunque los dos me tuvieron en cuenta”, comentó extrañado.
“Con el Toto (por Lorenzo) fuimos bicampeones en el 72. Y con Bilardo, en San Lorenzo 79 me tuvo y me quiso llevar a la selección más tarde, pero desistí”, concluyó Olguín, siempre una pelota bien jugada. También en la vida. Al punto que acaba de presentar un proyecto para dirigir a los seleccionados juveniles argentinos (hay 44 para analizar en AFA) junto a otros dos campeones mundiales de 1978 como Omar Larrosa y Leopoldo Jacinto Luque.