El primer paso resultó más que exitoso: el elenco nacional derrotó 2-0 a México, con goles de Maximiliano Espinillo y Silvio Velo.
Con el antecedente de haber ganado su primer Mundial en Río de Janeiro, en 2002, la Selección Argentina de fútbol para ciegos dio el puntapié inicial hacia su objetivo: obtener el máximo título del deporte adaptado, la medalla dorada en un Juego Paralímpico.
El primer paso resultó más que exitoso: el elenco nacional derrotó 2-0 a México, con goles de Maximiliano Espinillo y Silvio Velo.
Los Murciélagos afrontan este torneo con un plantel de enorme jerarquía, que finalizó segundo en el Mundial 2014 de Tokio y ganó los Juegos Mundiales de IBSA en Seúl, el año pasado.
El partido se jugó en el Centro Olímpico de Tenis, en la misma cancha que vio subirse al podio a Juan Martín Del Potro en los Juegos Olímpicos. Y la Selección arrancó con un triunfo. Que el camino también los lleve a una medalla.
El plantel argentino
Arqueros: Darío Lencina (Estudiantes de La Plata) y Germán Muleck (Rosell de San Isidro)
Futbolistas ciegos: Silvio Velo (Boca Juniors), Lucas Rodríguez, Nicolás Véliz (Municipalidad de Córdoba), Froilán Padilla, Federico Acardi, Maximiliano Espinillo (Godoy Cruz Uniredes de Mendoza), Ángel Deldo (ACHADEC de Resistencia, Chaco) y David Peralta (Estudiantes de La Plata).
Suplentes: Guido Consoni (arquero, Estudiantes de La Plata); Nahuel Heredia (Municipalidad de Córdoba); Marcelo Paniza (River Plate); Iván Figueroa (UCASE de Santiago del Estero).
Entrenadores: Martín Demonte, Claudio Falco y Germán Márquez.