El Litoral
El ministro de Hacienda, Alfonso Prat-Gay, presentó este jueves en el Congreso el proyecto para el año próximo. A fin de mes se enviará el proyecto para modificar Ganancias.
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DyN
El ministro de Hacienda, Alfonso Prat-Gay, presentó hoy en el Congreso el proyecto de Presupuesto para el año próximo, que prevé un crecimiento económico del 3,5 por ciento; una inflación del 17 por ciento, y un déficit fiscal que subirá 4,2 por ciento y adelantó que “antes de fin de mes” se enviará la modificación del Impuesto a las Ganancias.
El ministro también adelantó que el Gobierno enviará al Parlamento otros dos proyectos de ley que consideró complementarios al Presupuesto: uno de “eliminación gradual de los superpoderes” que tiene la Jefatura de Gabinete para modificar partidas presupuestarias, y el otro de “Ley de responsabilidad fiscal”.
Ante el plenario de la Comisión de Presupuesto y Hacienda de la Cámara de Diputados, Prat-Gay sostuvo "este es un presupuesto basado en la verdad, gracias a que hemos recuperado la confiabilidad del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), y no estamos ocultado nada”.
“Estimamos la totalidad del gasto para evitar modificarlo a mitad de año a través de un decreto de necesidad y urgencia (DNU)”, en referencia a las prácticas utilizadas por la gestión anterior.
El jefe del Palacio de Hacienda precisó que el Producto Bruto Interno (PBI) llegará a casi 10 billones de pesos el año próximo, con una suba del 3,5 por ciento; mientras que la inflación anual será del 17 por ciento y se prevé una cotización del dólar de casi 18 pesos.
Sobre las variables presentadas en el Presupuesto, surge que la Argentina volverá en 2017 – y luego de varios años en que se buscó siempre mantener el superávit- a su balanza comercial con un rojo estimado en 1.846 millones de dólares.
Prat-Gay dijo que la pauta de crecimiento económico del 3,5 por ciento es “conservadora”, pero remarcó que “de cualquier manera representa la tasa de crecimiento más alta de los últimos seis años” y aclaró que la inflación se ubicará “en un rango del 12 al 17 por ciento”, aunque especificó que las proyecciones se hicieron sobre la base del último porcentaje.
Sobre este punto, y tras destacar que el Gobierno está reduciendo mes a mes los niveles de inflación, el titular de la cartera económica expresó que redundará “en una mejora del poder de compra” especialmente de los jubilados, que recibirán de los aumentos por la movilidad jubilatoria, ingresos por la “reparación Histórica”.
En lo que hace al déficit fiscal, que crecerá un 4,2 por ciento, Prat-Gay admitió que ese porcentaje “es más alto” que el 3,3 por ciento que había calculado el Gobierno originalmente.
Al respecto, planteó que “ser más agresivos en la reducción del déficit fiscal mataría la incipiente recuperación” económica, lo cual “recaería en los que menos tienen”.
En relación al nivel de gasto, que tendrá una expansión del 22,4 por ciento, Prat-Gay señaló que las previsiones a la seguridad social aumentarán 35 por ciento, la promoción y asistencia social del 37 por ciento y los gastos de capital un 32 por ciento, dentro de los cuales “las partidas para el Plan Belgrano aumentarán un 41 por ciento”.
En cuanto a las exportaciones previstas se estiman ingresos por 64.278 millones de dólares contra 66.124 millones de dólares de importaciones, lo que arroja un déficit de la balanza comercial de 1.846 millones de dólares.
Acerca de la recaudación tributaria, se estima que crecerá un 26,8 por ciento hasta alcanzar los 2,5 billones de pesos en 2017.
Por otra parte, Prat-Gay adelantó que “antes de fin de mes se enviará un proyecto para modificar en forma gradual las escalas del impuesto a las ganancias” y señaló que el Poder Ejecutivo está dialogando con las provincias para hacerlo en forma consensuada.
También mencionó una iniciativa para la “eliminación gradual de los superpoderes”, es decir “una modificación de la ley de administración financiera, para reducir gradualmente” las atribuciones que el jefe de Gabinete tiene para modificar partidas.
Además, se enviará un proyecto de ley de responsabilidad fiscal, que contemplará “una nueva fórmula”, que la Nación acordará con los gobernadores para “ir devolviendo el 15 por ciento de coparticipación federal a las provincias”, según lo establecido por el fallo de la Corte Suprema de Justicia.